A las puertas de la UE

Rumania y Bulgaria, que en la cumbre de Helsinki obtuvieron la calificaci¨®n de aspirantes al ingreso en la UE, al igual que los 10 pa¨ªses que entraron el 1 de mayo, contemplan estas elecciones al Parlamento Europeo con la esperanza de participar en las pr¨®ximas.

En junio de 2003, los l¨ªderes europeos decidieron en Sal¨®nica (Grecia) marcar la meta de 2007 como objetivo para la adhesi¨®n de estas dos deprimidas naciones balc¨¢nicas. Su incorporaci¨®n ser¨¢ la sexta de las ampliaciones en m¨¢s de medio siglo de historia del club fundado en Roma. Y muy probablemente pueda sumarse a ellas Croacia, cuyo desarrollo econ¨®mico es m¨¢s s¨®lido que el de estas candidatas. La Comisi¨®n Europea solicit¨® el 20 de abril al Consejo de Ministros autorizaci¨®n para abrir las negociaciones de adhesi¨®n con Croacia, que podr¨ªan empezar a finales de a?o o principios del pr¨®ximo.

Para b¨²lgaros y rumanos, las pr¨®ximas semanas son decisivas si pretenden cerrar, como es su deseo, los 30 cap¨ªtulos de negociaci¨®n con la actual Comisi¨®n Europea. De lo contrario, sufrir¨¢n un par¨®n hasta que el nuevo Ejecutivo comunitario asuma el mando a partir del pr¨®ximo 1 de noviembre. Bulgaria y Rumania est¨¢n pol¨ªticamente condenadas a entrar juntas, pero el estado de sus negociaciones recuerda al de Espa?a y Portugal en la d¨¦cada de los ochenta. Los portugueses iban por delante de los espa?oles en el cierre de cap¨ªtulos, pero nadie en Bruselas imaginaba que Lisboa llegar¨ªa antes que Madrid. Y as¨ª sucedi¨®. Entraron juntas en 1986.

El Gobierno b¨²lgaro conf¨ªa en poder terminar la negociaci¨®n en junio, seis meses antes de lo previsto. "Esperamos que a finales de junio hayamos terminado las conversaciones y cerremos los cuatro cap¨ªtulos que a¨²n nos quedan: Presupuesto y Finanzas, Agricultura, Pol¨ªtica Regional y Competencia", asegur¨®, en un discurso el 28 de abril, el viceprimer ministro, Plamen Panayotov.

Bulgaria, que cuenta con una poblaci¨®n de casi ocho millones de habitantes, es el pa¨ªs m¨¢s pobre despu¨¦s de Rumania de los 12 que recibieron luz verde en Helsinki, en diciembre de 1999, en la que los dirigentes de la UE se limitaron a etiquetar a Turqu¨ªa como pa¨ªs aspirante a candidato. Desde entonces, Sof¨ªa, gracias a las reformas emprendidas por el Gobierno del ex rey Sime¨®n, ha hecho grandes avances, como qued¨® reflejado en los sucesivos informes anuales de la Comisi¨®n. Su econom¨ªa ha registrado un crecimiento medio de entre 5,5 y 4,5 puntos en los ¨²ltimos cuatro a?os.

Bruselas consider¨® ya en 2002 que Bulgaria ten¨ªa ya una econom¨ªa de mercado operativa capaz, al menos sobre el papel, de afrontar la competencia a medio plazo, el segundo criterio econ¨®mico exigido por la UE, siempre y cuando no frene el camino de reformas. Sin embargo, contin¨²an siendo muy fr¨¢giles sus sistemas administrativo y judicial, y todo ello da pie a que la corrupci¨®n est¨¦ a¨²n muy lejos de desaparecer. El fen¨®meno es una constante incluso en los pa¨ªses recientemente incorporados al club europeo. La comunidad gitana es objeto de discriminaci¨®n, la situaci¨®n penitenciaria deja mucho que desear y los pacientes de los centros para retrasados mentales viven en p¨¦simas condiciones, seg¨²n ha venido alertando el comisario europeo para la Ampliaci¨®n, G¨¹nter Verheugen.

Rumania tiene m¨¢s cap¨ªtulos sin cerrar, pero espera concluir las negociaciones antes de noviembre. Con 22 millones de habitantes, Rumania es m¨¢s pobre que Bulgaria y presenta un crecimiento menor. Y no son pocos los males pol¨ªticos y sociales que padece. Bruselas ya dej¨® claro en su ¨²ltimo informe que la corrupci¨®n contin¨²a siendo una causa muy seria de preocupaci¨®n y que las estructuras institucionales creadas para combatirla apenas han dado resultado. La reforma judicial ha sido muy limitada. La polic¨ªa ha sido desmilitarizada, pero es escasa la eficacia de las fuerzas del orden y el control de fronteras. Persisten los problemas con la minor¨ªa gitana, que representa apenas el 2,5% de la poblaci¨®n, y las condiciones de los orfelinatos son precarias.

Pa¨ªses balc¨¢nicos

Los pa¨ªses balc¨¢nicos esperan que no se demore demasiado su entrada en la UE. Pol¨ªticamente, nadie cuestiona que as¨ª suceda alg¨²n d¨ªa, porque la nueva Europa quedar¨ªa geogr¨¢ficamente mal estructurada, con los pa¨ªses de la desaparecida Yugoslavia y Albania encerrados en un c¨ªrculo del que no son miembros. Sin embargo, con la excepci¨®n de Croacia y a medio plazo Macedonia, pensar en el ingreso de los dem¨¢s (Serbia y Montenegro, Bosnia y Albania) pertenece, hoy por hoy, a la categor¨ªa de los sue?os.

Los croatas est¨¢n econ¨®micamente preparados. Tienen un nivel parecido al de Eslovenia, socio de la UE desde el 1 de mayo. El ¨²nico borr¨®n que ten¨ªan en su contra era su falta de colaboraci¨®n con la fiscal Carla del Ponte para la captura y env¨ªo al Tribunal Internacional de La Haya de los criminales de guerra. Zagreb ha cambiado de rumbo y la Comisi¨®n lo ha tenido en cuenta cuando ha recomendado la apertura de negociaciones de adhesi¨®n. "Croacia puede ser la pasarela entre la UE y el resto de los Balcanes", afirm¨® su primer ministro, Ivo Sanador, muy convencido de que Zagreb ingresar¨¢ en el club en 2007.