Nuevo esc¨¢ndalo de los jueces

Los jueces de la gimnasia, tocados ya por el esc¨¢ndalo Paul Hamm, se vinieron abajo indignamente en la noche del lunes. Rusia protest¨® ayer ante la federaci¨®n internacional (FIG) por la baja nota dada a su gimnasta Alexei Nemov, campe¨®n de la barra fija en Sidney 2000 y ahora quinto. De modo ins¨®lito, se mejor¨® de inmediato a causa de la bronca del p¨²blico, que dur¨® diez minutos. Nunca hab¨ªa pasado algo parecido. Rusia tambi¨¦n se quejar¨¢ al COI por el mal nivel de quienes juzgan. Buena nota tendr¨¢ que tomarse porque los trapicheos con los puntos suponen un desprestigio absoluto. Si los Juegos de invierno de Salt Lake City 2002 fueron la inflexi¨®n del patinaje art¨ªstico con el perjuicio de una pareja canadiense en beneficio de otra rusa, con la mafia de la compra de d¨¦cimas incluida, los de verano de Atenas tendr¨¢n que significar un antes y un despu¨¦s en una de las citas b¨¢sicas.

Fue bochornoso en un deporte tan educado y est¨¦tico comprobar c¨®mo diez minutos de pitos y chillidos ensordecedores consiguieron elevar la baja nota dada en la barra fija a Nemov. El jefe de los jueces, el rumano Adrian Stoica, fue a ver al italiano Bruno Grande, presidente de la FIG, y en una pirueta in¨¦dita se pas¨® de 9,712 a 9,762. A Nemov no le sirvi¨® m¨¢s que para pasar del s¨¦ptimo al quinto puesto y los silbidos continuaron. Llov¨ªa sobre muy mojado.

El p¨²blico local estaba predispuesto a montar el esc¨¢ndalo por la eliminaci¨®n el primer d¨ªa de su gran especialista, Vlasios Maras, por cuya nota tambi¨¦n protest¨® Grecia sin que le hicieran caso. Por eso, en cuanto tuvo ocasi¨®n, salt¨®. Acababa de ser bien puntuado el estadounidense Morgan Hamm, 9,787, y tras Nemov iba su hermano gemelo, Paul, el pol¨¦mico ganador del concurso individual. La guerra fr¨ªa Rusia-Estados Unidos pareci¨® renacer. Despu¨¦s del turbio asunto de la nota err¨®nea dada al surcoreano Yang, que favoreci¨® a Paul, y de las excesivas puntuaciones a favor de los norteamericanos, la gente explot¨®. Incluso el propio Nemov tuvo que salir a la tarima, en la que Paul no pod¨ªa empezar su ejercicio ante los abucheos, para pedir a la gente que se calmara. Un gesto que le honra.

Paul fue puntuado muy alto y volvieron los pitos. Como Nemov, tampoco clav¨® la salida. Todo se calm¨® cuando el italiano Cassani le quit¨® el oro al superarle en el desempate por las notas dadas por el jurado B y el japon¨¦s Yoneda arrebat¨® tambi¨¦n el bronce a su hermano Morgan.