Los 'Halcones' volaron de Checoslovaquia a Catalu?a
El F¨®rum de Barcelona acogi¨® una exhibici¨®n de torres humanas que levantaron siete agrupaciones de 'falcons'.
Primer d¨ªa de agosto en el F¨®rum. Calor. Mucho calor. Y visitantes, m¨¢s bien pocos. El ¨¦xodo vacacional hizo mella ayer en el F¨®rum de las Culturas de Barcelona, aunque la afluencia de p¨²blico fue aumentando a medida que bajaban los term¨®metros. Aquellos que, desafiando el mercurio, decidieron acercarse a media ma?ana al recinto del Bes¨°s pudieron disfrutar, adem¨¢s de la amplia oferta cultural diaria, de un espect¨¢culo que con toda probabilidad no se volver¨¢ a repetir en el F¨®rum: la actuaci¨®n conjunta durante tres horas de los siete grupos de falcons (halcones) de Catalu?a.
Pero, ?qu¨¦ son exactamente los falcons? ?Tienen algo que ver con los halcones? ?Y con los castellers? Vayamos por partes. Aunque algunas de sus figuras se parecen mucho a la de los tradicionales castellers -autores de estas espectaculares torres humanas denominadas "castillos", que pueden alcanzar una complejidad considerable-, en realidad, los falcons son una modalidad de creaci¨®n de figuras humanas distinta. "Los castellers hacen torres humanas y lo que hacemos nosotros son figuras humanas con formas m¨¢s gimn¨¢sticas", explic¨® ayer al mediod¨ªa I?aki Mart¨ªnez, presidente de la colla de Vilafranca del Pened¨¨s (Barcelona). "Somos m¨¢s el¨¢sticos y m¨¢s r¨¢pidos, y nuestros n¨²meros son mucho menos est¨¢ticos que los de los castellers", a?adi¨® Oriol Odina, quien se defini¨® como el relaciones p¨²blicas del grupo.
Los falcons aparecieron como manifestaci¨®n de folclore en Catalu?a hacia el a?o 1932, cuando el cura Albert Bonet, que precisamente era de Vilafranca, regres¨® de un viaje que hab¨ªa hecho por lo que entonces era Checoslovaquia. Durante su visita, Bonet qued¨® prendado de unos grupos formados por hasta 200 personas que hac¨ªan unas impresionantes figuras humanas. Se llamaban sokol, que traducido al catal¨¢n significa falc¨® (halc¨®n).
Poco a poco se fueron fundando grupos parecidos en Catalu?a, pero donde m¨¢s han perdurado y triunfado ha sido en la tierra de los castellers. El grupo m¨¢s antiguo que todav¨ªa sigue actuando es el de Lloren? del Pened¨¨s (Tarragona) -fundado en 1942-, y el m¨¢s joven, el de Barcelona, surgido hace poco m¨¢s de un a?o. Todos sus miembros inundaron ayer el recinto del F¨®rum acompa?ados por muchos familiares y amigos. Tambi¨¦n hab¨ªa muchos ni?os, ya que, igual que ocurre con los castellers, ellos son los que suelen subir m¨¢s alto y coronar las figuras. Y cuando lo hacen, extienden los dos brazos como si emularan las alas de un halc¨®n. De aqu¨ª el nombre de estos grupos.
Todos los grupos actuaron en distintas zonas del recinto como en la escalinata de la placa fotovoltaica, en la plaza de los Miradores y en los muelles de la zona del futuro puerto de Sant Adri¨¤ del Bes¨°s. Al final, el escenario de la Marina cambi¨® por un d¨ªa de hu¨¦spedes y les brind¨® el espacio para que mostraran sus habilidades al p¨²blico del F¨®rum.
Pero antes y despu¨¦s de esta exhibici¨®n de folclore catal¨¢n, los visitantes pudieron gozar de la ¨²ltima batucada de los carism¨¢ticos brasile?os Moleque de R¨²a; de la m¨²sica, contorsionismo y equilibrismo de los indios Jiyo, y de las locuras y provocaciones del payaso estadounidense Jango Edwards, junto a la compa?¨ªa Mi Brazo Izquierdo, en el espect¨¢culo Montando pollos, nunca mejor dicho. Un amplio abanico de ofertas para que cada cual se confeccione su visita a medida. El flamenco, que durante toda la semana ha protagonizado las tardes y las noches del F¨®rum, se despidi¨® ayer del recinto con la actuaci¨®n de Tortas de Jerez y con la gran Fiesta Gitana de La Mina, en la que participaron los artistas surgidos de este barrio vecino del F¨®rum.
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