Los sonidos indios, ¨¢rabes y flamencos, juntos por primera vez en un escenario

Bachu Khan tiene 27 a?os y es de Rajasthan (India). Como el resto de su familia, desde hace generaciones, es m¨²sico. Bachu se gana la vida interpretando el folclore del Rajasthan, cantando y tocando las kartals (una especie de casta?uelas) en la Orquesta Maharah¨¢, una prestigiosa formaci¨®n que realiza numerosas giras por el extranjero. La primera vez que oy¨® flamenco, hace de esto tres a?os en un festival de m¨²sicas del mundo que se celebr¨® en B¨¦lgica, Bachu no daba cr¨¦dito a sus t¨ªmpanos.

"Cre¨ª que eran extranjeros que estaban interpretando la m¨²sica de nuestro folclore del Rajasthan, pero en su idioma. Me puse muy contento. Saqu¨¦ las kartals y empec¨¦ a tocar y a bailar con ellos", confiesa Bachu Khan, quien participa en una de las apuestas musicalmente m¨¢s arriesgadas de la XIII Bienal de Flamenco de Sevilla: Tierra de nadie. El encuentro que, con gesto divertido, recuerda Bachu se produjo con la compa?¨ªa del bailaor jerezano Antonio El Pipa, con quien despu¨¦s comparti¨® 24 d¨ªas de gira. "Nos hicimos amigos. Al principio estaba muy sorprendido, porque nunca hab¨ªa o¨ªdo hablar del flamenco", asegura Bachur.

Tierra de nadie, que se estrena esta noche en el escenario al aire libre de Hotel Triana, re¨²ne por primera vez los sonidos de tres culturas distintas que buscan una ra¨ªz com¨²n. La Orquesta Maharah¨¢ pondr¨¢ los sonidos primitivos de los gitanos del Rajasthan, el folclore ¨¢rabe llegar¨¢ con la Orquesta Chekara de Marruecos y el flamenco podr¨¢ o¨ªrse con el cante de Segundo Falc¨®n y las guitarras de Paco Jarana y Salvador Guti¨¦rrez.

"Tierra de nadie no es fusi¨®n, sino di¨¢logo. Es la primera vez que se produce un encuentro de estas tres m¨²sicas que tienen tantas similitudes y comparten buena parte de sus ra¨ªces", explic¨® ayer el cantaor Segundo Falc¨®n, de quien parti¨® la idea de este espect¨¢culo que re¨²ne a 18 artistas: cinco marroqu¨ªes, cuatro indios y nueve flamencos.

Los encuentros de la m¨²sica ¨¢rabe y el flamenco, como los que han protagonizado el Lebrijano o Lole Montoya, se vienen produciendo desde hace a?os, incluso los de la m¨²sica india y el flamenco; pero nunca antes se hab¨ªan dado cita las tres culturas.Husain Khan tan s¨®lo tiene 13 a?os, pero lleva desde los seis cantando y conoce bien su oficio. Hace un a?o que forma parte de la Orquesta Maharah¨¢ que ha viajado a Sevilla con s¨®lo cuatro de sus miembros. El ni?o, que aseguran tiene una voz tan portentosa como hermosa, no se plantea otro futuro. En su pa¨ªs las castas de los Langa y los Manganyar, a las que pertenecen los miembros de la Orquesta Maharah¨¢, se han dedicado siempre a la m¨²sica.

"Me gusta mucho Poveda, quiero aprender a cantar como ¨¦l. Creo que podr¨ªa", dice Husain, aunque antes tendr¨¢ que aprender algo de castellano. El joven, quien tambi¨¦n se declara admirador de Estrella Morente, tiene claro que cantar es lo que har¨¢ durante toda su vida.

"Partimos de las mismas bases r¨ªtmicas porque el cante no es de nadie, es del pueblo y del mundo. Cuando oigo a la Orquesta Chekara, si cambiase la letra parecer¨ªa que estoy oyendo a un gitano de Lebrija entonar una romanza del maestro Antonio Mairena", comenta Segundo Falc¨®n. "Con la m¨²sica india es como si escuchara una buler¨ªa o unos tangos de M¨¢laga del Piyayo. Es incre¨ªble", a?ade Falc¨®n.