Los directivos de Volkswagen, dispuestos a congelarse el salario

El grupo automovil¨ªstico alem¨¢n Volkswagen est¨¢ dispuesto a emular a su competidor DaimlerChrysler y congelar los sueldos de sus ejecutivos a cambio de los dr¨¢sticos recortes en los costes labores que exige de su plantilla. Portavoces de la empresa confirmaron ayer informaciones del diario Bild en el sentido de que la direcci¨®n acceder¨ªa a no aumentar durante dos a?os sus propias retribuciones.

El anuncio suscit¨® reacciones encontradas entre los trabajadores. La promesa de reducir en un 10% los sueldos de los ejecutivos recientemente ayud¨® a DaimlerChrysler a pactar con sus empleados recortes de costes por 500 millones de euros. Las negociaciones de Volkswagen sobre un nuevo convenio para sus 103.000 empleados en Alemania a¨²n se encuentran en los proleg¨®menos -el inicio formal de las conversaciones apenas est¨¢ previsto para mediados de septiembre-, pero desde ya es evidente que el pulso ser¨¢ similar al de otras compa?¨ªas. La semana pasada, el director de Recursos Humanos del fabricante, Peter Hartz, exigi¨® congelaci¨®n de sueldos a sus empleados como condici¨®n para mantener la plantilla.

Sobre la mesa de negociaciones est¨¢n una fuerte reducci¨®n de los costes laborales a cambio de un ajuste de cintur¨®n entre los mismos ejecutivos y, sobre todo, de garant¨ªas de que los puestos de trabajo se mantendr¨¢n en Alemania. El lunes, Volkswagen hab¨ªa comunicado oficialmente que pretende congelar durante dos a?os los sueldos de sus empleados y reducir tambi¨¦n en muchos otros aspectos las garant¨ªas econ¨®micas y laborales del convenio.

"De ninguna manera aceptaremos una congelaci¨®n salarial, ni siquiera si los ejecutivos participan en ella", respondi¨® ayer el negociador jefe de los trabajadores, Hartmut Meine. El presidente del comit¨¦ de empresa, Klaus Volkert, sin embargo, se mostr¨® m¨¢s conciliador: "Quien de los colegas cobijados por el convenio pide una congelaci¨®n salarial, desde luego, no se puede excluir ¨¦l mismo de ella", dijo, en declaraciones a la agencia de noticias Reuters.

Rechazo sindical

Ya en d¨ªas pasados hab¨ªan quedado en evidencia fisuras entre el comit¨¦ de empresa, tradicionalmente conciliador y muy consciente de la crisis econ¨®mica por la que atraviesa la automovil¨ªstica, y la direcci¨®n nacional del sindicato IG Metall, temerosa a que se abran las compuertas para un generalizado recorte de los ingresos y las prestaciones en la industria alemana.

Entre tanto, han comenzado a trascender detalles de las negociaciones iniciadas en Opel Alemania, filial de General Motors de Estados Unidos. Seg¨²n public¨® tambi¨¦n el diario Bild, la empresa ha propuesto a sus trabajadores ampliar la semana laboral hasta las 40 horas, y tan s¨®lo pagar 35 de ellas. En la sede central de Opel, en R¨¹sselsheim, en la actualidad s¨®lo se trabajan 30 horas. Ello, sin embargo, no se debe a prebendas logradas por los trabajadores, sino al sencillo hecho de que no hay suficiente demanda para los coches que all¨ª se producen.

Otras propuestas que la direcci¨®n ha llevado a la mesa de negociaciones son la supresi¨®n de diversos suplementos salariales y la aceleraci¨®n del ritmo de la producci¨®n. El comit¨¦ de empresa, en principio, est¨¢ dispuesto a conceder algunos recortes, pero ha pedido a cambio garant¨ªas de que se mantengan hasta 2010 los en total 32.000 puestos de trabajo en Alemania.