El hijo de Castro arremete contra los pa¨ªses que exportan contaminaci¨®n
El catedr¨¢tico cubano reclama nuevos modelos de crecimiento
"No es ¨¦tico ni justo que los pa¨ªses industrializados exporten tecnolog¨ªas y energ¨ªas no renovables a los pa¨ªses del sur y que luego les acusen de ser contaminantes". As¨ª de rotundo se mostr¨® el catedr¨¢tico de f¨ªsica nuclear Fidel Castro D¨ªaz-Balart -quien tambi¨¦n asesora a su padre, el presidente cubano, Fidel Castro, en cuestiones cient¨ªficas- en la conferencia del F¨®rum ?La sostenibilidad se entiende igual en el norte que en el sur?
Castro denunci¨® que, pese a los esfuerzos de algunos Estados, la mayor¨ªa de los pa¨ªses del hemisferio norte no cumplen los objetivos marcados en las cumbres medioambientales de las Naciones Unidas y reclam¨® la libertad de las sociedades en desarrollo de llevar a cabo su propio modelo de crecimiento.
Castro lleg¨® ayer al F¨®rum con una amplia lista de cifras y porcentajes para demostrar los agravios cient¨ªficos y tecnol¨®gicos que sufren los pa¨ªses empobrecidos. Su tesis principal es que no hay recetas universales para el desarrollo y que la imitaci¨®n de los modelos que han seguido los Estados del norte puede llevar a un mundo m¨¢s insostenible. Las tres cuartas partes de la energ¨ªa producida en el planeta son de origen f¨®sil, sostuvo, y lo m¨¢s preocupante es que econom¨ªas emergentes, como la de China y Brasil, crecen usando de forma intensiva estos recursos.
Ante esta situaci¨®n, ?cu¨¢l es la reacci¨®n de los pa¨ªses industrializados? Castro lo tiene claro: acusar al Tercer Mundo de crecer sin control ambiental. "El desarrollo sostenible debe ser un asunto esencial en la agenda global, pero no se pueden exigir explicaciones a pa¨ªses como Brasil, China o la India por los errores que la humanidad ha cometido tras la Revoluci¨®n Industrial. La soluci¨®n no es decir a los pa¨ªses que a¨²n no se han podido desarrollar que no lo hagan o que no consuman energ¨ªa, sino que todos los Estados cumplan los acuerdos de R¨ªo de Janeiro, Kioto y Johanesburgo", advirti¨® Castro.
El cient¨ªfico cubano record¨® que son los pa¨ªses m¨¢s ricos los que m¨¢s residuos contaminantes producen. A modo de ejemplo, apunt¨® que a las regiones pudientes corresponde el 80% del consumo de energ¨ªa, el 86% del producto interior bruto, el 82% del mercado, el 71% del comercio y el 95% del uso de Internet.
Puesto que son estos pa¨ªses los que controlan la econom¨ªa mundial, Castro tambi¨¦n dud¨® de las ventajas que reportar¨¢ el crecimiento sostenible a los menos favorecidos. "Estoy convencido de que cuando haya nuevas fuentes de energ¨ªa renovables s¨®lo se desarrollar¨¢n y se beneficiar¨¢n de ellas los pa¨ªses del Primer Mundo", terci¨®. El recelo viene dado sobre todo porque Castro considera que el desarrollo no s¨®lo puede medirse en t¨¦rminos de incrementos en los indicadores econ¨®micos, sino tambi¨¦n en los sociales, de modo que los ¨ªndices que deben tomarse en consideraci¨®n son los de desarrollo humano. Y ¨¦stos pintan una inmensa brecha abierta por unos alt¨ªsimos ¨ªndices de analfabetismo en la mayor parte del mundo mientras que el resto del planeta sigue avanzando en el conocimiento tecnol¨®gico y digital. A todo ello se suma, agreg¨® Castro, una fuga de cerebros hacia Europa y Estados Unidos.
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