"Cheney es el diablo detr¨¢s del presidente"
El especulador y fil¨¢ntropo h¨²ngaro-estadounidense George Soros se ha convertido en un f¨¦rreo activista contra el presidente de EE UU, George W. Bush, y sus pol¨ªticas. Con 74 a?os de edad, se ha lanzado en una gira por una docena de ciudades para explicar las mentiras que llevaron a la guerra en Irak, para que el 2 de noviembre los estadounidenses voten en consecuencia. La doctrina de Bush, advierte, se basa en que las relaciones internacionales son relaciones de poder, dejando como un elemento decorativo la legalidad y la legitimidad.
Soros puede ser un hombre peligroso si se le tiene como enemigo. Basta dar un breve repaso a su biograf¨ªa. Sali¨® de Hungr¨ªa con 17 a?os y emigr¨® primero a Inglaterra y despu¨¦s a EE UU, donde en 1969 cre¨® su principal sociedad, el Quantum Fund (con domicilio en un para¨ªso fiscal). George Soros se ha enriquecido gracias a su actividad en los mercados de valores. Con unos 7.000 millones de d¨®lares de patrimonio (5.650 millones de euros), est¨¢ entre las 30 personas m¨¢s ricas de EE UU, seg¨²n la revista Forbes. La an¨¦cdota m¨¢s conocida de la vida de Soros es la operaci¨®n por la que provoc¨® el derrumbe de la libra esterlina en septiembre 1992, jugada que le hizo ganar unos 1.000 millones de d¨®lares en un abrir y cerrar de ojos, a costa del Estado y los contribuyentes brit¨¢nicos. Soros ha llegado a ser el paradigma del especulador. A pesar de que perdi¨® mucho dinero en el derrumbe burs¨¢til de 1987, en la crisis del rublo ruso de 1998 y en la burbuja tecnol¨®gica de hace cuatro a?os, tambi¨¦n gan¨® cantidades ingentes de dinero con la crisis econ¨®mica asi¨¢tica, la peor de la historia moderna.
"Si Bush es reelegido a sabiendas de que nos minti¨®, el sentimiento contra Estados Unidos en el mundo estar¨¢ justificado"
"Kerry no quiere ser un presidente de guerra. Defender¨¢ el pa¨ªs, pero sin ir a un conflicto b¨¦lico a la primera de cambio. Esto es muy importante"
La entrevista se realiz¨® el pasado domingo en la casa de campo de Soros en Katonah, a 80 kil¨®metros al norte de Nueva York. A ¨¦l le hubiese gustado hacerla en Espa?a, pero dice que el ataque que el entorno de Bush est¨¢ lanzando contra su persona es muy fuerte y opt¨® por quedarse en EE UU hasta que pasen las elecciones. "Me est¨¢n satanizando", dice.
Pregunta. ?Por qu¨¦ esta campa?a?
Respuesta. ?stas no van a ser unas elecciones normales. Es un refer¨¦ndum sobre George W. Bush. Hace cuatro a?os no fue elegido por sus pol¨ªticas. Pero sufrimos los ataques del 11-S, su doctrina y la invasi¨®n de Irak. Si los estadounidenses volvemos a reelegirle, estaremos apoyando sus pol¨ªticas y tendremos que asumir las consecuencias de ¨¦stas. Y entraremos en un c¨ªrculo vicioso de violencia que no tendr¨¢ fin. Pero si lo rechazamos, entonces todo habr¨¢ sido una situaci¨®n temporal. Es de lo que intento convencer a la gente: nuestro futuro depende de estas elecciones.
P. ?Hace campa?a por el candidato dem¨®crata, John Kerry, o contra George Bush?
R. Quiero que la gente vote a John Kerry y me sentir¨¦ muy contento con ¨¦l como presidente. Le apoyo de una manera totalmente independiente porque las reglas electorales son muy peculiares. Tenemos el derecho a hablar y gastarnos el dinero que queramos al margen de la campa?a.
