La Generalitat investiga supuestas palizas de funcionarios a 40 presos al finalizar un mot¨ªn
Las declaraciones de ocho reclusos de la c¨¢rcel de Quatre Camins han sido enviadas al juez
El Departamento de Justicia de la Generalitat de Catalu?a ha abierto una investigaci¨®n para esclarecer las supuestas palizas que un grupo de funcionarios de diversas prisiones catalanas propinaron a unos 40 presos de la c¨¢rcel de Quatre Camins en las horas y los d¨ªas posteriores a que finalizase el mot¨ªn del pasado 30 de abril, en el que fue gravemente herido el subdirector de este centro, Manuel Tall¨®n. Ocho de esos 40 internos han relatado el presunto apaleamiento que sufrieron, en un documento al que ha tenido acceso EL PA?S y que ha sido remitido al juzgado y a la fiscal¨ªa.
El Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de Granollers (Barcelona) ha abierto unas diligencias en las que se acumula la investigaci¨®n sobre la brutal agresi¨®n que sufri¨® el subdirector de Quatre Camins y, por otro lado, las denuncias que, a t¨ªtulo particular, han presentado varios presos sobre las supuestas palizas que sufrieron. Despu¨¦s de que esas denuncias trascendieran, un grupo de juristas agrupados en el Observatorio del Sistema Penal de la Universidad de Barcelona solicit¨® autorizaci¨®n al Departamento de Justicia de la Generalitat para visitar a algunos de los presos, que explicaron en primera persona los hechos. ?ste es su relato.
- Cinco puntos de sutura. G. A. V. explica que sobre las dos de la madrugada del 1 de mayo, cuatro horas despu¨¦s de que finalizase el mot¨ªn, unos funcionarios le sacaron de la celda a golpes, lo esposaron por la espalda y le colocaron una porra para inmovilizarlo. Luego lo llevaron por un largo pasillo hasta el departamento de ingresos, donde le esperaban dos filas de funcionarios, que le dieron todo tipo de golpes. Uno de ellos le produjo una brecha en la cabeza y le tuvieron que aplicar cinco puntos de sutura. Trasladado a la c¨¢rcel de Ponent (Lleida), relata que fue a una celda de aislamiento y que durante varios d¨ªas seguidos recibi¨® golpes, pu?etazos y patadas. Afirma tambi¨¦n que al cabo de dos semanas le hicieron fotos de cintura para arriba, "cuando hab¨ªan desaparecido las marcas".
- Arrojado por las escaleras esposado. J. S. P. ha declarado que a las 0.30 del 1 de mayo fue sacado de su celda por varios funcionarios, que lo esposaron y lo arrojaron por una escalera. Al final de los escalones, otros funcionarios le quitaron la ropa mientras le pegaban. Tambi¨¦n pas¨® por el mismo pasillo, "que se le hizo eterno", en el que recibi¨® golpes y patadas. En el departamento de ingresos afirma que el subdirector m¨¦dico de la c¨¢rcel le peg¨® con una porra en la cara y el cuello mientras le gritaba "llama ahora a la consejera", en alusi¨®n a la reivindicaci¨®n de los presos amotinados horas antes de hablar con la titular del Departamento de Interior de la Generalitat, Montserrat Tura. En ropa interior fue subido a un furg¨®n policial, donde dice que vio a otro preso del m¨®dulo 2 "con la boca totalmente rota". Al llegar a la c¨¢rcel de Brians (Barcelona), relata que otros funcionarios le golpearon. Luego fue a las perreras, el departamento de ingresos, donde continuaron los golpes. De acuerdo con su versi¨®n, fueron sesiones "s¨¢dicas", como consecuencia de las cuales le rompieron el t¨ªmpano izquierdo.
- Ocho golpes de la cabeza contra la pared. P. C. V. afirma que tambi¨¦n fue golpeado por el mismo pasillo de Quatre Camins y que cuando atravesaba una esquina "le cog¨ªan la cabeza y se la golpeaban contra el canto". Ha explicado que "aparte de todos los golpes recibidos le hicieron parar hasta ocho veces para molerlo a palos". Al llegar a las perreras, recuerda que un m¨¦dico de la c¨¢rcel le dijo: "No te quejes, que est¨¢s fuerte, no pretender¨ªas que te pegaran flojo".
- "Estoy en el infierno". I. V. R. explica que el 19 de mayo lo trasladaron a Brians desde Ponent. Cuando fue visitado por una abogada ten¨ªa los dos ojos amoratados y explic¨® que varios d¨ªas fue apaleado "en un s¨®tano oscuro, donde nadie te oye si gritas". El preso dice que tiene p¨¢nico y explica: "Si miras sin querer donde no toca, te pegan; si cuando entran a la celda est¨¢s sentado en la cama, te pegan; si te escuchan decir cualquier cosa, te pegan". Durante la entrevista le dijo a su abogada: "Estoy en el infierno".
