El campe¨®n y la joven promesa

Andy Irons, nacido en Hawaii en 1978, era s¨®lo un ni?o de diez a?os que acababa de empezar a surfear cuando oy¨® hablar por primera vez de Mundaka. "Hab¨ªa le¨ªdo sobre las olas en revistas", cuenta v¨ªa e-mail; "y mi padre, que tambi¨¦n era surfista, siempre me dec¨ªa que ten¨ªa que ir all¨ª".

Han pasado 16 a?os y hoy Irons es el campe¨®n del mundo de surf. Es uno de los cinco ¨²nicos surfistas que ha ganado dos t¨ªtulos consecutivos (2002 y 2003) y, de momento, encabeza la clasificaci¨®n de 2004. Compite en Mundaka y, a falta de tan s¨®lo otras dos pruebas para que termine el circuito, su papel en esta cita puede ser clave para determinar qui¨¦n ser¨¢ el pr¨®ximo n¨²mero uno.

A la misma edad a la que Irons o¨ªa hablar por primera vez de Mundaka, a tan s¨®lo unos kil¨®metros de las m¨ªticas olas, Hodei Collazo empezaba a hacer surf en Zarautz. Le gust¨® tanto que pronto estaba meti¨¦ndose en el agua todos los d¨ªas.

Con 14 a?os, Collazo empez¨® a competir. Y en 2002 lleg¨® a ser el quinto mejor j¨²nior del mundo. Hoy, este joven de 20 a?os vive varios meses de cada curso en Australia, compite por toda Europa y pasa s¨®lo tres meses en su casa de Zarautz.

Collazo es una de las grandes esperanzas del surf espa?ol y los expertos dicen que alg¨²n d¨ªa entrar¨¢ en la WCT, el circuito en el que compiten los 45 mejores surfistas. "Todav¨ªa, con el nivel que tengo, no me veo entre los mejores", reconoce; "pero, si sigo surfeando mucho y evoluciono, alg¨²n d¨ªa creo que s¨ª podr¨¦ llegar".

Como Irons, Collazo est¨¢ estos d¨ªas en Mundaka. Ha tenido el honor de participar como invitado en el Billabong Pro 2004. Pero su aventura dur¨® poco: cay¨® en la primera ronda al enfrentarse con el tricampe¨®n mundial Kelly Slater.

Irons cree que Mundaka, donde surfe¨® por primera vez hace diez a?os, "es una de las mejores olas del mundo, una izquierda ¨²nica". Lo mismo cree Collazo, para quien "es una gran ola para hacer tubos".

Durante unos d¨ªas han coincidido en la misma playa, pero a¨²n les separa una gran distancia. Collazo recorrer¨¢ este a?o por primera vez las pruebas clasificatorias (WQS) del circuito mundial. Y Irons lleva siete a?os compitiendo en la ¨¦lite y ha ganado a lo largo de su espectacular carrera casi 700.000 d¨®lares en premios.