No fue Sadam

Sadam Husein no tuvo que ver con el 11-S. Ya lo sab¨ªamos. Una de las acusaciones sobre las que la Administraci¨®n de Bush mont¨® su caso para invadir Irak se ve oficialmente confirmada como un embuste. Tras el rastro perdido de las inexistentes armas de destrucci¨®n masiva que se le supon¨ªan el dictador, un informe preliminar de la comisi¨®n norteamericana que investiga el 11-S ech¨® ayer un jarro de agua fr¨ªa sobre la Casa Blanca. Su conclusi¨®n es contundente: no hay ninguna "prueba cre¨ªble" de complicidad entre Al Qaeda y el r¨¦gimen de Sadam Husein, ni con ning¨²n otro Gobierno salvo el de los talibanes en Afganist¨¢n.

Es preocupante que se haya necesitado crear una comisi¨®n ad hoc para establecer la verdad casi tres a?os despu¨¦s del 11-S y que hace tan s¨®lo unos d¨ªas el vicepresidente Cheney siguiera sosteniendo la falacia. Con magn¨ªficos resultados en t¨¦rminos de opini¨®n p¨²blica, que mayoritariamente crey¨® que Sadam Husein estaba detr¨¢s del 11-S y que por tanto merec¨ªa la guerra. En este grandioso enga?o Bush recibi¨® la decidida ayuda de Aznar, que aparentemente nunca alberg¨® ninguna duda sobre los v¨ªnculos entre el dictador iraqu¨ª y el terrorismo internacional. Apoyar la guerra de Irak era, en su discurso, profundizar la lucha antiterrorista.

La comisi¨®n oficializa que Sadam Husein no tuvo que ver con el 11-S; que Pakist¨¢n ayud¨® a Osama Bin Laden (y la CIA ayud¨® al tiempo a Pakist¨¢n), y pone de relieve que fue el propio l¨ªder terrorista quien limit¨® el ataque a cuatro aviones frente a los 10 que quer¨ªan utilizar quienes preparaban la operaci¨®n. El objetivo de la comisi¨®n es determinar qu¨¦ problemas y fallos permitieron que se cometieran esos atentados. Tras el 11-S, indica la comisi¨®n, Al Qaeda se ha descentralizado, lo que la hace m¨¢s escurridiza y peligrosa.

Tras la invasi¨®n s¨ª pueden haberse creado v¨ªnculos entre grupos iraqu¨ªes y el terrorismo global islamista, del que tuvimos una prueba el 11-M en Madrid. La temeridad e irresponsabilidad de la Administraci¨®n de Bush han hecho de Irak un nuevo foco de reclutamiento de terroristas, y de la ocupaci¨®n, una excusa para lanzar ataques en el mundo entero. La pol¨ªtica de Bush ha hecho el mundo a¨²n m¨¢s inseguro de lo que ya era tras el 11-S. Su invocaci¨®n prof¨¦tica sobre el terrorismo ha terminado cumpli¨¦ndose a s¨ª misma.