Investigadores valencianos obtienen dos l¨ªneas de celulas madre embrionarias
Los trabajos se sustentan en la ley de noviembre pasado, no desarrollada reglamentariamente
El investigador valenciano Carlos Sim¨®n present¨® ayer las dos primeras l¨ªneas celulares obtenidas en Espa?a a partir de embriones humanos congelados. VAL-1 y VAL-2 son una reserva de c¨¦lulas madre que quedar¨¢n a disposici¨®n de otros investigadores para ser transformadas en cualquier tejido humano. Las l¨ªneas celulares disponibles son muy escasas en todo el mundo, y en Europa s¨®lo Suecia y el Reino Unido han avanzado en estas investigaciones. La ex ministra de Sanidad Ana Pastor y el consejero de Sanidad valenciano, Vicente Rambla, ambos del PP, acudieron a la presentaci¨®n.
A Carlos Sim¨®n le gusta decir que lo suyo es fabricar "ladrillos de buena calidad". Estos ladrillos son las dos l¨ªneas de c¨¦lulas indiferenciadas, capaces de dividirse indefinidamente. Luego, los investigadores en medicina regenerativa deber¨¢n ser los encargados de "construir los edificios", o lo que es lo mismo, aprender a trabajar con estas c¨¦lulas. Primero, para saber c¨®mo tratarlas para que abandonen su etapa de indiferenciaci¨®n y hacer de ellas c¨¦lulas del coraz¨®n, del h¨ªgado, del ri?¨®n o neuronas. M¨¢s tarde, para aprender a crear tejidos con los que reparar ¨®rganos da?ados por enfermedades degenerativas. Para que se empiece a obtener resultados en estas dos ¨²ltimas fases, el director de investigaci¨®n de la fundaci¨®n del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) plantea un horizonte de unos 10 a?os. Pero la primera etapa ya se ha cubierto, y el camino no ha sido f¨¢cil.
Sim¨®n, responsable de la unidad de derivaci¨®n celular del centro de medicina reparativa, el CSAT, que la Generalitat valenciana inaugurar¨¢ despu¨¦s del verano, llevaba trabajando ya dos a?os y medio en los procesos de obtenci¨®n de c¨¦lulas madre embrionarias. Primero, como la ley no lo permit¨ªa de otra forma, con embriones congelados no viables, un proceso "mucho m¨¢s complejo". Se trataba de emplear embriones con alteraciones cromos¨®micas que no podr¨ªan implantarse en el ¨²tero con ¨¦xito y tratar de extraer de ellos l¨ªneas celulares. "Lo intentamos con unos 200 y, en el mejor de los casos llegamos a mitad del proceso con alguno de ellos, pero nos sirvi¨® para ir aprendiendo".
Aprendizaje en California
Estos ensayos los combinaron con estancias en la Universidad de California en San Francisco, donde Sim¨®n y otros investigadores aprendieron a desarrollar algunas de las t¨¦cnicas empleadas para obtener las l¨ªneas. Con esos conocimientos, los cient¨ªficos se pusieron en marcha.
La investigaci¨®n con embriones s¨®lo est¨¢ permitida con embriones que lleven m¨¢s de cinco a?os congelados y siempre que sus progenitores accedan a ceder el material biol¨®gico, seg¨²n estableci¨® la reforma de la ley de reproducci¨®n asistida de noviembre del a?o pasado. El equipo de Sim¨®n se comunic¨® con la Consejer¨ªa de Sanidad, seg¨²n explic¨® ¨¦l mismo ayer, y ¨¦sta le dio el visto bueno para que llevara a cabo la investigaci¨®n. La ley de noviembre a¨²n no se ha desarrollado reglamentariamente, por lo que algunas fuentes pusieron ayer en duda el procedimiento seguido en este caso.
Se tomaron 40 embriones, de los que, tras descongelarlos, sobrevivieron 16 hasta la fase de blastocisto. A partir de este momento comenz¨® un proceso de dos meses dirigido a frenar la diferenciaci¨®n de la c¨¦lulas y multiplicarlas. Un lecho de fibroblastos de placenta humana en las placas de cultivo sirvi¨® para frenar la especializaci¨®n celular mientras se multiplicaban sin cesar. Hasta el momento, de las 72 l¨ªneas celulares conocidas, s¨®lo ocho hab¨ªan sido creadas con esta t¨¦cnica, mientras que las restantes se desarrollan en soporte celular de ratones, lo que impide futuras aplicaciones en terapia humana.
Divisi¨®n de las colonias
Cuando las colonias desarrolladas en los cultivos alcanzan de 400 a 500 c¨¦lulas, lo investigadores valencianos las divid¨ªan en dos cultivos, y as¨ª sucesivamente hasta alcanzar el centenar. A partir de entonces, pasados dos meses del inicio del proceso, se analizaron los cultivos para comprobar que se trataba efectivamente de c¨¦lulas madre. Se sometieron a pruebas de cariotipo para ver que su estructura cromos¨®mica fuera normal, de marcadores de indiferenciaci¨®n y de telomerasas, dirigidas a comprobar su inmortalidad. Finalmente, al cabo de tres meses, dos de ellas, Valencia 1 y Valencia 2 (VAL-1 y VAL-2, ambas procedentes de embriones femeninos) superaron la criba, un resultado que arroja una eficiencia del 12,5%, "bastante notable", seg¨²n Sim¨®n.
El equipo del cient¨ªfico valenciano, que prev¨¦ publicar la investigaci¨®n en la revista especializada Fertility and Sterility, enviar¨¢ una muestra al Stem Cell Bank del Reino Unido, en Pottersville. En seis meses, Sim¨®n prev¨¦ que estar¨¢n al alcance de los investigadores que lo deseen previa petici¨®n al CSAT a trav¨¦s del Centro Nacional de Trasplantes y Medicina Regenerativa.
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