Estabilidad financiera
El pasado 26 de junio los gobernadores y jefes de los organismos de supervisi¨®n de los pa¨ªses del G 10 aprobaron el "Marco para la convergencia internacional de la adecuaci¨®n del capital", conocido como Basilea II. Este marco, elaborado por el Comit¨¦ de Supervisores Bancarios de Basilea, presidido por el gobernador del Banco de Espa?a, es la culminaci¨®n de m¨¢s de cinco a?os de trabajo y de continuo di¨¢logo con las entidades y con organismos no representados en el comit¨¦, y supone un importante hito en la regulaci¨®n prudencial de la banca.
En su actividad los bancos asumen riesgos: de cr¨¦dito, de mercado, operativos, estrat¨¦gicos.... Para hacer frente a los mismos necesitan sistemas de gesti¨®n adecuados y suficiente capital. El capital constituye la ¨²ltima l¨ªnea de defensa ante p¨¦rdidas inesperadas.
Basilea II aproxima la medici¨®n de riesgos del supervisor a la forma de medir los riesgos de las entidades
Una de las funciones de las autoridades p¨²blicas es salvaguardar la estabilidad financiera, necesaria para la estabilidad econ¨®mica. La exigencia de que los bancos tengan un nivel de capital acorde con sus riesgos es una regla prudencial fundamental. La necesidad de que entidades de distintos pa¨ªses que compet¨ªan en los mismos mercados estuvieran sometidas a normas semejantes llevaron al comit¨¦ a elaborar, en 1988, el primer "Marco internacional de adecuaci¨®n de capital", llamado Basilea I. Sigue siendo una referencia para determinados pa¨ªses y entidades.
Todo marco de adecuaci¨®n de capital debe contestar dos preguntas b¨¢sicas: ?c¨®mo medir los riesgos? y ?cu¨¢nto capital se precisa para cubrirlos?
Basilea I dio respuestas simples y adecuadas al momento: el riesgo de cr¨¦dito lo pondera en relaci¨®n con el sector institucional del acreditado (por ejemplo, una empresa privada supone mayor riesgo que un Estado; todas las empresas privadas tienen igual riesgo); el capital exigido es igual al 8% de los riesgos ponderados.
Transcurridos diez a?os, Basilea I no se adaptaba bien a la gesti¨®n y medici¨®n de los riesgos de la banca, que comenzaba a introducir modelos sofisticados, ni a la evoluci¨®n de la actividad financiera.
Hac¨ªa falta una revisi¨®n de marco del 88. Esta revisi¨®n, llamada Basilea II, aproxima la medici¨®n de riesgos del supervisor a la forma de medir los riesgos de las entidades, manteniendo el convencional 8% como exigencia de capital, y estimula el desarrollo de procedimientos internos adecuados de gesti¨®n de riesgos. Para ello usa un esquema de "tres pilares", que se aplican simult¨¢neamente: la exigencia de un capital m¨ªnimo -Basilea I modificado sensiblemente y a?adida la cobertura para fallos operativos- forma el primer pilar. El segundo es la revisi¨®n supervisora, que incluye un di¨¢logo entre supervisor y entidad acerca de las necesidades de capital que la propia entidad ha estimado tras un an¨¢lisis de su perfil de riesgos. La informaci¨®n que la entidad debe suministrar al mercado constituye el tercer pilar.
Para la medici¨®n de los riesgos del pilar 1, Basilea II proporciona un men¨² de enfoques que van desde los m¨¢s simples a los m¨¢s sofisticados. Estos ¨²ltimos se basan en los c¨¢lculos internos de las entidades y constituyen una aportaci¨®n del nuevo marco. Las propias entidades, tras cumplir unos requisitos, calculan las variables relevantes para medir las potenciales p¨¦rdidas de su negocio que deben cubrirse con capital. Los enfoques m¨¢s avanzados implican menores exigencias de capital que aquellos m¨¢s simples.
Al promover una adecuada capitalizaci¨®n de los bancos e incentivar mejoras en la gesti¨®n del riesgo, Basilea II tendr¨¢ un impacto positivo sobre la estabilidad. El propio proceso de elaboraci¨®n del nuevo marco ha propiciado una toma de conciencia de supervisores y entidades acerca de la importancia de la gesti¨®n de riesgos. Tambi¨¦n ha generado un fruct¨ªfero di¨¢logo entre supervisores y entidades, as¨ª como entre supervisores de varios pa¨ªses, que permitir¨¢ una mejor colaboraci¨®n durante la compleja fase de implantaci¨®n de Basilea II.
Fernando Vargas Bahamonde es Director del departamento de Instituciones Financieras del Banco de Espa?a.
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