P. ?Por qu¨¦ apoya a Kerry?
R. Le conozco personalmente. Tenemos nuestras casas de verano muy cerca la una de la otra. Conozco sus puntos de vista, que fueron formados durante la guerra de Vietnam, y s¨¦ que s¨®lo recurrir¨¢ a la acci¨®n militar como ¨²ltimo recurso. ?l no quiere ser un presidente de guerra. Defender¨¢ el pa¨ªs pero sin ir a un conflicto b¨¦lico a la primera de cambio. Esto es muy importante.
P. ?Y qu¨¦ piensa del entorno de George Bush?
R. No tengo dudas de que el vicepresidente Dick Cheney es el esp¨ªritu real del diablo que hay detr¨¢s del presidente.
P. En estas elecciones prima el factor seguridad. ?Aceptar¨¢n los estadounidenses un presidente que no sea de guerra?
R. George Bush nos ha hecho menos seguros de lo que ¨¦ramos. La gente tiene m¨¢s miedo y la Administraci¨®n lo alimenta. El problema es que el miedo es mal consejero y la guerra contra el terror, como se est¨¢ utilizando, est¨¢ provocando que hoy estemos menos seguros. Hay un mensaje subliminal por el que llevando la guerra contra el terror fuera de EE UU nos hace sentir m¨¢s seguros en casa. Pero es un argumento muy peligroso.
Las madres que piensan que sus hijos estar¨¢n m¨¢s seguros porque se est¨¢ luchando la guerra en Irak, en lugar de en casa, se equivocan. Se han mandado a las tropas a Irak como papel atrapamoscas, para atraer a los terroristas. Lo que se est¨¢ consiguiendo es que cada vez m¨¢s gente odie a los estadounidenses. Y al haber v¨ªctimas inocentes, reforzamos la causa de los terroristas. Pero el argumento de Bush es poderoso y las elecciones est¨¢n siendo m¨¢s re?idas de lo que me gustar¨ªa. Por eso he decidido hablar y hacer todo lo que est¨¦ en mi mano para asegurarme que no sea reelegido, porque los valores y principios de nuestra sociedad est¨¢n en peligro. Esa es mi preocupaci¨®n principal.
P. ?Es posible democratizar un pa¨ªs como Irak?
R. S¨¦ por experiencia pr¨¢ctica que no se puede imponer la democracia. Debe crecer internamente. Es un proceso lento y s¨®lo puede ser ayudada desde fuera bajo circunstancias muy especiales. Cuando la Alemania nazi y el Jap¨®n imperial fueron derrotadas, y colaps¨® la Uni¨®n Sovi¨¦tica, hubo una ventana de oportunidad para ayudar a esos pa¨ªses a que se convirtieran en democracias. Tuvimos ¨¦xito en Alemania y Jap¨®n. Fracasamos en la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica porque Occidente no quiso invertir el dinero y el esfuerzo necesarios.
En el caso de Irak, no se ha ido para llevar la democracia y tampoco vamos a tener ¨¦xito a la hora de introducirla. Es un argumento falso, que se invent¨® para justificar la invasi¨®n. El punto m¨¢s importante que intento explicar a los estadounidenses es que no se trat¨® de un fallo de los servicios de inteligencia. Fue una concepci¨®n deliberada de la Casa Blanca. Ahora sabemos que no hab¨ªa armas de destrucci¨®n masiva ni conexiones con Al Qaeda. Y la Casa Blanca lo sab¨ªa en ese momento y por alguna raz¨®n no inform¨® ni al Congreso ni se cont¨® la verdad a los ciudadanos. El resto del mundo lo sabe, pero la opini¨®n p¨²blica en EE UU no.
P. En Espa?a mucha gente piensa que la mentira hizo caer al Gobierno tras los atentados del 11-M en Espa?a. ?Podr¨ªa pasar lo mismo en EE UU?
