Fin del bienestar a¨¦reo
Fascinada me encuentro por la haza?a de Hicham el Guerruj en los Juegos Ol¨ªmpicos. L¨¢stima que ahora den medallas, aunque sean de metales nobles. En la Grecia antigua, a los atletas que venc¨ªan se les premiaba con una corona de laurel y, supremo af¨¢n de mestizaje, pod¨ªan elegir una adinerada esposa entre la ¨¦lite econ¨®mica del pa¨ªs. Si a¨²n estuvi¨¦ramos en aquellos tiempos, El Guerruj habr¨ªa podido casarse con Athina Onassis, libr¨¢ndola as¨ª del sino fatal de su familia, un verdadero cl¨¢sico del Mal Fario.
Al fin y al cabo, esa otra especialidad ol¨ªmpica, el Medallismo, no lo es todo. Ni comparaci¨®n con el Verdadero Amor Interesado. Adem¨¢s, un deportista no siempre da lo mejor de S¨ª Mismo en unos JJ OO. Tomen, por ejemplo, el caso de Mark Thatcher, el hijo de la que fue madre superiora de hierro de Gran Breta?a en los ochenta y, concretamente, madrastra de Argentina en el 82.
Si British Airways est¨¢ en crisis y amenaza con No Poder Volar (cuando ¨¦se deber¨ªa constituir todo su inter¨¦s), ha llegado el momento de gritar ?'Heavens', esto es el fin!
Mark no ha necesitado acudir a un evento mundial como el que se est¨¢ celebrando en Atenas para batir el r¨¦cord de hijos de su madre, pasando de perderse durante el Par¨ªs-Dakar (en el mismo a?o que Margaret asolaba las Malvinas) a encontrarse hoy en el centro de una conspiraci¨®n contra Obiang en Guinea Ecuatorial. Ha seguido un poco la carrera de nuestro Joselito, el tout petit rosignol que pas¨® de cantar en las cumbres de Cifesa a tener amistades peligrosas en el ?frica negra: para que luego digan que el cine espa?ol no ha sido siempre internacional.
Hay gente que rompe una lanza en defensa de Mark Thatcher, precisamente por haber tenido una madre que us¨® el plural mayest¨¢tico cuando su hijo le dio un nieto (declar¨® en p¨²blico: "Hemos sido abuela"), y un padre que ya hab¨ªa dado muestras de sus ansias de escapismo durante el nacimiento del propio Mark. Se pas¨® el parto contemplando el campeonato de cr¨ªquet. "Podr¨ªamos haber salido peor", parece ser que ha comentado recientemente Thatcher hijo, no en plan mayest¨¢tico, sino refiri¨¦ndose a ¨¦l y a su hermana.
Gran Breta?a, definitivamente, sali¨® mucho peor parada de la experiencia. Observen, como prueba del algod¨®n, la penosa situaci¨®n en que se halla British Airways. Maldita sea, ?por qu¨¦ a los aviones les ocurren muchas cosas siempre que faltan pocos d¨ªas para que yo me suba a uno tras otro? ?Por qu¨¦ el presidente de los controladores espa?oles declara ahora que, cuando ¨¦l vuela, lo hace temblando, por lo que sabe? ?Por qu¨¦ caen los Tupolev justo en el actual ¨ªnterin? En resumen, ?por qu¨¦ se colapsan los aeropuertos de La Habana y de Heathrow? ?Por qu¨¦ se anuncia que a Air Italia le quedan due telegiornali?
No es s¨®lo que las peque?as compa?¨ªas manden sus aviones a revisar a pa¨ªses de quinta fila en donde las exigencias del reglamento son mucho menos severas (como Guant¨¢namos do todo est¨¢ permitido, luego Dios no existe). Es que, si British Airways, que nunca fue una cantinera retozona y manirrota con sus viajeros (hasta el punto de que, despu¨¦s de instalarte en la clase turista, cre¨ªas que ya hab¨ªas empezado a trabajar como au pair para los Bernstein de Camden Town y su nevera cerrada con candado), est¨¢ en crisis econ¨®mica y ha reducido personal y amenaza con No Poder Volar (cuando, l¨®gicamente, ¨¦se deber¨ªa constituir todo su inter¨¦s), ha llegado el momento de gritar ?Heavens, esto es el fin!
El fin del fin del fin del Imperio del Bienestar en el Aire.
Por consiguiente, habr¨¢ que exigir Medallas para Todos; para los viajeros, quiero decir. Por mi parte, me conformar¨ªa con poder colgar hoy mismo la del M¨¦rito Marino del pecho de don Jos¨¦ Antonio Echebarr¨ªa Calzada, capit¨¢n del atunero Ortube Berria y candidato, en lo que a m¨ª respecta, al Premio Humanidades en Desuso. Dicho vasco ejemplar, o ejemplar de vasco, rescat¨® a 36 inmigrantes que se encontraban en alta mar, luchando contra las olas y el Destino. Si yo fuera Athina Onassis le perseguir¨ªa hasta el horizonte, disfrazada de Atuna.
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