La Guardia Civil unifica el contraespionaje y la lucha contra el terrorismo islamista

La Guardia Civil ha emprendido tras el 11-M una "reorganizaci¨®n del Servicio de Informaci¨®n" encargado de prevenir y combatir el terrorismo y los movimientos "de desestabilizaci¨®n". Los cambios afectan sobre todo al servicio de Contrainteligencia y a la Unidad Central Especial 2 (UCE 2), la dedicada al fen¨®meno islamista, que triplicar¨ªa sus efectivos para atender a este tipo de terrorismo, a la delincuencia internacional "con potencial desestabilizador" y a las redes de "inmigraci¨®n ilegal". La polic¨ªa tambi¨¦n va a remodelar a partir de septiembre la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n.

El instituto armado crear¨¢ un Centro de Adiestramiento y Reciclaje para especializar a sus agentes en las nuevas amenazas terroristas

Los atentados del 11 de marzo pusieron de manifiesto los problemas de comunicaci¨®n interna en polic¨ªa y Guardia Civil y de descoordinaci¨®n entre diferentes cuerpos y revelaron que las fuerzas de seguridad no estaban preparadas para combatir el nuevo y creciente fen¨®meno del terrorismo islamista. Hab¨ªa pocos medios y estaban mal repartidos y utilizados.

El ministro del Interior, Jos¨¦ Antonio Alonso, puso en marcha nada m¨¢s llegar al departamento dos medidas para intentar acabar con estos problemas: el Comit¨¦ Ejecutivo del Mando ?nico (CEMU) y el llamado Centro Nacional de Coordinaci¨®n Antiterrorista (CNCA), creado en parte a la imagen del Centro Conjunto de Evaluaci¨®n del Terrorismo del Reino Unido (JTAC, en sus siglas en ingl¨¦s).

La cuesti¨®n es que el CNCA no ser¨¢ una unidad operativa. S¨ª tendr¨¢ "una sala de operaciones", activa "las 24 horas del d¨ªa", pero dicha sala "no dirigir¨¢ las operaciones antiterroristas, sino que canalizar¨¢ todas las informaciones relativas al terrorismo". Por ello, cada cuerpo ha tenido que afrontar su propia reestructuraci¨®n para hacer frente a los nuevos retos, ya que el trabajo a pie de obra (desde la captaci¨®n de la informaci¨®n hasta la ejecuci¨®n de las operaciones) lo seguir¨¢n haciendo por separado en sus ¨¢reas de trabajo.

La Guardia Civil se embarc¨® en una reorganizaci¨®n del servicio de Informaci¨®n, que cuenta con un total de 2.100 agentes en las unidades centrales y perif¨¦ricas, poco despu¨¦s del 11-M. El objetivo es "adecuar la estructura espec¨ªfica del servicio de Informaci¨®n" a "las nuevas amenazas" puestas brutalmente de manifiesto "tras los graves acontecimientos terroristas que han afectado a la casi totalidad del orden mundial", seg¨²n reza en un documento del instituto armado.

La reestructuraci¨®n divide el servicio en tres grandes unidades centrales (con trasiego de grupos entre ellas) y crea una escuela "de adiestramiento y reciclaje" para los agentes antiterroristas. La Unidad Central Especial 1 (UCE1) combatir¨¢ las "amenazas terroristas internas que afecten m¨¢s gravemente a la seguridad interior del Estado". Esta unidad ha estado tradicionalmente dedicada a la lucha contra ETA, que sigue siendo considerada una prioridad mientras no deje las armas.

Triplicar efectivos

La UCE 2 se especializa en "el resto de las amenazas terroristas, tanto de nivel nacional como internacional", y para aumentar su eficacia tambi¨¦n atender¨¢ a los "grupos delincuenciales organizados con potencial desestabilizador y organizaciones dedicadas a favorecer la inmigraci¨®n ilegal".

La UCE 2 dispone de un Grupo de Informaci¨®n Exterior, en el que en la actualidad trabajan 62 agentes. La previsi¨®n del Gobierno es que otros 150 guardias se sumen a esta unidad lo antes posible, previo paso por el nuevo Centro de Adiestramiento y Reciclaje del Servicio de Informaci¨®n, a cuyo mando estar¨¢ un comandante. Este refuerzo supone triplicar los efectivos contra el terrorismo internacional, pero esos 212 efectivos a¨²n quedar¨¢n lejos de los dedicados a ETA.

Esta unidad se quedar¨¢ sin el llamado Grupo de Informaci¨®n General, que junto con la Unidad Central de Contrainteligencia queda integrado en la nueva Unidad Central Especial 3 (UCE 3). ?sta recabar¨¢ informaci¨®n para combatir "sectas, movimientos racistas, xen¨®fobos y antisistema, defensa nacional, contrainteligencia y seguridad del cuerpo, ciberterrorismo y tecnolog¨ªas de la informaci¨®n".

Las UCE 2 y 3 estar¨¢n especialmente relacionadas, seg¨²n fuentes del cuerpo, "ya que son las que m¨¢s sinergias van a generar". La reforma, no obstante, "va despacio porque la gente no se especializa de la noche a la ma?ana" y porque "no se puede descuidar el servicio de informaci¨®n mientras se abordan los cambios, porque hueco que dejemos, hueco que los malos pueden utilizar en cualquier momento, como qued¨® claro el 11-M".

Tambi¨¦n la polic¨ªa est¨¢ elaborando un plan para remodelar la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n, donde tambi¨¦n est¨¢ prevista la incorporaci¨®n de 150 funcionarios para reforzar el combate contra el terrorismo islamista. La intenci¨®n, seg¨²n fuentes del Ministerio del Interior, es comenzar a abordar los cambios a partir del mes que viene. Fundamentalmente supondr¨¢ una redistribuci¨®n de efectivos y el cambio de nombre de algunas unidades.

La remodelaci¨®n, pendiente de algunos ajustes y cambios de personal (fundamentalmente en los puestos directivos), supondr¨¢ reforzar el Servicio de Asuntos ?rabes e Isl¨¢micos, encuadrado en la Unidad Central de Informaci¨®n Exterior (UCIE), que cuenta con 74 funcionarios, seg¨²n datos de la propia Comisar¨ªa General de Informaci¨®n.

En principio se crear¨ªa una nueva brigada para combatir el terrorismo islamista, lo que inicialmente duplicar¨ªa los efectivos actualmente en activo. Adem¨¢s, se crear¨ªa un servicio dentro de la Unidad Central de Inteligencia (UCI, el gran centro de tratamiento y an¨¢lisis de informaci¨®n) exclusivamente dedicado al terrorismo de corte islamista.