R. S¨ª. Y lo espero. Pero no estoy muy seguro de que el pueblo americano se preocupe por saber la verdad tanto como en su d¨ªa el pueblo espa?ol. Lo veremos en el 2 de noviembre. Pero si no se preocupan y Bush es reelegido a sabiendas de que nos minti¨®, tendremos que asumir las consecuencias de sus pol¨ªticas y el sentimiento antiamericano en el mundo estar¨¢ justificado. Si se preocupan, la gente que se declara hoy antiamericana deber¨ªa pasar a ser anti-Bush. Ser¨¢ una liberaci¨®n y EE UU podr¨¢ cambiar de direcci¨®n para ganarse de nuevo el respeto del mundo.
P. ?Cu¨¢l es el impacto de las pol¨ªticas de la Casa Blanca en la econom¨ªa?
R. El efecto negativo m¨¢s importante es el precio del petr¨®leo, que est¨¢ sacando el dinero de los bolsillos de los ciudadanos y les deja menos ingresos disponibles para consumir. La econom¨ªa ha sido estimulada por todos los medios para que mostrara el mejor rendimiento posible durante el segundo y el tercer trimestre de este a?o, antes de las elecciones. Sin embargo, el resultado no est¨¢ siendo tan bueno y eso puede ser negativo para Bush de cara al voto. George Bush padre perdi¨® las elecciones por la econom¨ªa. Bush hijo es el ¨²nico que dice que la econom¨ªa atraviesa por un buen momento, pero la gente no lo siente as¨ª. Primero, por la p¨¦rdida de empleos. Segundo, porque los ciudadanos no est¨¢n en una situaci¨®n financiera tan buena como hace cuatro a?os. Por no hablar de la salud o del medio ambiente. La Administraci¨®n Bush est¨¢ favoreciendo a los m¨¢s ricos y a los grandes grupos financieros y empresariales.
P. Usted ha sostenido que la actual escalada del petr¨®leo es una consecuencia de las pol¨ªticas de Bush en Irak. ?Bajar¨¢ el precio si gana Kerry?
R. No necesariamente. Porque antes, Kerry, deber¨¢ pacificar Irak y no ser¨¢ una empresa f¨¢cil, porque la situaci¨®n es muy dif¨ªcil, aunque tendr¨¢ mejores opciones para conseguirlo que George Bush.
P. ?Cu¨¢l es su previsi¨®n del precio del crudo?
R. No hago previsiones. Demasiadas incertidumbres. El precio del petr¨®leo, en todo caso, es una cuesti¨®n de equilibrio entre oferta y demanda. Si se quita a Irak del mercado, el sistema se vuelve m¨¢s vulnerable ante otras disrupciones en el suministro en Nigeria, Venezuela o por los huracanes. Y est¨¢ adem¨¢s la especulaci¨®n y el miedo.
P. ?Cu¨¢l es el impacto del elevado d¨¦ficit estadounidense para la econom¨ªa internacional?
R. El d¨¦ficit es malo. Es m¨¢s un problema m¨¢s a largo plazo que a corto. EE UU est¨¢ consumiendo m¨¢s de lo que produce. Y los pa¨ªses asi¨¢ticos producen m¨¢s de lo que consumen. Se puede seguir creciendo hasta que se vuelva insostenible. Es un desequilibrio en el sistema global, poco sano. Los pa¨ªses desarrollados est¨¢n chupando los ahorros y la acumulaci¨®n de capital de los menos desarrollados. Ser¨ªa m¨¢s equilibrado si el capital fluyera de los pa¨ªses ricos hacia los pobres.
P. ?La idea de EE UU como tierra de oportunidades est¨¢ en peligro?
R. Como oportunidades individuales, no. Pero como una sociedad abierta y como s¨ªmbolo de la esperanza para el resto del mundo, s¨ª. Los valores y principios de una democracia nunca est¨¢n asegurados. Hay episodios en los que EE UU viol¨® esos principios, como con Jap¨®n durante la Guerra Mundial o persiguiendo a los comunistas bajo el mandato de MacCarthy. Pero no creo que en la historia de este pa¨ªs ese peligro haya sido tan grande como hoy. Por eso me he comprometido en esta campa?a. No porque el d¨¦ficit p¨²blico sea muy alto. La econom¨ªa es un factor importante de cara al voto. Pero lo que a m¨ª me irrita es que Bush considere las cr¨ªticas como algo antipatriota, esa idea de que los que no est¨¦n con EE UU son terroristas y que bajo la excusa de la guerra contra el terror se invadiera Irak. El orden mundial es imperfecto. Pero Bush est¨¢ minando el poco orden que queda. Eso hace al mundo m¨¢s vulnerable ante el desorden.
