La contaminaci¨®n mata poco a poco
Un estudio demuestra que los contaminantes habituales causan miles de muertes al a?o en Europa
La reducci¨®n de los contaminantes m¨¢s comunes en el aire de las principales ciudades europeas evitar¨ªa la muerte prematura de miles de personas cada a?o. Un nuevo estudio de la red de expertos Apheis (Sistema de Informaci¨®n Europeo de Contaminaci¨®n del Aire y Salud) que ser¨¢ presentado ma?ana trata de cuantificar los beneficios a largo plazo sobre la salud de las pol¨ªticas contra la contaminaci¨®n en 26 ciudades europeas, cinco de ellas espa?olas. Apheis es una red de profesionales sanitarios y expertos en calidad del aire de 12 pa¨ªses que comparten datos sanitarios y de contaminaci¨®n para elaborar estudios epidemiol¨®gicos.
"La contaminaci¨®n aumenta un 0,6% la mortalidad a corto plazo", explica Bel¨¦n Zorrilla, del Servicio de Epidemiolog¨ªa de la Consejer¨ªa de Sanidad de la Comunidad de Madrid, participante en el estudio. Ese riesgo no es nada "comparado con el tabaco, que aumenta cuatro veces el riesgo de c¨¢ncer". Sin embargo, "como afecta a toda la poblaci¨®n, la incidencia sobre la mortalidad es muy importante", explica Zorrilla. "Lo suficiente como para aconsejar seguir avanzando en pol¨ªticas de reducci¨®n de la contaminaci¨®n".
El riesgo es leve, pero su incidencia sobre la mortalidad es muy importante
En verano, los niveles de ozono desaconsejan hacer deporte por la sierra de Madrid
En Madrid, por ejemplo, con datos del a?o 2000, el nuevo estudio refleja que la reducci¨®n del nivel de part¨ªculas gruesas en suspensi¨®n (llamadas PM10) a 20 microgramos por metro c¨²bico (la media es 37) evitar¨ªa 260 muertes al a?o y m¨¢s de 500 hospitalizaciones. Un menor nivel de part¨ªculas finas en el aire (llamadas PM2,5) reducir¨ªa la mortalidad en la capital en 562 personas al a?o.
En Bilbao, otra de las ciudades participantes en el estudio, los datos concluyen que respetar los l¨ªmites de PM2,5 (uno solo de los contaminantes habituales) aumentar¨ªa la esperanza de vida en 0,91 a?os, ahorrados de enfermedades cardiacas y pulmonares y c¨¢ncer de pulm¨®n. El informe de Apheis contienen datos similares de Barcelona, Valencia y Sevilla.
Para lograr estos datos se comparan los ingresos hospitalarios diarios y la mortalidad con los niveles de contaminaci¨®n diarios. De esta forma se puede establecer una relaci¨®n causal entre ambos. La influencia de la contaminaci¨®n en la salud humana es muy leve comparada con la de otros factores de riesgo como la obesidad o el tabaco. Sin embargo, "No puedes elegir no respirar", como apunta Bel¨¦n Zorrilla. Esta experta que "se vive en ciudades m¨¢s sanas que antes", y pone como ejemplo la importante reducci¨®n de la contaminaci¨®n en Madrid en los a?os noventa gracias a la sustituci¨®n de las calderas de carb¨®n y la generalizaci¨®n de los trenes de cercan¨ªas. "Los niveles actuales de contaminaci¨®n nunca van a provocar grandes crisis sanitarias", pero "tenemos much¨ªsimo campo a¨²n para mejorar", a?ade.
"Entre un 25% y un 30% de las enfermedades se puede atribuir al medio ambiente", afirma el subdirector general de Sanidad Ambiental del Ministerio de Sanidad, Francisco Vargas. Sin embargo, la relaci¨®n no es directa. Estas enfermedades las produce "un c¨®ctel en el que es muy dif¨ªcil medir las consecuencias de cada factor".
"Normalmente cuando se habla de medio ambiente se piensa en la naturaleza, y falta conciencia de los efectos de la contaminaci¨®n sobre uno mismo", apunta Vargas. "No se percibe como un problema grave de salud p¨²blica" pero, por ejemplo, es un hecho que "cuando aumenta el ozono aumentan las hospitalizaciones".
