Cambio de alineaci¨®n

Una de las preocupaciones que el XV Congreso Nacional del PP hab¨ªa generado en Andaluc¨ªa era conocer qu¨¦ papel ofrecer¨ªa Rajoy a Javier Arenas en su nueva Ejecutiva y qu¨¦ grado de influencia podr¨ªa tener el actual presidente del PP andaluz a la hora de confeccionar el nuevo equipo rector a nivel nacional.

Despejados ya los nombramientos, y pasados los d¨ªas suficientes como para hacer una valoraci¨®n desapasionada, es el momento de interpretar aquellos y cuantificar el peso espec¨ªfico que Andaluc¨ªa tiene en la direcci¨®n nacional del principal partido de la oposici¨®n.

Que Arenas ha perdido poder eso es algo que s¨®lo niegan quienes l¨®gicamente tienen la obligaci¨®n de hacerlo a fin de intentar no descomponer la imagen pol¨ªtica del presidente de los populares andaluces.

Su paso desde la secretar¨ªa general a una de las vicesecretarias y, ahora, a la presidencia del comit¨¦ electoral, representa un claro descenso de escalones que no s¨®lo se produce en la escala jer¨¢rquica, sino que va acompa?ado de p¨¦rdida de protagonismo en la toma de decisiones internas del partido.

No olvidemos que, hasta antes del Congreso, Javier Arenas pertenec¨ªa al n¨²cleo duro del PP, desde el que semanalmente se tomaban las decisiones, condici¨®n esta que ha perdido, quedando limitada a la ratificaci¨®n de las propuestas regionales en orden a la elaboraci¨®n de candidaturas en periodos electorales.

En cuanto a la interrogante que se abr¨ªa con respecto a la representaci¨®n andaluza en el nuevo Comit¨¦ Ejecutivo, la propuesta que Mariano Rajoy present¨® ante el plenario y fue aprobada por ampl¨ªsima mayor¨ªa, entiendo que quiebra las expectativas de Arenas, tanto por la cualidad como por la cantidad de los miembros designados.

Si nos atenemos a los nombres, desaparecen de dicho comit¨¦ personas tan vinculadas al presidente del PP andaluz como Juan Jos¨¦ Matar¨ª, Manuel Atencia, ?ngeles Mu?¨®z o Rafael Hernando, y en su sustituci¨®n entran a formar parte del mismo s¨®lo dos que puedan denominarse como cercanas a ¨¦l. Me refiero a Juan Ignacio Zoido, actual secretario regional, y la alcaldesa de Jer¨¦z, Mar¨ªa Jos¨¦ Garc¨ªa Pelayo.

El resto de los nombres o bien no tienen una vinculaci¨®n directa al c¨ªrculo de influencia de Arenas o, en algunos casos, mantienen con ¨¦l notables diferencias, por mucho que estas se maticen p¨²blicamente.

Es el caso de Crist¨®bal Montoro, Celia Villalobos, Te¨®fila Mart¨ªnez, Juan Manuel Moreno o Miguel Arias Ca?ete.

En cuanto a la cualidad de la representaci¨®n andaluza, hay que decir que la persona que sale fortalecida de este congreso es, sin lugar a dudas, Miguel Arias.

El que fuera ministro de Agricultura y durante muchos a?os activo europarlamentario en Bruselas, ha conseguido el reconocimiento a la lucidez intelectual que siempre le ha caracterizado, al margen de las cr¨ªticas que puntualmente pudiera recibir en su etapa de ministro por el tono coloquial de algunas de sus expresiones.

Arias Ca?ete ha venido siendo uno de los activos m¨¢s valiosos del Partido Popular en Andaluc¨ªa, eclipsado tal vez por su propia val¨ªa, al grangearse por este motivo los recelos de quienes pol¨ªticamente pod¨ªan competir internamente con ¨¦l.

Sustituye a Javier Arenas en el comit¨¦ de direcci¨®n del partido y ello le sit¨²a en una posici¨®n privilegiada de cara al futuro.

Por el contrario, la alcaldesa de Jerez de la Frontera, que se vislumbraba como una mujer emergente dentro de la direcci¨®n del partido tras encomend¨¢rsele la elaboraci¨®n de una de las ponencias, ocupa una vocal¨ªa sin mayor relieve ni protagonismo.

No gana fuerza, por tanto, el PP andauz en el proyecto Rajoy, si excluimos el caso de Arias y el de Moreno Bonilla, designado secretario, tal vez como respuesta al escaso apoyo que electoralmente recibe el Partido Popular desde Andaluc¨ªa y puede que como aviso a la actual direcci¨®n andaluza en el sentido de hacerle ver que la calidad de una organizaci¨®n pol¨ªtica no viene dada por el n¨²mero de afiliados con los que pueda contar, sino por su capacidad para penetrar en la sociedad y ganarse la confianza de esta, algo esto ¨²ltimo que a¨²n no ha logrado conseguir el PP andaluz, fundamentalmente en el medio rural.

Ante este escenario, y teniendo en cuenta que Arenas ha incumplido su compromiso de unir su futuro pol¨ªtico al de Aznar, manteni¨¦ndose en activo tras la retirada de ¨¦ste, no le queda demasiado cr¨¦dito al dirigente popular con el que afrontar su carrera pol¨ªtica.

De ah¨ª no es de extra?ar que recurra, como hacen los entrenadores de f¨²tbol en un ¨²ltimo intento por no ser cesados, a cambiar de demarcaci¨®n a los efectivos con los que cuenta, sin modificar el estilo de juego, pretendiendo dar una imagen de renovaci¨®n en el pr¨®ximo congreso regional que no ser¨¢ tal.

Antonio Sanz ha sido el primer cambio, pasando de la punta de ataque a la defensa, en una alineaci¨®n que necesitar¨¢ de algo m¨¢s que camisetas numeradas para desenvolverse arm¨®nicamente en este dif¨ªcil campo de juego que es Andaluc¨ªa.

Enrique Bellido Mu?oz es ex senador del PP por C¨®rdoba.