P. ?Cu¨¢nto dinero lleva invertido en su campa?a?
R. Una cantidad pr¨®xima a los 20 millones de d¨®lares (16 millones de euros). Y estoy gastando tres millones de d¨®lares m¨¢s en anuncios a doble p¨¢gina en los peri¨®dicos, en mandar dos millones de copias de mi mensaje y en mi gira.
P. ?Cu¨¢l es su opini¨®n del Fondo Monetario Internacional?
R. Que ha perdido el rumbo. No tienen un claro el sentido de la direcci¨®n y no est¨¢n listos para lidiar con los problemas a largo plazo con los que se enfrentar¨¢n en el futuro. Adem¨¢s, hay un desequilibrio entre los diversos niveles del capitalismo. Eso requiere un remedio a largo plazo y no est¨¢ en la agenda.
P. ?Y sobre Rodrigo Rato?
R. No tengo una opini¨®n creada sobre su persona.
P. ?C¨®mo ve el proceso de integraci¨®n de China en la econom¨ªa de mercado?
R. China es la principal beneficiaria del proceso de globalizaci¨®n. Su expansi¨®n es muy fuerte. Pero su futuro depende de que sea capaz de aprovechar la situaci¨®n para mejorar su sistema pol¨ªtico y evolucionar hacia una sociedad m¨¢s abierta. Si fallan en este punto, una crisis econ¨®mica o financiera puede convertirse en una crisis pol¨ªtica. El ejemplo es el de Indonesia.
P. ?Y Rusia?
R. Es un pa¨ªs rico en recursos naturales y se beneficia del alto precio de la energ¨ªa y otras materias primas. Pero pol¨ªticamente va por la mala direcci¨®n al querer reestablecer un r¨¦gimen burocr¨¢tico centralizado y autoritario. Su futuro es turbio porque se est¨¢ prometiendo que se va a reconstituir el Imperio ruso. Pero no est¨¢n en condiciones de conseguirlo.
P. ?Ir¨ªan mejor las cosas con una moneda ¨²nica en todo el mundo?
R. Ser¨ªa deseable, pero requerir¨ªa de mucha m¨¢s cooperaci¨®n. No se puede tener una moneda ¨²nica sin una pol¨ªtica monetaria ¨²nica. Y en esto no hay un acuerdo.
P. ?Se acab¨® el George Soros especulador que tanto asustaba a los mercados?
R. Estoy jubilado. Ya no estoy activo en el terreno financiero. Poco a poco he ido tomando posiciones m¨¢s conservadoras. Pero eso no quiere decir que los mercados vayan a estar m¨¢s tranquilos.
P. ?Piensa que los fondos de alto riesgo deben ser regulados de una forma m¨¢s estricta?
R. Los mercados financieros son inestables. Preservar su estabilidad puede requerir o no de reglas precisas. La idea de que dej¨¢ndoles actuar solos alcanzan el equilibrio es falsa. La econom¨ªa necesita la intervenci¨®n de las autoridades.
P. ?La responsabilidad social corporativa, es eficaz o mera publicidad?
R. Es hipocres¨ªa. Aunque eso es mejor que ser totalmente despreocupados.
P. ?Pas¨® la ola de los esc¨¢ndalos empresariales?
R. Siempre habr¨¢ excesos.
P. ?Est¨¢n reflejando los mercados las favorables perspectivas econ¨®micas que transmiten las principales instituciones?
R. Los mercados nunca reflejan la realidad.
P. ?Sigue la evoluci¨®n de la econom¨ªa en Espa?a?
R. No.
P. ?Pero tiene inversiones?
R. S¨ª. Invert¨ª hace algunos a?os en una constructora. [La inmobiliaria Med Group].
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