Jauja

Jueves 8 de julio, 21.30. Me dispongo a estacionar mi veh¨ªculo en la calle situada entre el hospital Cl¨ªnico y la Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz para ir a trabajar; no puedo, un gorrilla me lo impide y me amenaza; llamo a la polic¨ªa. Al no venir ning¨²n coche patrulla, asumo que Gallard¨®n ha cambiado el uniforme a los reguladores del tr¨¢fico (pues son lo m¨¢s parecido a un parqu¨ªmetro andante), retiro mi veh¨ªculo y busco un sitio donde no sufra ning¨²n da?o.

Mi¨¦rcoles 7 de julio, 18.30. Calle de los Hermanos Garc¨ªa Noblejas. Paso con mi veh¨ªculo al lado del concesionario Toyota que se encuentra en dicha calle, miro perplejo y veo un coche de la Polic¨ªa Municipal en segunda fila; dentro del concesionario Toyota veo a un agente sumamente interesado en uno de los veh¨ªculos que est¨¢ a la venta... Me pregunto si Ruiz-Gallard¨®n prest¨® un coche patrulla para que los agentes se diviertan viendo coches o para dirigir el tr¨¢fico... Pero no olvidemos un detalle... Ellos en segunda fila.

Mi¨¦rcoles 7 de julio, 17.00. En Moratalaz, frente al cuartel de la Polic¨ªa Nacional, en una glorieta regulada por sem¨¢foros, un coche patrulla de la Polic¨ªa Municipal se salta de forma impune un sem¨¢foro sin llevar ning¨²n tipo de se?al sonora o ac¨²stica... Mi pregunta es si a estos agentes no se les instruy¨® adecuadamente sobre c¨®mo pulsar el bot¨®n que pone en funcionamiento dichas se?ales, o simplemente hac¨ªan todo por lo que a los dem¨¢s nos multan simplemente para predicar con el ejemplo. Supongo que, en caso de colisi¨®n, la culpa ser¨ªa m¨ªa, porque ellos son ley.

Se?or Ruiz-Gallard¨®n, no s¨¦ cu¨¢ntos le volver¨¢n a votar; yo, desde luego, ya no.