Ciencia amena
M¨¢s de 20.000 personas visitaron Cosmocaixa en su primer fin de semana en funcionamiento
Cosmocaixa, el nuevo Museo de la Ciencia de Barcelona, no deja de provocar asombro. El centro celebr¨® anteayer una masiva jornada de puertas abiertas que fue seguida con entusiasmo: "Es impresionante", se o¨ªa una y otra vez. La afluencia de p¨²blico a la fiesta inaugural de la noche del s¨¢bado -a la que asistieron 8.000 personas, seg¨²n fuentes del museo- anunciaba un ¨¦xito cantado por la espectacularidad de las renovadas instalaciones. La posibilidad de contemplar una selva amaz¨®nica a escasos metros del Tibidabo bastaba como reclamo publicitario para despertar la curiosidad de la gente.
Aglomeraci¨®n. Cosmocaixa, el nuevo Museo de la Ciencia de Barcelona, no deja de provocar asombro. El centro celebr¨® anteayer una masiva jornada de puertas abiertas que fue seguida con entusiasmo: "Es impresionante", se o¨ªa una y otra vez. La afluencia de p¨²blico a la fiesta inaugural de la noche del s¨¢bado -a la que asistieron 8.000 personas, seg¨²n fuentes del museo- anunciaba un ¨¦xito cantado por la espectacularidad de las renovadas instalaciones. La posibilidad de contemplar una selva amaz¨®nica a escasos metros del Tibidabo bastaba como reclamo publicitario para despertar la curiosidad de la gente.
La respuesta no se hizo esperar. El gran estreno popular de Cosmocaixa deb¨ªa arrancar el domingo a las doce de la ma?ana. Tres horas antes, ya hab¨ªa una larga cola frente al recinto. Ante la avalancha que se avecinaba, los responsables del museo optaron por adelantar una hora la apertura. A partir de entonces, los visitantes se contaron por miles. M¨¢s de 10.000 asistentes se hab¨ªan paseado por sus salas a media tarde. Al final, la convocatoria se cerr¨® con la visita de 14.000 personas.
Como era de esperar, los ni?os fueron los reyes de la convocatoria l¨²dica y pedag¨®gica. Cosmocaixa apuesta por la interactividad como marca de la casa y los m¨¢s peque?os se tomaron en serio el desaf¨ªo: no dejaban de tocarlo todo. Los cl¨¢sicos artilugios mec¨¢nicos que sirven para explicar de forma amena principios cient¨ªficos b¨¢sicos -trasladados desde la antigua sede- manten¨ªan su popularidad intacta y estuvieron muy concurridos durante todo el domingo. "Es la ley de la gravedad. Pero a ti, ?qu¨¦ te ense?an en el colegio?", le espet¨® un preocupado padre a su hijo frente a una de las atracciones divulgativas.
La elevada presencia infantil no tard¨® en trasladarse a los altavoces. As¨ª, los avisos a familiares de cr¨ªos despistados se suced¨ªan por megafon¨ªa. "Por favor, se ruega a los familiares de tal ni?o que vayan a buscarlo a la secci¨®n de los iguanodontes", ¨¦sta fue sin duda una de las frases m¨¢s repetidas de la bulliciosa jornada de puertas abiertas.
Todav¨ªa es pronto para se?alar la estrella de Cosmocaixa, aunque ciertas colas y esperas de hasta dos horas dan ya una pista: el planetario, la exposici¨®n temporal de los f¨®siles de dinosaurios y el bosque amaz¨®nico sumergido -con sus peces y animales ex¨®ticos- se situaron tempranamente entre los rincones favoritos de los asistentes. Los admiradores del viejo museo cumplieron el requisito obligado de echar un vistazo al p¨¦ndulo de Foucault que durante tantos a?os dio la bienvenida al centro. Sin embargo, la nostalgia fue cero: todos estaban encantados por la mejor¨ªa. "?ste es m¨¢s espectacular que el otro y est¨¢ lleno de cosas curiosas. Mucho mejor, la verdad", afirm¨® un visitante. Los elogios y las exclamaciones de admiraci¨®n marcaron la nota del d¨ªa.
Cosmocaixa se podr¨¢ visitar gratuitamente hasta el pr¨®ximo 9 de enero (de martes a domingo, entre las 10.00 y las 20.00).
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