Las primeras im¨¢genes del universo de Helmut Newton vuelven al coraz¨®n de Berl¨ªn

Desde las ventanas de la antigua Biblioteca del Arte en Berl¨ªn, un representativo edificio prusiano que hoy acoge a la Fundaci¨®n Helmut Newton, se ven las v¨ªas de la estaci¨®n central. Desde all¨ª parti¨® Helmut Neustaedter (Berl¨ªn, 1920-Los ?ngeles 2004) con su familia jud¨ªa para huir del terror nazi. Ten¨ªa 18 a?os. Ayer, su esposa June, fot¨®grafa como ¨¦l (firmaba como Alice Springs), inaugur¨® en este lugar simb¨®lico un museo de fotograf¨ªa cuyo n¨²cleo son 1.000 obras de Newton. Cuando muera June, toda la obra de ambos ser¨¢ depositada en la fundaci¨®n.

"Queremos que la fundaci¨®n sea una plataforma para intercambiar ideas"

Helmut Newton falleci¨® el pasado 24 de enero en Los ?ngeles en un accidente de coche y no alcanz¨® a comprobar el resultado final del di¨¢logo que mantuvo durante varios a?os con las autoridades de la ciudad en la que naci¨® y de la que sali¨® con la llegada del nazismo. El rey de la fotograf¨ªa del poder, el sexo y el glamour se llev¨® con ¨¦l, en aquel a?o de 1938, un concepto est¨¦tico marcado por el Berl¨ªn modernista y un sentimiento de a?oranza que le acompa?ar¨ªa toda la vida. June, la mujer que comparti¨® la vida con Newton desde 1948, dijo ayer al presentar la fundaci¨®n sobre su "chico berlin¨¦s" que "Berl¨ªn siempre estuvo en su coraz¨®n".

"Queremos que la fundaci¨®n no sea un monumento. Queremos que sea un foro, una plataforma para intercambiar ideas", sostuvo el director de la Fundaci¨®n Patrimonio de Prusia, Klaus-Dieter Lehmann, al presentar ayer en Berl¨ªn el Museo de Fotograf¨ªa y las dos exposiciones que acoge. El museo abarcar¨¢, junto con la Fundaci¨®n Newton, salas de exposici¨®n, una biblioteca y un taller.

Newton hab¨ªa recorrido todo Berl¨ªn en busca de un edificio para depositar su obra, y cuando ya hab¨ªa abandonado la idea le ofrecieron este lugar c¨¦ntrico, cerca de la Universidad de las Artes y a espaldas de la estaci¨®n donde se dan cita los drogadictos y los sin techo. El museo es, por una parte, una instituci¨®n privada y, por otra, una entidad p¨²blica, un hecho que "servir¨¢ de modelo", seg¨²n dijo Lehmann, en una ciudad que vive de la cultura que dif¨ªcilmente puede financiar.

Los berlineses celebran el regreso de un hijo pr¨®digo que alcanz¨® la fama como maestro de un erotismo agresivo. ?ste caracterizaba las fotograf¨ªas que se publicaron en revistas de moda como Vogue, Marie Claire y Elle.

Cinco big nudes, mujeres desnudas, que realiz¨® el fot¨®grafo a partir de una serie de retratos de terroristas de la RAF publicada en una revista, decoran la pared detr¨¢s de dos majestuosas escaleras tapadas con una moqueta roja. Anuncian las salas de un palacio de la fotograf¨ªa que acoge en sus primeras dos plantas la Fundaci¨®n Helmut Newton. Los Newton financiaron las reformas del edificio. ?Cu¨¢nto costaron? No se sabe. June confes¨® que "hasta ahora" no se ha ocupado de "estos temas". La Fundaci¨®n Patrimonio Cultural Prusiano pagar¨¢ el mantenimiento. El palacio es, a partir de la tercera planta, una ruina. Ah¨ª comienza la responsabilidad de las autoridades p¨²blicas.

La parte elegante del edificio acoge fotograf¨ªas en blanco y negro que Newton hizo de Naomi Campbell, Gianni y Donatella Versace, Brassa?, Jane Birkin, y un Karl Lagerfeld sin gafas de sol y barba. La exposici¨®n Sex and lanscapes re¨²ne im¨¢genes, la mayor¨ªa realizadas en los a?os ochenta, en blanco y negro y en color, en que los cuerpos est¨¢n tratados como si fueran paisajes. Hay fotograf¨ªas de una vagina, de senos, de prostitutas en pleno trabajo, pero tambi¨¦n de armas que decoran una pared en California, y de un mar revuelto color gris plomo con un barco de carga en el horizonte, de olas rompiendo contra las rocas en el sur de Francia, de una botella de champa?a y flores marchitas en un hotel.

La exposici¨®n Us and them es una especie de diario de la pareja Helmut y June. Re¨²ne autorretratos y retratos que se hicieron mutuamente en la intimidad, e im¨¢genes de amigos. Ambos lograron resaltar la belleza del ser humano, incluso cuando una cicatriz atraviesa el vientre de June. Esta muestra ilustra, sobre todo, la relaci¨®n de los Newton: la mujer que observa al hombre que, por su parte, est¨¢ mirando a otras mujeres.

En una imagen en primer plano se ve a Helmut Newton. Su cara gira hacia la c¨¢mara, la de June, su esposa. Frente a ¨¦l se encuentra una mujer espl¨¦ndida, una modelo posando. Es el perfecto ejemplo de lo que caracterizaba la vida en com¨²n de la pareja y de lo que se puede ver en muchas de las fotograf¨ªas de la nueva Fundaci¨®n Helmut Newton en Berl¨ªn. Tambi¨¦n se muestran por primera vez algunas de las fotos que June tom¨® a Helmut en su lecho de muerte en Los ?ngeles.

Cuando Newton visit¨® el edificio, mir¨® por la ventana y dijo que la antigua Biblioteca ser¨ªa el lugar perfecto para sus fotograf¨ªas. El coleccionista Heinz Berggruen, de m¨¢s de 90 a?os, suspir¨® en ese momento y dijo: "Ves, ahora has regresado".