"El final de una generaci¨®n"
La prensa francesa carga contra su selecci¨®n, que "ya no sabe atacar y defenderse a la vez"
Los comentarios de la prensa francesa, tras la derrota de la selecci¨®n ante la griega, coinciden: "Les bleus se van [de la Eurocopa] sin jugar", dice Le Monde. Le Parisien da a la selecci¨®n por "acabada". L'Equipe estima "indefendible" el f¨²tbol desarrollado por la a¨²n vigente campeona de Europa. Para la mayor¨ªa de los comentaristas, "las razones del desastre" son "m¨²ltiples -cansancio, errores t¨¢cticos, ausencias...-", pero todo lleva a pensar que se vive "el final de una generaci¨®n". Es una hip¨®tesis contemplada tanto por la prensa escrita como por los cronistas televisivos y radiof¨®nicos. "Adem¨¢s, algunos jugadores llevan en sus piernas tantos minutos de f¨²tbol de verdad como de f¨²tbol para anuncios televisivos", critica un semanario.
"Algunos llevan tantos minutos de f¨²tbol de verdad como de f¨²tbol de anuncios televisivos"
Le Nouvel Observateur ironiza con que los jugadores se desenvuelven a "un ritmo de senador", es decir, de gente respetable y entrada en a?os. Para Michel Platini, el m¨¢ximo goleador franc¨¦s de todos los tiempos y antiguo seleccionador, les bleus de Portugal "no han sido mejores que los de Corea y Jap¨®n. S¨®lo han tenido m¨¢s suerte". En tierras asi¨¢ticas, Francia no gan¨® ning¨²n encuentro ni marc¨® ning¨²n gol.
Lib¨¦ration no tiene el menor reparo a la hora de nombrar los jugadores ya del pasado: Thuram, Lizarazu, Desailly, quiz¨¢s Barthez y no nos atrevemos a decir Zidane". Otros a?aden a Vieira, Marlet, Govou, Wiltord y Dacourt a un lote que ya no se limita a las cuestiones de edad, treinta?eros, sino tambi¨¦n al nivel de juego.
"Hacer tabla rasa" recomienda La Marsellesa. Eso es tambi¨¦n lo que sugiere L'Equipe en su editorial. Las broncas contra el seleccionador, Jacques Santini, son m¨ªnimas. En Le Parisien le reprochan, eso s¨ª, que, "antes de empezar el campeonato, firmase un contrato millonario con el Tottenham", ingl¨¦s. Pero Santini se hab¨ªa labrado cierto prestigio haciendo campe¨®n de Francia al Ly¨®n. Su caso no es el de Aim¨¦e Jacquet, el seleccionador de 1998, que lo gan¨® todo porque con aquellos jugadores era dif¨ªcil perder. Al conjunto de hoy le faltan "un Blanc y un Deschamps y no tiene alegr¨ªa, ni ideas, ni ganas, ni talento colectivo", insiste L'Equipe.
Lo cierto es que Francia se ha empe?ado en hacer jugar a dos grandes delanteros incompatibles, Henry y Trezeguet. A lo largo del torneo, cada vez que Saha ha reemplazado a Trezeguet -"demasiado calamitoso para creer que ¨¦l es el ¨²nico responsable"- la selecci¨®n azul "recuper¨® tono y agresividad".
La fama, los contratos publicitarios, el peso del vestuario, el jugar en equipos prestigiosos parece haber influido a la hora de confeccionar el conjunto. S¨®lo eso explica, por ejemplo, que Micoud, que ha hecho ganar la Liga alemana al Werder Bremen, no encontrara un hueco, siquiera fuese como suplente de Zidane; o que Mex¨¦s, que logr¨® que el modesto Auxerre sea un equipo poco goleado, no haya desplazado hace ya tres temporadas a un Desailly con demasiados partidos en su tax¨ªmetro.
Como Santini ya hab¨ªa anunciado su marcha, en Francia la guerra por la sucesi¨®n ha comenzado. Platini, siempre influyente, ya ha votado: propone a Jean Tigana, compa?ero de generaci¨®n del equipo que maravill¨® en la Copa del Mundo de Espa?a 1982. Luis Fern¨¢ndez y Laurent Blanc tambi¨¦n figuran en las quinielas. Pero el verdadero problema es renovar una selecci¨®n que, seg¨²n L'Equipe, "ya no sabe hacer dos cosas a la vez: atacar y defenderse".
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