'Peer Gynt', de Ibsen y Grieg, entero y verdadero

La ?pera Nacional de Oslo, que nos visit¨® por vez primera hace tres a?os, vuelve a Madrid para dos conciertos espec¨ªficamente teatrales: en el primero, hemos podido escuchar en su integridad la m¨²sica incidental para Peer Gynt, sobre el drama de Ibsen, estrenada en Cristiania en 1876, el a?o del nacimiento de Falla. Don Manuel, como otros compositores espa?oles -Granados, Villar, Turina, Guridi-, sinti¨® gran admiraci¨®n por el emblem¨¢tico, sentimental, refinado y, pese a su cosmopolitismo, nacionalista. Y en verdad que merec¨ªa en sus formas breves -lieder, "piezas l¨ªricas"- la m¨¢s entra?able consideraci¨®n. Pero algunos t¨ªtulos dominaron y mantienen hasta hoy la fama de Grieg: el Concierto de piano que no olvidaremos nunca en la versi¨®n de Benedetti-Michelangelli, las orquestales Heridas del coraz¨®n y La ¨²ltima primavera, dos bell¨ªsimas sonatas para piano y viol¨ªn, dilectas del p¨²blico de la Sociedad Filarm¨®nica y, sobre todo, las suites de Peer Gynt. Pero todo cobra mayor elocuencia y efectividad ante la partitura completa, m¨¢s a¨²n si nos llega con tanta calidad interpretativa como la de los cantantes, coro y orquesta de Oslo bajo la direcci¨®n de un maestro en alza como es Olaf Henzold, premio Toscanini 1987.

Estas partituras, a medio camino entre la representaci¨®n y el concierto, en las que la m¨²sica y el texto juegan su papel con a?adido de acci¨®n y coreograf¨ªa, resultan id¨®neas en un auditorio y merecer¨ªan mayor atenci¨®n, antes que no pocas versiones de ¨®pera en concierto, s¨®lidamente impuestas como pedestal de unos divos. Probablemente, merecer¨ªan semejante calificaci¨®n los int¨¦rpretes de ahora, mas interesa especialmente su calidad, nobleza y encanto musical. Aplaudimos largamente a Marita Kvarving Solverge en Solveig; a Trond Halstein, en Peer; a Itziar M. Gald¨®s, en Anitra, o a Lise Fjeldstad, en ?se, as¨ª como al coro preparado por Steffen Kammier en un trabajo de conjunto admirable gracias al cual disfrutamos de una creaci¨®n transparente, po¨¦tica, fuertemente personal en la invenci¨®n arm¨®nica e instrumental.

En resumen: una tarde de agudizado atractivo y ejemplar jerarqu¨ªa art¨ªstica en homenaje al gran l¨ªrico musical de Bergen.