"Espero que no vuelva a pasar"

N¨¢quera mostraba ayer una actividad que descontextualizada podr¨ªa interpretarse casi como normalidad. El pueblo segu¨ªa pendiente de las tareas de extinci¨®n del incendio declarado en la Sierra Calderona en la tarde-noche del jueves y que ayer se dio por controlado. A media ma?ana, un bando anunciaba la suspensi¨®n de los actos festivos previstos para este fin de semana y los comentarios de los vecinos reflejaban desde alivio hasta impotencia, enfado o tristeza. Tambi¨¦n hacia mediod¨ªa, por el pueblo discurri¨® el entierro de un hombre aquejado de demencia senil que falleci¨® el viernes por causas ajenas al incendio.

"Habr¨ªa podido ser peor pero tambi¨¦n se pod¨ªa haber evitado", explicaba una vecina del pueblo que prefer¨ªa mantener su nombre en el anonimato. Esta vecina, que hab¨ªa vuelto a pasar la noche en vela es tambi¨¦n propietaria de 20 hanegadas de terreno de olivos, algarrobos y almendros que han desaparecido con el incendio y que no ten¨ªa coraz¨®n para ir a ver. Habla de miedo y enfado en el pueblo.

Una vecina comenta que pod¨ªa haber sido peor pero que tambi¨¦n se pod¨ªa haber evitado

Las labores de extinci¨®n, estos d¨ªas, han ido acompa?adas de cr¨ªticas vecinales. Jos¨¦ Ram¨®n y Concha, que viven en una urbanizaci¨®n de N¨¢quera desde hace siete a?os se mostraban ayer un poco aliviados pero tambi¨¦n cr¨ªticos. "Vamos detr¨¢s de los problemas", comentaba Jos¨¦ Ram¨®n para despu¨¦s criticar que por la monta?a pr¨®xima a su vivienda "no se puede caminar" debido a la maleza. "Lo que se quema es la maleza, no los pinos".

Jos¨¦ Ram¨®n no est¨¢ de acuerdo con la hora oficial del inicio del incendio y dice que empez¨® antes. A las 21.43 horas del jueves un particular avis¨® del incendio al tiempo que ocurr¨ªa otro tanto desde el pico de vigilancia Alto del Pino, seg¨²n la cronolog¨ªa oficial.

Otra vecina, Amparo Navarro, acompa?ada de Mari Carmen Aral, hermana del alcalde de la localidad, respiraba "un poco m¨¢s tranquila". Destacaba que "la gente [profesionales y voluntarios] se ha volcado mucho" en la extinci¨®n. Era la primera vez que ha visto las llamas tan cerca de N¨¢quera: "Y espero que no vuelva a pasar".

El incendio dej¨® tras de s¨ª la sensaci¨®n de tristeza e impotencia. Tambi¨¦n mucho enfado, en opini¨®n de Natalia Ib¨¢?ez, otra vecina. "Lo ¨²nico que pod¨ªamos hacer era sentarse a ver c¨®mo se quemaba el monte", argumenta. Natalia cree que N¨¢quera deber¨ªa tener un plan de emergencias, por ejemplo, para evacuar a la gente, y m¨¢s organizaci¨®n en momentos como el vivido. Sobre la autor¨ªa, prefiere pensar que ha sido un pir¨®mano. "No creo que nadie sea capaz de hacerlo por la pasta que se pueda llevar" por intereses urban¨ªsticos, a?ad¨ªa.