El Foro Urbano pide en Barcelona que los pa¨ªses ricos cumplan sus promesas

"Estados Unidos, mi pa¨ªs, es el que menos dinero dedica a la ayuda al desarrollo, s¨®lo el 0,1%, y en cambio tendr¨ªa que invertir 60.000 millones de d¨®lares m¨¢s al a?o en este concepto", a?adi¨® Sachs. "Es una cantidad que puede encontrarse; es lo que nos estamos gastando ahora en Irak". Sachs, director del Centro para el Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard y consejero especial del secretario general de la ONU, Kofi Annan, fue el primero en arrancar los aplausos espont¨¢neos de los congresistas que ayer asistieron a la apertura oficial de este segundo foro mundial sobre el fen¨®meno urbano, que centrar¨¢ sus debates hasta el pr¨®ximo viernes en la mezcla de culturas y en los problemas que plantea la globalizaci¨®n.

Fueron 16 ponentes los que tomaron la palabra y casi todos ellos insistieron en que los Objetivos del Milenio de la ONU para reducir la pobreza, ratificados en 2000 por 140 pa¨ªses, podr¨ªan estar lejos de cumplirse. Hay algunos avances, pero aumenta el n¨²mero de personas que se hacinan en los suburbios de todas las ciudades sin las m¨ªnimas condiciones de saneamiento y habitabilidad. Uno de los problemas es la falta de voluntad pol¨ªtica de muchos gobiernos, especialmente los m¨¢s ricos. "Hay que mirar a los ojos a los gobernantes y decirles que basta ya de compromisos incumplidos", afirm¨® contundente el ex presidente de la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica Mija¨ªl Gorbachov, que en su tercera visita al F¨®rum de Barcelona reiter¨® de nuevo su demanda de una "glasnost total" y de un mayor control de la sociedad sobre los gobiernos, algo que indic¨® deber¨ªan ejercer de forma m¨¢s firme los medios de comunicaci¨®n.

Tambi¨¦n en esta l¨ªnea, el ex presidente de Finlandia, Martti Ahtisaari, record¨® que "la buena voluntad no basta" y reclam¨® una respuesta internacional "masiva, tangible y concreta" para hacer frente a los retos de este nuevo mundo globalizado y urbano. Para el ministro de las Ciudades de Brasil, Olivio Dutra, el problema de las desigualdes y del crecimiento de la "urbanizaci¨®n de la pobreza" empeor¨® en los noventa y se impone un cambio de pol¨ªticas y estrategias porque lo que ahora tenemos no funciona. En este sentido, el alcalde de Barcelona, Joan Clos, reclam¨® un tratado internacional que otorgue mayor responsabilidad en la gesti¨®n de medidas y recursos a las administraciones locales, una propuesta que se recoger¨¢ en las conclusiones. La ministra de la Vivienda, Mar¨ªa Antonia Trujillo, afirm¨® que el Gobierno espa?ol "ha rescatado del olvido" las iniciativas relacionadas con los objetivos de UN-Habitat y asegur¨® que se pondr¨¢n en marcha medidas para facilitar a todos los ciudadanos una vivienda digna.

La inauguraci¨®n tuvo su momento m¨¢s emotivo con la entrega de la medalla de UN-Habitat al primer ministro del L¨ªbano, Rafic Hariri, por su papel en la reconstrucci¨®n del pa¨ªs tras la guerra. Hariri, que pidi¨® paz para Oriente Pr¨®ximo y para Irak, recibi¨® el galard¨®n de manos de Anna Tibaijuka, directora ejecutiva de UN-Habitat, que reclam¨® acuerdos de m¨ªnimos entre las distintas culturas que deben convivir en este nuevo mundo urbano a partir de las necesidades m¨ªnimas humanas. "La cultura de la paz es la de la prosperidad", concluy¨®.