Chaves y Maragall acercan posiciones sobre la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica

Manuel Chaves y Pascual Maragall aproximaron ayer posiciones sobre el futuro modelo de financiaci¨®n auton¨®mica cuya reforma, seg¨²n defendieron, debe perseguir un acercamiento de las comunidades del r¨¦gimen com¨²n con el foral. Los presidentes de la Junta de Andaluc¨ªa y de la Generalitat de Catalu?a se esforzaron en poner el acento m¨¢s en las coincidencias que en las discrepancias en su primera reuni¨®n celebrada en el palacio de San Telmo de Sevilla, en la que se produjo una cierta incomodidad a cuenta de la pretensi¨®n del dirigente catal¨¢n de que el PSC tenga grupo propio en el Congreso.

Los dos presidentes auton¨®micos socialistas, que gobiernan los territorios m¨¢s poblados de Espa?a, defienden el principio general de que la financiaci¨®n auton¨®mica debe basarse en que las comunidades paguen en funci¨®n de su renta y reciban de acuerdo con la poblaci¨®n, una cuesti¨®n est¨¢ ¨²ltima considerada b¨¢sica por el Gobierno andaluz.

Maragall sorte¨® todas las cuestiones inc¨®modas que se le plantearon y que pod¨ªan haber te?ido el encuentro con m¨¢s oscuros que claros. As¨ª, enfatiz¨® que defiende un sistema de financiaci¨®n "totalmente sim¨¦trico" ya que, a su juicio, de lo que se trata es de que haya un "sistema igual para todos" si se mantiene la relaci¨®n del binomio renta-poblaci¨®n. Y aunque sin citar expresamente al Pa¨ªs Vasco record¨® que a esta comunidad no se le aplica esta norma, por lo que abog¨®, con prudencia, implicarla en ese camino.

El presidente andaluz destac¨® como una de las "grandes coincidencias" con Catalu?a la de un sistema de financiaci¨®n que permita a las comunidades crear un "espacio fiscal propio y sobre todo, a que en sus resultados tiendan a la convergencia entre las del r¨¦gimen com¨²n y foral". Para Chaves, el modelo debe estar basado en los principios de "corresponsabilidad, suficiencia financiera y equilibrio territorial".

Chaves y Maragall resaltaron la posici¨®n com¨²n de Andaluc¨ªa y Catalu?a sobre la necesidad de profundizar en el Estado de las Autonom¨ªas, las reformas de sus respectivos Estatutos y del Senado, la creaci¨®n de una conferencia de presidentes auton¨®micos y la presencia de las comunidades en los consejos de ministros europeos.

Aunque ninguno de los dos abog¨® expresamente por la creaci¨®n de una "alianza" entre Catalu?a y Andaluc¨ªa, s¨ª acordaron la puesta en marcha de un grupo de trabajo "para coordinar la acci¨®n exterior" de ambos gobiernos, especialmente, en el sur del Mediterr¨¢neo; mantener abierto "un canal permanente de informaci¨®n" sobre los respectivos procesos de reforma estatutaria; crear un foro de encuentro de empresarios para estudiar problemas como la deslocalizaci¨®n; y fomentar programas culturales comunes de los museos Picasso de M¨¢laga y Barcelona y de las fundaciones andaluzas de las Tres Culturas y el Legado Andalus¨ª y el Instituto Euromediterr¨¢neo de Barcelona.

Para Chaves, Andaluc¨ªa y Catalu?a tienen "una especial responsabilidad de tirar del carro en la modernizaci¨®n del Estado de las Autonom¨ªas", mientras que para Maragall "la relaci¨®n" de las dos comunidades "va a ser crucial" para la buena marcha de Espa?a. Pero dicho esto, ambos eludieron considerar como "una alianza" catalanoandaluza los acuerdos y coincidencias, una propuesta que s¨ª hizo el presidente de la Junta a finales de diciembre de 2003 con el fin de impulsar el Estado auton¨®mico. En ese momento, Maragall hab¨ªa logrado, no sin pocos esfuerzos, trenzar el pacto de gobierno tripartito y, sobre todo, el Gobierno de la naci¨®n estaba en manos del Partido Popular y las encuestas de entonces no vaticinaban un triunfo del socialista Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Una vez que se produjo la victoria de ¨¦ste, ni Chaves ni ning¨²n otro miembro del Gobierno andaluz ha vuelto a hablar de "alianza" u "eje" de Catalu?a y Andaluc¨ªa.

El inter¨¦s mostrado por ambos presidentes para esquivar las divergencias qued¨® tambi¨¦n claro cuando a bocajarro se le pregunt¨® a Maragall si manten¨ªa que no deb¨ªa darse "ni un gota de agua del Ebro" al levante espa?ol, es decir, a Almer¨ªa. "La satisfacci¨®n en las tierras del Ebro es absoluta y total", afirm¨® el catal¨¢n. Y Chaves, que se enfrenta casi a diario a los reproches del PP por la suspensi¨®n del trasvase, sali¨® al quite: "El Gobierno anterior fue incapaz de buscar el consenso. Lo importante es que vamos a tener m¨¢s agua, m¨¢s barata y en un plazo m¨¢s breve".