El festival Cinema Jove alza el tel¨®n sin invitados y con un men¨² exquisito

La ancestral austeridad de las galas de Cinema Jove se acentu¨® ayer con una circunstancia fruto del azar: los tres invitados de post¨ªn a los que el festival rinde homenaje acudir¨¢n a Valencia en los ¨²ltimos d¨ªas del certamen por problemas de agenda. Eso hizo que la ceremonia de inauguraci¨®n de la 19 edici¨®n de Cinema Jove estuviera marcada, m¨¢s que nunca, por su car¨¢cter cinematogr¨¢fico. Ninguna estrella medi¨¢tica asisti¨® al evento, conducido por el actor Santiago Ch¨¢varri,en el que se presentaron los contenidos de esta edici¨®n y los jurados internacionales de cada una de las secciones oficiales.

Tan frugal aperitivo dio paso a un men¨² cinematogr¨¢fico exquisito. Y no es ¨¦sta una expresi¨®n metaf¨®rica, porque la comida es el nudo argumental de las dos pel¨ªculas que abrieron el festival. Cine sobre el alimento visto desde dos puntos de vista contrapuestos, el de la saciedad y el de la anorexia. La saciedad lleg¨® de la mano de Las viandas, el cortometraje de Jos¨¦ Antonio Bonet que gan¨® el concurso de guiones Mercado Joven convocado por el festival el a?o pasado y sirve, en una tradici¨®n muy saludable, como telonero a la pel¨ªcula de inauguraci¨®n. Con dos soberbios actores, Roberto ?lvarez y Josep Maria Pou, como antagonistas, Bonet construye un filme brillante que va de la comedia al terror en el marco de un restaurante barroco y surrealista en el que un condumio imposible ejerce como centro de una pesadilla cada vez m¨¢s l¨²gubre.

La comida es el nudo argumental de las dos pel¨ªculas que abrieron ayer el certamen

Pero si el entrante ya era una delicia para el m¨¢s exigente gourmet cinematogr¨¢fico, el plato principal no se qued¨® atr¨¢s. Primo amore es el reencuentro de Cinema Jove con un viejo conocido del festival valenciano, el realizador italiano Matteo Garrone, ganador hace cinco a?os de la Lluna de Val¨¨ncia al mejor largometraje con Ospiti y autor de L'imbalsamatore, una pel¨ªcula que caus¨® una gran impresi¨®n en su paso por Valencia el a?o pasado y que se llev¨® el merecido bot¨ªn del premio al mejor actor en la figura de Ernesto Mahieux. El miedo a volar de Garrone le impidi¨® acudir a Valencia a presentar su ¨²ltima pel¨ªcula pero, en su lugar, acudi¨® la protagonista del filme, Michela Cescon.

Cescon defini¨® su primer trabajo en el cine, despu¨¦s de muchos a?os dedicada al teatro, como "una experiencia aristocr¨¢tica" por la peculiar manera de trabajar de su director. Dos a?os antes del rodaje del filme, Garrone se puso en contacto con sus actores para preparar una cinta que requer¨ªa un enorme esfuerzo f¨ªsico y mental, incluido el reto de adelgazar 15 kilos durante los dos meses que dur¨® el rodaje asumido por la actriz italiana.

Y es que Primo amore tambi¨¦n tiene a la comida como eje de su trama. En este caso, la sangu¨ªnea historia de amour fou entre un hombre obsesionado por la delgadez y una mujer que cae en la anorexia como punto final de un proceso de degeneraci¨®n en su cuerpo extraordinariamente subrayado por la c¨¢mara de Garrone. Un filme claustrof¨®bico y atrevido que realza la apuesta cinematogr¨¢fica de un festival que ayer comenz¨® sus proyecciones en diferentes salas de la ciudad.

Y, tras el banquete cinematogr¨¢fico de una gala de marcado cariz cinematogr¨¢fico, el postre lleg¨® en la fiesta que el certamen hab¨ªa organizado en un c¨¦ntrico pub del centro hist¨®rico de Valencia. Pero esto ya forma parte de los entresijos inconfesables que todo festival alberga.