"El alumno no llega peor formado"
"La mayor¨ªa de los gobiernos piensa que la incorporaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas en el aula se resuelve dotando a cada dos alumnos con un ordenador. En realidad, el problema empieza ah¨ª, porque la informaci¨®n multimedia genera nuevos problemas de comprensi¨®n en los alumnos". Planteamientos como ¨¦ste se expusieron en el congreso sobre la Comprensi¨®n de textos y gr¨¢ficos: cuestiones b¨¢sicas y aplicadas, celebrado recientemente en la Universitat de Val¨¨ncia. Al congreso cient¨ªfico, organizado por el grupo de investigaci¨®n Aprendizaje y Comprensi¨®n de Textos de esta instituci¨®n acad¨¦mica, que dirige el catedr¨¢tico y director del departamento de Psicolog¨ªa Evolutiva y de la Educaci¨®n Eduardo Vidal-Abarca, cont¨® con la colaboraci¨®n The European Association for Research on Learning and Instruction (EARLI), actualmente la asociaci¨®n europea m¨¢s importante en el ¨¢mbito de la educaci¨®n y pedagog¨ªa.
Un experimento puso de relieve que tomar notas perjudica la comprensi¨®n de los alumnos
El catedr¨¢tico valenciano, junto con el holand¨¦s Herre van Oostendorp, dirige el ¨¢rea de Comprensi¨®n de Textos y Gr¨¢ficos de la EARLI. Un millar de cient¨ªficos y estudiosos de cuarenta pa¨ªses integran la asociaci¨®n, estructurada en diecisiete ¨¢reas investigadoras.
En un momento como el actual en que se alerta del bajo nivel de compresi¨®n de los estudiantes de secundaria y se cuestiona su formaci¨®n especialmente cuando ingresan a la universidad, alrededor de un centenar de expertos internacionales debatieron sobre c¨®mo inciden las nuevas tecnolog¨ªas en el aprendizaje de las nuevas generaciones.
En opini¨®n de Vidal-Abarca, las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n obligan a redefinir el concepto de alfabetismo de las sociedades actuales: "Hace 20 a?os dec¨ªamos que alguien estaba alfabetizado cuando sab¨ªa leer y escribir. Hoy las mismas leyes de educaci¨®n y las directrices de los gobiernos van mucho m¨¢s all¨¢. Se trata de buscar informaci¨®n, entenderla, comprenderla y saberla integrar". En definitiva, han cambiado los objetivos; ahora se trata de aprender a aprender, como se viene insistiendo desde las ¨²ltimas d¨¦cadas del siglo pasado en foros nacionales e internacionales: "Ya no basta con saberse la famosa lista de los reyes Godos, sino que lo importante es que el estudiante los identifique, sepa por qu¨¦ se produjo la invasi¨®n visigoda y sea capaz de explicar este fen¨®meno hist¨®rico compar¨¢ndolo con otros actuales".
El catedr¨¢tico valenciano, que trabaj¨® como maestro durante 13 a?os en diversas escuelas p¨²blicas antes de entrar a la universidad, considera que el ascenso del nivel de exigencia de los estudiantes alimenta el t¨®pico de la peor formaci¨®n de los mismos cuando se incorporan a la universidad. Y arguye dos causas m¨¢s: el incremento de alumnos en la universidad, lo que presumiblemente baja la media, y la incorporaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas, que genera el desarrollo de nuevas competencias, diversifica los curr¨ªculos y, a su vez, eleva el list¨®n de exigencias.
"Queremos que los estudiantes est¨¦n alfabetizados en nuevas tecnolog¨ªas. Que sean capaces de buscar informaci¨®n cr¨ªticamente, integrarla y razonarla. Comprender ya no es memorizar, sino valorar y aprender a buscar", aclara.
En cuanto a la asimilaci¨®n de nuevas tecnolog¨ªas, constata que Espa?a va "un poco rezagada" con respecto a Europa en la m¨¦trica de la Sociedad de la Informaci¨®n si se atiende a los indicadores de penetraci¨®n de ordenadores en escuelas o la presencia de Internet en los hogares.
Por otra parte, de sus estancias como profesor visitante en universidades de Illinois, Georgia, Memphis o Chicago, rescatar¨ªa para revitalizar el sistema educativo espa?ol la figura del bibliotecario, que asume all¨ª el papel de cicerone de la introducci¨®n de Internet en la escuela y la Universidad en sustituci¨®n del docente. "El profesor medio tiene problemas para introducir Internet en el aula. La mayor¨ªa se siente m¨¢s seguro con el l¨¢piz y papel". A?ade que "los profesores de hoy fueron los buenos estudiantes de hace 30 a?os", lo que conlleva que al encargarse de la docencia de las nuevas generaciones "tengan dificultades para cumplir los objetivos que se les est¨¢n exigiendo a sus estudiantes", matiza, atenuando responsabilidades de los docentes, que han dejado de ser "los principales transmisores de la informaci¨®n". Ahora deben ense?ar las formas de distribuci¨®n, procesamiento y valoraci¨®n de una informaci¨®n cada vez m¨¢s diseminada.
Actualmente, Vidal-Abarca y su grupo de investigaci¨®n de la Universitat desarrollan un test para evaluar on-line los procesos de comprensi¨®n lectora y aprendizaje mediante subvenciones de entidades privadas. Otro de sus experimentos, que se sustenta en un proyecto de investigaci¨®n financiado por el Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia, pone de relieve un resultado llamativo: tomar notas perjudica la comprensi¨®n. Para llegar a esta conclusi¨®n dividieron aleatoriamente a dos grupos de estudiantes. A unos se le permit¨ªa tomar apuntes electr¨®nicos y a otros no. A ambos se les facilitaron los cuatro mismos textos que analizaban por qu¨¦ las bacterias se estaban haciendo cada vez m¨¢s resistentes a los antibi¨®ticos. Los documentos independientes y de diferentes autores abordaban diversos temas para evaluar el nivel de comprensi¨®n de la persona cuando coge notas o s¨®lo entiende lo que va leyendo. Al acabar la lectura los estudiantes deb¨ªan elaborar un ensayo sobre lo le¨ªdo. Y parad¨®jicamente los que no hab¨ªan tomado apuntes obtuvieron mejores resultados que los que lo hab¨ªan hecho.
"Parece sorprendente y demuestra que a¨²n queda mucho que investigar en esta materia", concluye el director de un grupo que desarrolla m¨¦todos y materiales de ense?anza para mejorar las estrategias de comprensi¨®n y analiza la relaci¨®n entre comprensi¨®n y b¨²squeda de informaci¨®n a partir de textos procedentes de fuentes m¨²ltiples.
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