Sonrisas reales en Castell¨®n
La infanta Cristina reparti¨® ayer sonrisas entre todos y cada uno de los ni?os, adolescentes y adultos que acuden o residen en las instalaciones de la Asociaci¨®n Provincial de Par¨¢lisis Cerebral (Aspropace) de Castell¨®n. Las sonrisas, en muchos casos, tuvieron respuesta en aquellos que, por lo menos, percibieron que algo distinto estaba pasando a su alrededor. La asociaci¨®n decidi¨® otorgar el nombre de Infanta Cristina al centro de d¨ªa y residencia que inaugur¨® el pasado mes de diciembre. Y ayer recibi¨® la visita de la hija mediana de los Reyes que, durante m¨¢s de una hora, recorri¨® todas las dependencias. "Es un honor y un privilegio que nuestro centro lleve su nombre", dijo el presidente de Aspropace, Manuel Blay, quien record¨® c¨®mo en 1980 un grupo de padres con ni?os afectados se reunieron y comenzaron "un largo y duro camino para conseguir mejores asistencias" para sus hijos. Todos los invitados pudieron escuchar las palabras del presidente despu¨¦s de que la Infanta le ayudara a encender el micr¨®fono, en un gesto de complicidad.
Blay record¨® la labor de los m¨¢s de veinte de profesionales que trabajan en el centro, psic¨®logos, fisioterapeutas y cuidadores que, seg¨²n dijo, consiguen la superaci¨®n f¨ªsica, ps¨ªquica "y, ?porqu¨¦ no decirlo?, la felicidad" de los chicos. La asociaci¨®n cuenta actualmente con 62 socios y atiende a 55 afectados por par¨¢lisis cerebral. Do?a Cristina pos¨® con todos ellos. Adem¨¢s de la residencia Infanta Cristina, el colectivo dispone tambi¨¦n de un centro escolar para afectados de menor edad. La residencia tiene como objetivo constituir un hogar para adolescentes y adultos cuando no es viable dentro del marco familiar. En el centro escolar se desarrolla un tratamiento integral.
Actividades terap¨¦uticas, de rehabilitaci¨®n motora e hidroterapia, sociales y l¨²dicas, asistencia, servicio de transporte y de atenci¨®n a las familias son las principales actividades de la asociaci¨®n.
La Infanta se interes¨® especialmente por el funcionamiento diario del centro, los talleres en los que realizan trabajos manuales, los problemas habituales con los que se enfrentan. En su recorrido, estuvo acompa?ada por la gerente de la asociaci¨®n, Mar¨ªa Dolores R¨®denas, que tambi¨¦n le present¨® a los residentes mientras ¨¦stos trataban de llevar a cabo alguna de sus tareas diarias. Algunos intentaron mostrar su destreza pintando mientras otros no pod¨ªan ocultar su alegr¨ªa ante las c¨¢maras. Para todos hubo un gesto. Y una sonrisa real.
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