La falta de conciencia ciudadana sobre el problema tambi¨¦n juega en contra de la protecci¨®n de la salud. El sistema de informaci¨®n a la poblaci¨®n es complejo y a posteriori. Por ejemplo, salir a correr por la sierra de Madrid en verano puede ser considerado un deporte de riesgo. Si alguien quiso respirar aire puro en las horas centrales del d¨ªa durante el mes de julio en la zona de Guadarrama, sus pulmones recibieron una dosis de ozono por encima de lo normal.
El ozono troposf¨¦rico es un gas oxidante que produce una irritaci¨®n de los alveolos pulmonares y el agravamiento de alergias, asma y enfermedades respiratorias. Es uno de los contaminantes m¨¢s comunes junto con las part¨ªculas en suspensi¨®n, el di¨®xido de azufre o el mon¨®xido de carbono. No se puede elegir no respirarlos.
Ecologistas en Acci¨®n ha denunciado esta semana que el nivel en el que la Administraci¨®n est¨¢ obligada a avisar a la poblaci¨®n (120 microgramos por metro c¨²bico) se super¨® 123 veces en Madrid este verano. "O se interesa alguien, o esa informaci¨®n no llega a la poblaci¨®n", dice Juan Garc¨ªa Vicente, experto de esta organizaci¨®n. "Aunque t¨² no lo notes, te est¨¢ da?ando y debes saberlo".
En Madrid, cuando en un punto de medici¨®n se supera cualquiera de estos niveles, la Consejer¨ªa de Medio Ambiente informa por fax al ayuntamiento afectado. ?ste debe a su vez informar a la poblaci¨®n y poner en marcha medidas preventivas como dar cuenta a los hospitales de que pueden aumentar los ingresos por asma.
El exceso de ozono se origina por contaminantes del transporte en las ciudades, pero se traslada a los alrededores, que es donde la sufren. Sirva de ejemplo el caso de Guadarrama (19 superaciones del l¨ªmite), donde Macarena Zuazo, concejala de Medio Ambiente, sale constantemente en la prensa de la zona para explicar la calidad del aire. "Hacemos todo tipo de campa?as", dice Zuazo. "Yo incluso mando a la gente a casa cuando me los encuentro por la calle a mediod¨ªa en verano".
Sin embargo, cualquier medida de informaci¨®n a la poblaci¨®n es siempre a posteriori, despu¨¦s de haberse medido el exceso de contaminaci¨®n, por lo que la exposici¨®n ya no tiene remedio. Los expertos no se ponen de acuerdo sobre si puede hacerse una predicci¨®n de ozono fiable que pudiera ser comunicada como la meteorol¨®gica.
La conclusi¨®n de Francisco Vargas es que "el ciudadano deber¨ªa estar m¨¢s concienciado" de este problema. "Pide hospitales, pero a lo mejor deber¨ªa pedir medios alternativos de transporte". La sanidad est¨¢ orientada a la asistencia, pero "en medio ambiente lo ¨²nico que vale es la prevenci¨®n".
Un plan nacional en Francia
A finales de junio pasado, el primer ministro franc¨¦s, Jean Pierre Raffarin, present¨® un Plan Nacional de Salud y Medio Ambiente. Con ¨¦l se propone mejorar la calidad del aire y el agua para reducir las muertes prematuras debidas a la contaminaci¨®n, 30.000 al a?o seg¨²n datos de la OMS citados por el Gobierno franc¨¦s. El coste sanitario se calcula en 670 euros al a?o por persona. En Espa?a no se ha planteado nada parecido a un plan nacional. "No es f¨¢cil en un pa¨ªs tan descentralizado", apunta desde el Ministerio de Sanidad Francisco Vargas, subdirector general de Sanidad Ambiental y Salud Laboral.
Mientras que los objetivos de reducci¨®n de la contaminaci¨®n a largo plazo son elaborados por el Gobierno, con base en la legislaci¨®n europea, el conocimiento de la situaci¨®n del aire y el agua est¨¢ en manos de la administraci¨®n auton¨®mica y municipal, que recoge y gestiona los datos de contaminaci¨®n. La calidad del aire de nuestro pa¨ªs la mide cada comunidad aut¨®noma, y hasta los contaminantes m¨¢s habituales son distintos seg¨²n la regi¨®n.
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