La mujer que vino del vidrio

Pocos d¨ªas antes de que naciera Vict¨°ria Anna se anunciaba una comisi¨®n internacional para supervisar la ¨¦tica de una t¨¦cnica que en seis a?os de vida hab¨ªa incomodado a algunos. "La ciencia no debe dar hijos a quien la naturaleza se los niega", esgrim¨ªan los contrarios. La Iglesia cat¨®lica tard¨® poco en condenarla. El informe Warlock, redactado por m¨¦dicos, te¨®logos y catedr¨¢ticos ingleses, recomendaba reservar la Fecundaci¨®n in Vitro (FIV) a parejas estables.

Eran continuas las noticias que generaba, casi siempre en el otro punto del planeta: desde Melbourne (Australia) anunciaban el primer parto a trav¨¦s de un ¨®vulo congelado, el primero de cuatrillizos, y un estudio que indicaba que los ni?os probeta eran m¨¢s inteligentes. Fue en la tarde del 12 de julio de 1984 cuando la Louise Brown (primera ni?a probeta) espa?ola naci¨® en la cl¨ªnica Dexeus de Barcelona, seis a?os despu¨¦s que la original. Pes¨® 2,470 kilos.

"Sab¨ªa que yo era especial porque cada a?o me iban ense?ando m¨¢s revistas"

Tras 20 a?os, Vict¨°ria Anna Perea (su segundo nombre es un homenaje a la bi¨®loga Anna Veira, que la ayud¨® a nacer; el primero, m¨¢s obvio) es una coqueta estudiante de tercero de Publicidad y Relaciones P¨²blicas sin m¨¢s singularidad f¨ªsica que un nervioso ladeo de cabeza para librar a su ojo izquierdo del flequillo. Ayer volvi¨® a la cl¨ªnica donde naci¨® a soplar las velas de su tarta de cumplea?os. Como una m¨¢s. Hoy es sabido que los beb¨¦s probeta no son m¨¢s inteligentes que el resto.

"Voy a la playa, al cine... Es que no s¨¦ que decir", se excusaba Vict¨°ria Anna. La de ayer fue una excepci¨®n a una vida alejada de los focos por voluntad de sus padres. "Sab¨ªa que era especial, porque cada a?o me ense?aban m¨¢s revistas, de forma progresiva". "Estoy orgullosa de haber dado esperanza a muchos padres", a?adi¨®.

El estado de las trompas de Falopio de su madre, cat¨®lica practicante, hac¨ªan quim¨¦rico un nuevo embarazo. El doctor Pere Nolasc Barri le habl¨® de una t¨¦cnica que hab¨ªa dado 600 frutos en el resto del mundo. "Al principio ten¨ªa muy poca fe, pero cuando me reimplantaron el ¨®vulo fecundado, pens¨¦ que todo ir¨ªa bien".

El debate ¨¦tico se agot¨® muy pronto. La sociedad entendi¨® que no era m¨¢s que un tratamiento m¨¦dico para curar una enfermedad, la esterilidad. El porcentaje de ¨¦xito ha pasado del 15% de sus inicios al 40% actual. Los esfuerzos se dirigen ahora a reducir el n¨²mero de partos m¨²ltiples. En dos a?os, las gestaciones de gemelos han disminuido del 34% al 21%. En la cl¨ªnica Dexeus han nacido m¨¢s de 5.500 beb¨¦s probeta, y hay otros 140 centros similares en Espa?a. Cerca de 600.000 parejas espa?olas tienen problemas de fecundidad. La t¨¦cnica est¨¢ abierta a mujeres solas.

El director de la cl¨ªnica, Santiago Dexeus, dej¨® escapar ayer un sucinto "al fin" por la autorizaci¨®n del Gobierno a desarrollar l¨ªneas celulares a partir de c¨¦lulas madre. Para Anna Veira, es inevitable que a las innovaciones cient¨ªficas les acompa?en "anticuerpos de ciertas creencias". "Siempre que trabajemos a favor de la humanidad, nos importar¨¢ muy poco lo que digan", termin¨®.