Alonso alcanza un principio de acuerdo con las educadoras de las escuelas infantiles

El alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, y las educadoras de las escuelas infantiles municipales lograron ayer un principio de acuerdo en el conflicto que les enfrenta desde el pasado julio. Alonso firm¨® ese mes un decreto reorganizando el servicio, lo que implicaba el despido de 127 educadoras que trabajaban como interinas. Adem¨¢s, quedaban fuera de la bolsa abierta para completar la nueva plantilla, ya que la titulaci¨®n exigida para los nuevos empleos es de T¨¦cnicos de Jard¨ªn de Infancia, inferior a la que ellas poseen, que es la maestras y tituladas superiores.

Alonso accedi¨® ayer a abrir la bolsa de trabajo a las profesionales diplomadas en Magisterio o titulaciones superiores, lo que dar¨¢ cabida a todas las interinas despedidas. Mientras, las educadoras aceptaron entrar en la bolsa con una categor¨ªa inferior a la actual, es decir como tituladas medias, pero cobrando lo mismo que hasta ahora. El detonante del conflicto radic¨® precisamente en el recurso que ganaron tres educadoras recientemente, que obliga al Ayuntamiento a pagarles los atrasos ya que la sentencia entiende que ten¨ªan una categor¨ªa salarial inferior a la que le corresponde por sus funciones. La generalizaci¨®n de la sentencia al resto de trabajadoras hubiese implicado un incremento anual de tres millones de euros en el costo de las escuelas para mantener el mismo sistema.

Lo ¨²nico que ahora queda pendiente de resolver es el calendario laboral. El Ayuntamiento quiere aumentar el n¨²mero de horas e incluso intentar abrir las escuelas 11 meses al a?o. La negociaci¨®n comenzar¨¢ la pr¨®xima semana, aunque esta vez ser¨¢n los sindicatos los que se sienten en la mesa frente a los representantes del consistorio.

Zuri?e Sanz, una de las educadoras que se reuni¨® ayer con Alonso defini¨® la reuni¨®n como "agridulce" porque, seg¨²n dijo, el Ayuntamiento abrir¨¢ la bolsa de trabajo, pero "por necesidad, ante la presi¨®n a la que ha sido sometido". Seg¨²n Sanz, las educadoras no est¨¢n dispuestas a modificar las condiciones laborales adquiridas, ni el calendario, ni el salario y s¨®lo ceder¨¢n en la categor¨ªa del puesto de trabajo.