Moratinos quiere sacar la diplomacia espa?ola de su torre de marfil
La reforma prev¨¦ nuevos m¨¦todos de reclutamiento y mayor cercan¨ªa al ciudadano
"La diplomacia vienesa y cortesana debe ser cosa del pasado. Hemos estado en una especie de turris eburnea [torre de marfil, en lat¨ªn] que nos ha alejado de la sociedad. Hoy en d¨ªa un diplom¨¢tico debe ser un coordinador y un intermediador entre los numerosos agentes de la acci¨®n exterior, ONG, empresas, universidades, sindicatos...". Melit¨®n Cardona resume as¨ª el sentido de la reforma del servicio exterior que le ha encomendado el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos.
Como presidente de la comisi¨®n especial creada por el Consejo de Ministros del pasado 25 de junio, Cardona -un diplom¨¢tico que ha sido c¨®nsul general en Mosc¨² y subdirector general de ?frica-, tendr¨¢ que dirigir la elaboraci¨®n de un informe al Gobierno en el plazo m¨¢ximo de un a?o. Todos los ministerios, menos el de Vivienda, se han apresurado a designar representantes en esta comisi¨®n, de 18 miembros.
Pero aunque haya aspectos de la reforma que ata?en a distintos departamentos -a Trabajo, por ejemplo, el r¨¦gimen laborar del personal contratado en el extranjero, o a Justicia, la legislaci¨®n sobre tratados internacionales-, el ministerio m¨¢s concernido es, sin duda, Exteriores. Cardona entiende su tarea como un catalizador para superar los numerosos anacronismos que contiene su propia casa, sin incurrir en competencias superfluas ni rivalidades in¨²tiles con otros ministerios, generalmente mejor dotados, presentes en la acci¨®n exterior espa?ola. No se trata, en concreto, de volver a plantear la unificaci¨®n de los diplom¨¢ticos con los t¨¦cnicos comerciales del Estado, porque el asunto se considera superado.
A Cardona s¨ª le preocupa, en cambio, y Moratinos comparte totalmente su inquietud, el sistema de ingreso en una carrera que, seg¨²n se ha se?alado muchas veces, tiende estructuralmente a una cierta endogamia por dos motivos: la gran valoraci¨®n de los idiomas en las oposiciones de ingreso, lo que favorece de modo natural a los hijos de diplom¨¢ticos, y el alto coste de una formaci¨®n espec¨ªfica para la que no existen becas y que, como media, viene requiriendo cinco a?os adicionales de estudio al posgraduado.
La propia Escuela Diplom¨¢tica, con sus rutinas y sus ex¨¢menes tem¨¢ticos, que, una vez superados, otorgan autom¨¢ticamente la condici¨®n de funcionario, resume todo el anacronismo de un sistema de reclutamiento que, en opini¨®n del presidente de la comisi¨®n para la reforma, "no hay servicio exterior que se lo pueda permitir".
Poca cultura inform¨¢tica
"Se sigue estudiando la hipoteca naval, pero no t¨¦cnicas de negociaci¨®n, ni de gesti¨®n de personal o de gesti¨®n econ¨®mica. No se valoran las capacidades pr¨¢cticas", a?ade Cardona, que se pregunta: "?Se puede ser diplom¨¢tico, por mucho que se sepa del Tratado de Utrecht, sin tener cultura inform¨¢tica, ni siquiera a nivel de usuario?". S¨®lo un 20% del personal de Exteriores supera hoy esa prueba.
El encargado de la reforma propondr¨¢ un examen de "aptitudes y actitudes para puestos diplom¨¢ticos" que dar¨ªa acceso a un a?o de funcionario en pr¨¢cticas, tras el cual llegar¨ªa la aceptaci¨®n o el rechazo definitivo del candidato.
Otros dos ejes fundamentales de la renovaci¨®n son el t¨¦cnico y el econ¨®mico. En el primer aspecto, est¨¢ previsto que se falle en julio el concurso para el desarrollo de una intranet, una red internacional cerrada que facilitar¨¢ el acceso a la informaci¨®n por parte de todo el personal y dar¨¢ a Exteriores la estructura menos jer¨¢rquica que necesita en un mundo abierto, donde tiene que demostrar rapidez y eficacia para resolver demandas sociales concretas.
El proyecto tiene un presupuesto de 18 millones de euros, logrados por Ana Palacio en su etapa de ministra, y en ¨¦l compiten empresas como Telef¨®nica, France T¨¦l¨¦com y la alemana T Online.
Otro eje de la reforma ser¨¢ la optimizaci¨®n de unos recursos muy limitados. Exteriores tiene un presupuesto casi id¨¦ntico al de RTVE. "Con la diferencia de que el nuestro incluye las aportaciones de Espa?a a los organismos internacionales y de que no podemos tener d¨¦ficit", precisa Cardona.
La primera tarea que se plantea en ese sentido es una gran reestructuraci¨®n de embajadas y consulados. "?Hemos de seguir teniendo 17 embajadas en ?frica? ?Por qu¨¦ no cargar algunas a los presupuestos de cooperaci¨®n, como hace Suecia? ?Se corresponde nuestro mapa de consulados con el de los flujos tur¨ªsticos? Hay cientos de millones de chinos que quieren venir a Espa?a, pero no tenemos capacidad de gestionar sus visados". Demasiadas preguntas que afrontar en 12 meses, aunque el encargado de la reforma piensa que tal vez le sobre tiempo.
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