Dos d¨¦cadas de 'Born in the USA' y 25 millones de discos vendidos

Born in the USA, el disco con el que Bruce Springteen toc¨® la cima de la popularidad, se puso a la venta en 1984 y desde entonces ha vendido en todo el mundo 25 millones de discos. Ahora que se cumplen 20 a?os del ¨¢lbum en el que el Boss cantaba sin pudor el cari?o que le une a su pa¨ªs, pero denunciando a la vez la cara m¨¢s oscura de Estados Unidos, se ha lanzado una nueva edici¨®n de un ¨¢lbum que, salvo los dos ¨²ltimos a?os, casi que no ha llegado a descatalogarse. Born in the USA, adem¨¢s de ser uno de los discos m¨¢s vendidos, podr¨ªa pasar a la historia tambi¨¦n como uno de los hitos en la carrera de este rockero porque consigui¨® colocar en el Top 10 de Estados Unidos siete canciones.

De los 25 millones de discos vendidos en estas dos d¨¦cadas, la mayor parte ha sido adquirida por seguidores del autor de Dancing in the dark en Estados Unidos y en Europa, que son los dos grandes mercados de este artista. En Espa?a, Catalu?a y especialmente Barcelona se llevan la palma de ventas, un amor, por otra parte, correspondido, ya que Springsteen eligi¨® la ciudad como escenario de un DVD.

A Springsteen no le gusta modificar la unidad de los discos, por eso Born in the USA vuelve a las tiendas tal y como fue concebido, aunque los coleccionistas descubrir¨¢n en el libreto una foto m¨¢s.

En su momento, Born in the USA trat¨® de ser rentabilizado por la derecha m¨¢s conservadora del pa¨ªs e incluso Ronald Reagan trat¨® de apuntarse un tanto en una campa?a electoral, pero el m¨²sico dej¨® claro desde el principio que el disco no era un manifiesto patriotero. El repertorio de Born in the USA surge tras un viaje por buena parte del pa¨ªs en el que descubre injusticias que luego denuncia, como la situaci¨®n de los veteranos de Vietnam.

La canci¨®n de Kerry

El paso del tiempo tampoco parece haber cambiado demasiado la mentalidad de un artista que hoy inicia una gira, denominada Voto por el cambio, en la que cierra filas con bandas y solistas comprometidos como REM, Pearl Jam, Jackson Browne, James Taylor o Ben Harper. Pero tampoco ahora se muestra complaciente con el poder establecido. Dicen que una de las canciones favoritas de John Kerry es No surrender, pero eso a Springsteen no parece importarle demasiado.

Los artistas que le acompa?an en esta gira tratan de impedir que Bush siga en el poder por lo que podr¨ªa suponer su permanencia para la paz mundial y por el recorte de derechos ciudadanos que vive su pa¨ªs. "Sent¨ª que no pod¨ªa haber escrito la m¨²sica que he escrito y cantar las cosas sobre las que he cantado en los ¨²ltimos 25 a?os y no implicarme en estas elecciones", asegur¨® el m¨²sico cuando se anunci¨® la gira por el cambio. Springsteen es consciente tambi¨¦n de que muchos de sus seguidores seguramente no sonr¨ªen precisamente cuando dice esas cosas. Como en Born in the USA.