Sevilla: el granero socialista

Es una expresi¨®n manida, pero, quiz¨¢s, sea la mejor forma de definir lo que supone para el Partido Socialista la provincia de Sevilla: un verdadero granero de votos.

Desde 1982, cada vez que se celebran unas elecciones -ya sean municipales, auton¨®micas, generales o europeas- el PSOE consigue una amplia victoria sobre el Partido Popular. En las europeas del pasado domingo, volvi¨® a pasar lo mismo. Da igual que se produzca una participaci¨®n masiva, como en las generales y auton¨®micas de marzo (PSOE, 58,3%; PP, 27,9%) o que se alcance un r¨¦cord de abstenci¨®n, como en las europeas de esta semana (PSOE, 57,9%; PP, 31,2%). Adem¨¢s, en estos ¨²ltimos comicios, los socialistas han conseguido ser el partido m¨¢s votado en 102 de los 105 municipios de Sevilla. Los tres ¨²nicos pueblos en los que no han vencido son Marinaleda (donde ha vuelto a imponerse Izquierda Unida), Espartinas y Tomares. En estos dos ¨²ltimos municipios, el PP ha ganado, aunque por un estrecho margen.

"La izquierda siempre fue sensible con los problemas del campo en Andaluc¨ªa"

El PER representa para los socialistas la supervivencia del medio rural

Pero ?qu¨¦ hay detr¨¢s de la hegemon¨ªa de los socialistas en Sevilla? Tradici¨®n, "miedo al cambio" (como volvi¨® a repetir Jaime Mayor Oreja durante la campa?a del 14-M), temor de la poblaci¨®n rural a perder las ayudas y subvenciones o, como defienden los dirigentes socialistas de la provincia, una buena gesti¨®n del PSOE.

Jos¨¦ Antonio M¨¦ndez apuesta por "la buena labor" que ha desarrollado el PSOE en los municipios de la provincia. ?l es alcalde de El Real de la Jara (en la Sierra Norte de Sevilla) desde hace m¨¢s de 20 a?os. Su partido, el PSOE, cogi¨® la alcald¨ªa en 1979 y ya no la ha soltado.

En estas ¨²ltimas elecciones, los socialistas han conseguido en este pueblo, de alrededor de 2.000 habitantes, el 67,8% de votos, los populares, el 28%. El razonamiento de M¨¦ndez es simple: "Durante mucho tiempo, la situaci¨®n del medio rural fue muy mala y la izquierda siempre fue sensible con los problemas del campo (...) Si se recorren ahora los pueblos, se ve que la situaci¨®n ha cambiado. Se ha mejorado mucho en calidad de vida y en servicios".

Antonio Guti¨¦rrez, que tambi¨¦n es un alcalde socialista de la Sierra Norte, es m¨¢s gr¨¢fico: "Hoy en Las Navas de la Concepci¨®n [el municipio que gobierna] hay unos 2.000 habitantes y 700 coches. Hace 20 a?os, hab¨ªa 2.600 habitantes y s¨®lo 20 coches".

Guti¨¦rrez tiene 40 a?os, y lleva 14 como alcalde de su pueblo, en el que naci¨® como se ven¨ªa al mundo antes: "en una casa". Explica que, tradicionalmente, la provincia de Sevilla ha sido "muy machacada" y que, por eso, "la gente es de izquierdas". "Adem¨¢s, el Partido Socialista tiene una imagen de garant¨ªa en el campo".

"Garant¨ªa". Cuando Guti¨¦rrez habla de las victorias del PSOE, de su boca salen dos de las posibles claves del poder de los socialistas en las zonas rurales de Sevilla: "garant¨ªa" y "Felipe Gonz¨¢lez".

Gonz¨¢lez, ex presidente del Gobierno y sevillano, representa la tradici¨®n del voto socialista. Esa tradici¨®n que, despu¨¦s de m¨¢s de 20 a?os de democracia, se traduce en "el voto familiar". Guti¨¦rrez cuenta que ¨¦l es socialista, su mujer es socialista, su madre es socialista, su suegra es socialista, sus cu?ados son socialistas... "Mi familia entera es del PSOE".

El otro punto clave, "la garant¨ªa", est¨¢ relacionado con el antiguo PER. El Plan de Empleo Rural representa, seg¨²n los socialistas, la supervivencia del campo. "Estas ayudas hacen que la gente se pueda quedar establecida en la Sierra Norte", afirma el alcalde de Las Navas de la Concepci¨®n -un municipio en el que 400 de los 2.000 habitantes tienen subsidio-.

Precisamente, las ayudas al campo se han utilizado para acusar al PSOE de Andaluc¨ªa de tener un "voto subsidiado". Jos¨¦ Antonio M¨¦ndez, alcalde de El Real de la Jara, defiende lo contrario: "Tengo amigos del PP y siempre les digo que no es verdad. En mi pueblo hay un voto conservador formado por peque?os empresarios ganaderos que reciben mayores subvenciones que los jornaleros que cobran el PER. Y por tener m¨¢s subvenciones, no nos votan a nosotros".

Otra de las patas en las que se apoya el granero rural de votos del PSOE es las personas. No es muy dif¨ªcil entender que, en un pueblo de apenas dos millares de habitantes, todo se sepa, lo bueno y lo malo, como cuenta Guti¨¦rrez. "Nos tienen controlados. En las municipales prometimos un pabell¨®n cubierto. Llevamos un a?o y ya lo tenemos aprobado, pero algunos vecinos nos dicen: 'Oye, que en tres a?os no se va a acabar'".