Ir¨¢n abre las puertas a la m¨²sica de Queen

Ondas de rock en el aire iran¨ª. Son las que, por fin, las radios de Teher¨¢n est¨¢n autorizadas a emitir, despu¨¦s de que el organismo de censura isl¨¢mico aprobara la comercializaci¨®n de un disco del grupo ingl¨¦s Queen. Son once canciones -seleccionadas entre el amplio repertorio de la banda de Freddie Mercury evitando rigurosamente temas de amor- que implantan la bandera del rock en un territorio hasta ahora prohibido. S¨®lo 11 canciones, una hora de m¨²sica. Pero, a pesar de todo, una apertura sorprendente, una peque?a revoluci¨®n.

La decisi¨®n sorprende porque, hace s¨®lo una semana, el Parlamento, de mayor¨ªa conservadora, rechaz¨® un proyecto de ley, presentado por el Gobierno reformista, que compromet¨ªa al Estado iran¨ª a defender los derechos de las mujeres y a promover la igualdad entre ambos sexos. Este rechazo es toda una se?al: en Ir¨¢n el oscurantismo no se supera. Incluso las 13 mujeres diputadas votaron en contra. La noticia sorprende a¨²n m¨¢s cuando se considera que Freddie Mercury, el cantante l¨ªder de los Queen, era declaradamente homosexual, mientras que la homosexualidad sigue siendo un crimen en Ir¨¢n.

Lo ¨²nico que no sorprende es el ¨¦xito de ventas del ¨¢lbum en los primeros d¨ªas de comercializaci¨®n. Los Queen son ya muy populares en Ir¨¢n: ninguna censura puede impedir totalmente la circulaci¨®n de las ideas, y el mercado alternativo es muy activo en un pa¨ªs en el que el 70% de la poblaci¨®n tiene menos de 30 a?os. La novedad es que nadie podr¨¢ ser acusado por escuchar o cantar I want to break free en una sociedad en la que, hasta ahora, el rock era considerado una forma de depravaci¨®n.

La antolog¨ªa se vende, en formato de casete, a un precio de 6.500 reales (menos de un euro) y contiene, adem¨¢s de I want to break free, ¨¦xitos como Bohemian rhapsody y The miracle. Las cintas incluyen tambi¨¦n las letras completas, con su traducci¨®n al parsi y un folleto explicativo.

La aparente incongruencia que existe entre dos medidas tan opuestas -la que niega el reconocimiento a las mujeres de sus derechos naturales, y la que, por otro lado, legaliza la m¨²sica rock- se explica, quiz¨¢, a trav¨¦s de la dial¨¦ctica que anima la vida p¨²blica iran¨ª: la lucha entre el Gobierno reformista -apoyado sobre todo por los j¨®venes- y los conservadores, que controlan el Parlamento, y que son respaldados por el Consejo de los Guardianes, el ¨®rgano encargado de velar por la adecuaci¨®n de las leyes a la Constituci¨®n y a la ley isl¨¢mica.-