El Califa de Colonia se escurre de la justicia alemana

El extremista isl¨¢mico de 51 a?os Metin Kaplan, que se autodenomina Califa de Colonia, juega al gato y al rat¨®n con la polic¨ªa y la justicia en Alemania. Tras presentarse ayer en el ¨²ltimo minuto ante la polic¨ªa de extranjeros de Colonia, Kaplan ha cumplido con las condiciones de las autoridades y se ha asegurado un permiso de tolerancia para seguir en Alemania, en espera de la decisi¨®n judicial definitiva sobre su extradici¨®n a Turqu¨ªa, donde se le imputa un delito de alta traici¨®n. Un tribunal alem¨¢n de M¨¹nster autoriz¨® la semana pasada la extradici¨®n de Kaplan a Turqu¨ªa, pero le concedi¨® un plazo para recurrir contra la decisi¨®n ante el Tribunal Administrativo Federal, en Leipzig. Otro tribunal de Colonia admiti¨® el recurso y no se prev¨¦ que antes de fin de a?o se tome una decisi¨®n definitiva sobre Kaplan.

El peri¨®dico Bild Zeitung informaba ayer de que Kaplan no s¨®lo hace befa y escarnio desde hace a?os de la polic¨ªa y la justicia, aprovechando todos los vericuetos legales del Estado de Derecho, sino que tambi¨¦n "desplum¨® en 150.000 euros a la asistencia social" alemana. Como asilado pol¨ªtico, Kaplan recibi¨® durante a?os asistencia social por ese importe. Esto no impidi¨® que en 1999, durante uno de los m¨²ltiples lances con las autoridades, la polic¨ªa encontrase hasta dos millones de marcos (un mill¨®n de euros) empaquetados en bolsas de pl¨¢stico en su casa de Colonia.

La familia Kaplan lleg¨® a Alemania en 1983. Un a?o despu¨¦s, Cemaledin Kaplan fund¨® en la ciudad de Colonia la Asociaci¨®n de clubes y centros culturales isl¨¢micos. Bajo tan inofensivo nombre se escond¨ªa una organizaci¨®n que degener¨® en un foco del islamismo extremista. A Cemaledin se le conoc¨ªa como el Jomeini turco. En su lecho de muerte, Cemaledin entreg¨® el testigo a su hijo Metin, quien pronto se declar¨® "emir de los creyentes" y "califa de los musulmanes" con una consigna: "?El califato o la muerte en el campo de batalla!". Desde 1992 Kaplan disfrutaba en Alemania de asilo pol¨ªtico, justificado por la persecuci¨®n de su pa¨ªs de origen, Turqu¨ªa, contra el que el califa hab¨ªa declarado una especie de guerra santa.

El califa Kaplan preconiza, seg¨²n los servicios secretos de Alemania, "la dominaci¨®n del mundo por parte del islam como objetivo final". Hacia ese objetivo final la primera etapa ser¨¢ el derrocamiento del r¨¦gimen laico de Turqu¨ªa, implantado en 1923 por Mustaf¨¢ Kemal, Atat¨¹rk, para sustituirlo por un r¨¦gimen islamista basado en el Cor¨¢n. "Para desarrollar esos objetivos Metin Kaplan exige de los miembros de su organizaci¨®n la disposici¨®n a participar en la guerra santa", constatan los servicios secretos alemanes.

Como muestra palpable de la peligrosidad de Kaplan baste el hecho que le llev¨® a dar con sus huesos en la c¨¢rcel con una condena de cuatro a?os. El llamado emir Halil Ibrahim Sofu puso en tela de juicio en 1996 la autoridad de Kaplan y ¨¦ste respondi¨® con una fetua en su contra. Un a?o m¨¢s tarde Sofu cay¨® acribillado con cuatro balazos en la cara en su casa de Berl¨ªn en presencia de su familia. En 1999 la polic¨ªa detuvo a Kaplan y la audiencia de D¨¹sseldorf consider¨® probado que Kaplan hab¨ªa apelado por lo menos en dos ocasiones al asesinato de su rival Sofu. En 2000 la audiencia conden¨® a cuatro a?os a Kaplan por incitar al asesinato. Seg¨²n los servicios secretos alemanes, en 1997 Kaplan viaj¨® a Afganist¨¢n, donde habl¨® con Osama Bin Laden. Un a?o despu¨¦s un grupo de talibanes devolvi¨® la visita en Colonia al califa.

En 1998 Kaplan apel¨® a derrocar "el r¨¦gimen t¨ªtere de Turqu¨ªa". Todo indica que varios seguidores se lo tomaron al pie de la letra y planearon estrellar un avi¨®n cargado de explosivos contra el monumento a Atat¨¹rk tras haber ocupado una mezquita. La polic¨ªa turca descubri¨® el plan y detuvo a 23 personas de las que 21 hab¨ªan viajado desde Alemania.

Las autoridades alemanas prohibieron la organizaci¨®n del Califa de Colonia y varias de sus ramificaciones en diciembre de 2001 por considerar que atentaban contra el orden constitucional. Desde entonces se han sucedido las prohibiciones contra otras ramas de la organizaci¨®n. Las disputas internas y el extremismo de Kaplan han reducido el n¨²mero de afiliados. El pasado 3 de diciembre la polic¨ªa efectu¨® una redada en 1.200 lugares vinculados con la organizaci¨®n.