- Palizas por turnos. J. I. A. tambi¨¦n ha relatado que fue sacado de su celda de Quatre Camins y que al llegar al departamento de ingresos le esperaban varios funcionarios, "unos de uniforme y otros vestidos de calle". Llevaba las manos sujetas a la espalda con una brida, no con las esposas. En el suelo recibi¨® varios golpes y cuando pararon "escuchaba los gritos de otros chicos pidiendo que los golpes cesaran". Luego fue trasladado a Brians, donde durante dos d¨ªas fue golpeado por cuatro o cinco funcionarios. "Se iban turnando en dos grupos para pegarme", ha dicho.
- Patadas en los test¨ªculos. V. G. E. ha declarado que tambi¨¦n fue arrojado esposado por unas escaleras de Quatre Camins "boca abajo y entre patadas". Su relato se?ala que le dieron varias patadas en los test¨ªculos y golpes en la cabeza con una porra. Prosigue explicando que lo introdujeron en una celda, le obligaron a desnudarse y un grupo de funcionarios le ech¨® boca abajo en una cama mientras le golpeaban. Fue trasladado a la c¨¢rcel Modelo, donde entr¨® tambi¨¦n a golpes y le pisotearon la cabeza y le cambiaron las esposas de los Mossos d'Esquadra por las de los funcionarios, en presencia del director. En otra celda prosiguieron los golpes hasta que se defec¨®.
- En calzoncillos en el furg¨®n. La versi¨®n de J. F. R. se?ala que fue sacado de la celda por funcionarios provistos de cascos, porras y escudos. Entonces estaba en ropa interior y fue esposado por la espalda. Por el pasillo ya descrito recibi¨® varias zancadillas y bofetones y explica que vio al subdirector m¨¦dico de la c¨¢rcel apalear a varios presos. Despu¨¦s fue "arrojado" en calzoncillos y descalzo al furg¨®n policial para trasladarlo a la c¨¢rcel de Ponent, donde tardaron tres d¨ªas en darle ropa y tambi¨¦n fue golpeado por funcionarios que ha identificado.
- Apaleado de rodillas contra la pared. B. G. R. asegura que fue sacado de la celda en ropa interior y golpeado por el mismo pasillo de Quatre Camins. Trasladado a Brians en calzoncillos, fue ingresado en una celda de aislamiento, donde se le coloc¨® de rodillas contra la pared y fue apaleado nuevamente por los funcionarios. No pudo ducharse hasta al cabo de 16 d¨ªas.
UGT censura al director catal¨¢n de prisiones
El sindicato UGT, mayoritario entre los funcionarios de prisiones de Catalu?a, ha reaccionado de manera airada y contundente en contra del Gobierno catal¨¢n por abrir esa investigaci¨®n interna. En UGT se integraron en bloque hace unos meses centenares de funcionarios de prisiones procedentes del sindicato Catac, algunos de los cuales se han visto envueltos en investigaciones judiciales.
UGT considera que la investigaci¨®n de la Generalitat catalana es "el pacto de la verg¨¹enza" entre la Secretar¨ªa de Servicios Penitenciarios y el Observatorio del Sistema Penal de la Universidad de Barcelona. Este sindicato califica de "seudojuristas" a los abogados que visitaron a los presos y les acusan de "asistir a las principales mafias de extorsi¨®n y tr¨¢fico de drogas de las prisiones catalanas", pese a que alguno de ellos hace a?os que no ejerce. La mayor¨ªa de ellos son profesores de derecho en distintas facultades de Barcelona y han realizado tesis doctorales dirigidas, entre otros, por el ex presidente del Tribunal Constitucional Francisco Tom¨¢s y Valiente.
La central sindical afirma tambi¨¦n que el m¨¢ximo responsable de las prisiones catalanas, Albert Batlle, "ha cedido a las presiones de estos abogados", a los que se acusa tambi¨¦n de provocar una cortina de humo para desviar la atenci¨®n sobre los delitos cometidos por los presos. El sindicato sostiene que se trata de denuncias falsas de torturas que Batlle apoya "de manera entusiasta e imaginativa". El sindicato anima a los funcionarios a "mantener la l¨ªnea de profesionalidad" demostrada hace a?os, cuando Batlle "gozaba del palco del Camp Nou", en alusi¨®n a que Batlle fue durante a?os concejal de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona.
Por su parte, Comisiones Obreras ha anunciado que cuando concluya la investigaci¨®n de la Generalitat emprender¨¢ acciones legales contra lo que considera "acusaciones infundadas" de los presos contra los funcionarios. Con todo, este sindicato ha anunciado que apoya la iniciativa del Gobierno catal¨¢n. Unos 200 afiliados de ambos sindicatos se manifestaron ayer frente a la sede del Departamento de Justicia para pedir el cumplimiento de los acuerdos de seguridad con la Generalitat y evitar que se repitan esos hechos.
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