"Han estado comport¨¢ndose como una banda de mafiosos"
Junto al cord¨®n policial, la familia de Jokin espera la confirmaci¨®n de la terrible noticia. El director del instituto se acerca y, conmocionado por la tragedia tan reciente, comenta: "Estos chicos han estado comport¨¢ndose como una banda de mafiosos. Quiz¨¢s hemos actuado con demasiada lentitud". M¨¢s tarde, al ver que todos los indicios apuntan a la dejadez de la direcci¨®n del centro, se encierra en el silencio y da instrucciones estrictas de que nadie hable.
As¨ª se lo ordena a los profesores. Y ¨¦stos van clase por clase trasladando la prohibici¨®n a los alumnos. Pero los chavales ya no pueden callar. Incluso algunos de ellos se sienten culpables por haber guardado silencio durante demasiado tiempo, por no haber defendido a su amigo Jokin. Hay quienes, pese a la prohibici¨®n del centro, se han dirigido a los padres de Jokin y les han dicho: "Declararemos todo lo que ha pasado donde haga falta. Aunque el centro y nuestros padres no quieran. Nadie nos lo va a prohibir". Y son casi todos los que, preguntados por los periodistas a la salida del centro, confirman que el calvario de Jokin era conocido por todos, tanto alumnos como profesores. "Pero no puede poner mi nombre, eh, que nos lo tienen prohibido", dicen mirando hacia atr¨¢s con desconfianza.
Sumergidos en la pena
Aunque sumergidos en la pena, a la familia de Jokin no deja de llamarle la atenci¨®n que ninguno de los padres de los ocho alumnos apartados del centro como presuntos autores del acoso se haya puesto en contacto con ellos. Circunstancia agravada porque tres de los chavales son hijos de profesores del mismo instituto. Se sabe que uno de ellos ha pedido una baja por enfermedad y que otro tramita su traslado a otro pueblo de Guip¨²zcoa. Tambi¨¦n se da por seguro que tres de los ocho alumnos investigados tienen decidido dejar el centro.
Otro de los extremos que la Ertzaintza tiene intenci¨®n de investigar es lo sucedido el martes d¨ªa 14, segundo d¨ªa de clase.Al parecer, el chaval no s¨®lo fue humillado por sus compa?eros, que hicieron pintadas alusivas al aniversario de su descomposici¨®n de vientre y sembraron los pupitres de rollos de papel higi¨¦nico. Entre el jolgorio general, la profesora orden¨® a Jokin que recogiera todo.
Adem¨¢s de la investigaci¨®n de la polic¨ªa auton¨®mica, la consejer¨ªa de Educaci¨®n del Gobierno vasco ha ordenado una investigaci¨®n exhaustiva. La responsable del departamento, ?ngeles Iztueta, se acerc¨® la pasada semana hasta Hondarribia para dar el p¨¦same a la familia y garantizarle la investigaci¨®n de los hechos.
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