Bancos y cajas endurecen el acceso de las familias al cr¨¦dito para vivienda

Las familias espa?olas demandan cada vez m¨¢s cr¨¦ditos para comprar una vivienda, pero los bancos son m¨¢s exigentes al concederlos. El Banco de Espa?a constata en su ¨²ltimo informe que ese endurecimiento en las condiciones de los pr¨¦stamos viene determinado por las dudas sobre la evoluci¨®n del mercado de la vivienda. Precisamente el esfuerzo inversor de las familias para comprar un piso redujo a la mitad su capacidad de financiaci¨®n en 2003.

Los criterios para aprobar cr¨¦ditos a los hogares, as¨ª como los m¨¢rgenes y las garant¨ªas requeridos, se endurecieron en el primer trimestre del a?o por sexto periodo consecutivo. El Banco de Espa?a incorpora este an¨¢lisis en la encuesta sobre pr¨¦stamos bancarios en Espa?a referente al primer trimestre del a?o. La entidad hizo p¨²blico ayer este sondeo junto con su bolet¨ªn econ¨®mico relativo al mes de mayo. El principal motivo que se?alan las entidades financieras para endurecer el cr¨¦dito destinado a la compra de un piso es la perspectiva del mercado de la vivienda.

La situaci¨®n en el mercado inmobiliario repercute tambi¨¦n en una mayor exigencia para dar pr¨¦stamos al consumo. Es decir, las entidades conf¨ªan menos en la situaci¨®n financiera de los hogares, algo que, en un periodo de expansi¨®n econ¨®mica, s¨®lo puede tener una explicaci¨®n: "Esa valoraci¨®n ligeramente m¨¢s negativa [...] podr¨ªa estar relacionada con el creciente nivel de endeudamiento de las familias en Espa?a", un fen¨®meno que obedece a la escalada de los pisos.

Pese a esas mayores dificultades, que la entidad vaticina tambi¨¦n para el segundo trimestre del a?o, la demanda de cr¨¦ditos para adquirir una casa no deja de aumentar. En el primer trimestre volvi¨® a acelerarse "por encima de las previsiones", con lo que se convirti¨® en "el sector m¨¢s din¨¢mico del mercado". Todo lo contrario que en el resto de la zona euro, donde no vari¨®.

Tambi¨¦n las empresas solicitaron mayor cr¨¦dito a los bancos, aunque con m¨¢s ¨¦xito que los hogares, pues las entidades financieras suavizaron los criterios de concesi¨®n. Este hecho, que se centr¨® sobre todo en las grandes empresas con cr¨¦ditos a corto plazo, responde a una valoraci¨®n m¨¢s positiva de la actividad econ¨®mica y a la mayor competencia entre entidades financieras.

M¨¢s all¨¢ de esta encuesta, el Banco de Espa?a destaca en su informe de mayo que la financiaci¨®n a los hogares crece m¨¢s que el a?o pasado: un 19,6% en marzo, hasta 459.500 millones de euros. Si se a¨ªsla la financiaci¨®n requerida para comprar vivienda, el avance es a¨²n mayor: un 22,7% m¨¢s que en marzo de 2003.

Algo m¨¢s moderada resulta la expansi¨®n en la financiaci¨®n que recibieron las empresas: un 14,8% m¨¢s, hasta 609.000 millones de euros. Lejos de desacelerarse, la tendencia contin¨²a. "La informaci¨®n provisional correspondiente al mes de abril muestra un mantenimiento de los ritmos de avance de la deuda de empresas y familias", indica el informe.

La fuerte inversi¨®n en vivienda tiene consecuencias en la solidez financiera de los hogares. Durante todo el a?o pasado, las familias redujeron a la mitad su capacidad de financiaci¨®n, seg¨²n datos de Contabilidad Nacional difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). Entre 2002 y 2003, los hogares han perdido casi 3.000 millones de euros de capacidad para financiarse. As¨ª, de representar un 0,76% del producto interior bruto (PIB) en 2002, ha descendido hasta el 0,31% (2.330 millones de euros), "la cantidad m¨¢s baja de toda la serie contable desde 1995".

Se mantiene el ahorro

El instituto apunta al incremento de la inversi¨®n de los hogares -principalmente en vivienda, que creci¨® aproximadamente un 14%- como principal motivo de este fen¨®meno. Pese a todo, las familias consiguieron mantener su tasa de ahorro en 2003. El aumento de la renta disponible (en torno al 6%) y el gasto en consumo final lograron sostener el ahorro familiar en el 10,6% de la renta disponible, un nivel similar al de 2002.

Respecto al bolet¨ªn del Banco de Espa?a, la instituci¨®n incluye tambi¨¦n un apartado espec¨ªfico sobre los efectos de los atentados del 11-M en la econom¨ªa espa?ola. La instituci¨®n no contempla un impacto en el ritmo de crecimiento econ¨®mico y cifra su coste (indemnizaciones, gastos hospitalarios, reparaci¨®n de infraestructuras...) en "unas pocas cent¨¦simas del PIB". No hay evidencias de deterioro de la confianza empresarial tras los atentados, seg¨²n el informe, salvo en el sector servicios, que aglutina actividades relacionadas con el turismo, la hosteler¨ªa y los transportes. No obstante, el Banco de Espa?a cree que este efecto ser¨¢ "reducido y transitorio".