Arafat se dispone a viajar hoy a Francia para someterse a tratamiento m¨¦dico

Yasir Arafat ser¨¢ tratado en un hospital de Par¨ªs, adonde deber¨¢ llegar esta ma?ana. Antes de efectuar el viaje recibi¨® por parte del Gobierno de Israel, a trav¨¦s de la comunidad internacional, garant¨ªas suficientes de que se le permitir¨¢ volver a casa y reintegrarse a su trabajo habitual en la Mokata de Ramala, donde se encuentra confinado desde hace casi tres a?os. El l¨ªder palestino sufre una enfermedad, que algunos identifican como un c¨¢ncer, pero que sus pr¨®ximos definen como una simple "infecci¨®n viral". Los ¨²ltimos an¨¢lisis realizados revelan que se encuentra muy bajo de plaquetas.

Algunos aseguran que padece un c¨¢ncer; los m¨¢s pr¨®ximos, una simple "infecci¨®n viral"

El traslado del presidente Yasir Arafat, de 75 a?os, fue decidido cuando apenas se cumpl¨ªan 24 horas de una importante reca¨ªda en la salud del dirigente pol¨ªtico ¨¢rabe, que provoc¨® momentos de alarma y de confusi¨®n en Ramala, donde se lleg¨® a temer por su vida, rumore¨¢ndose incluso que hab¨ªa perdido el conocimiento y que se encontraba sumido en un proceso ag¨®nico.

La situaci¨®n de alarma que se vivi¨® en la noche del mi¨¦rcoles Ramala llev¨® a mucha gente a salir a la calle, a reunirse junto a las ruinas de su cuartel general, mientras que en las mezquitas de la capital de Cisjordania los imanes se relevaban para rezar las suras del Cor¨¢n, reclamando el restablecimiento de la salud del presidente.

El milagro se obr¨® a media ma?ana, cuando los portavoces oficiales de la Mokata anunciaron primero que el presidente Arafat hab¨ªa efectuado los rezos preceptivos del mes sagrado del Ramad¨¢n; despu¨¦s, que hab¨ªa desayunado copos de avena, y finalmente, que hab¨ªa sonre¨ªdo a los m¨¦dicos que hab¨ªan viajado ex profeso desde Egipto y Jordania, y entre los cuales se encontraba su m¨¦dico personal, el doctor jordano y ex ministro de Sanidad Asraf Kurdi.

Todas estas declaraciones, que parec¨ªan un cuento destinado a desviar la atenci¨®n de la soterrada batalla pol¨ªtica desatada desde el d¨ªa anterior, quedaron fielmente reflejadas despu¨¦s cuando la televisi¨®n palestina, hasta entonces muy cauta, ofreci¨® las primeras im¨¢genes del rais, tocado con una gorra de lana, sin afeitar y con una ligera sonrisa en los labios, sobre el fondo blanco de una almohada rodeado de sus m¨¦dicos personales.

A juzgar por las primeras fotograf¨ªas difundidas por la televisi¨®n palestina, Arafat, que no portaba en la cabeza su tradicional kefia, ha sufrido una considerable p¨¦rdida de peso y se aprecia un notable deterioro de su aspecto f¨ªsico.

En el momento de rodarse las im¨¢genes se encontraba tambi¨¦n junto a Arafat su esposa, Suha, de la que se encuentra virtualmente separado desde hace cuatro a?os, cuando una vez estallada la segunda Intifada abandon¨® Gaza con su hija, dejando atr¨¢s a su marido para instalarse en Par¨ªs, donde hab¨ªa vivido en su juventud.

Suha se cas¨® con Arafat en 1990, cuando ella contaba 28 a?os y ¨¦l 62. La hija de ambos, Zoha, que ahora cuenta 12 a?os, conoce a su padre b¨¢sicamente por las conversaciones telef¨®nicas y por fotograf¨ªas.

Ayer por la noche se ultimaban los detalles del viaje del presidente Arafat a Par¨ªs. El primer tramo del viaje se llevar¨¢ a t¨¦rmino en un helic¨®ptero, que le trasladar¨¢ a Amm¨¢n, la capital de Jordania, en cuyo aeropuerto le recoger¨¢ un avi¨®n especial enviado por el presidente Jacques Chirac, que le trasladar¨¢ a la capital francesa. Todos los desplazamientos se llevar¨¢n a cabo en aparatos ofrecidos por diferentes Gobiernos, ya que el helic¨®ptero personal de Arafat qued¨® destrozado por un bombardeo israel¨ª en los primeros meses de la Intifada.

Lo m¨¢s sorprendente de esta operaci¨®n pol¨ªtica es c¨®mo en poco menos de 24 horas ha cambiado la actitud del Ejecutivo de Israel, que aunque hab¨ªa dado permiso al presidente Yasir Arafat para viajar al exterior y abandonar el confinamiento en la Mokata, se hab¨ªa negado a dar garant¨ªas de que se le permitir¨ªa volver a casa, insinuando as¨ª la posibilidad de llevar a t¨¦rmino una "expulsi¨®n" encubierta. En medios pol¨ªticos palestinos se aseguraba anoche que "la historia demostrar¨¢ que detr¨¢s de este gesto se encuentra, como siempre que algo sucede en Oriente Medio, el Gobierno de Estados Unidos".

Un portavoz del Departamento de Estado norteamericano anunci¨® ayer por la noche sus deseos de que el presidente Arafat "reciba un tratamiento adecuado que le permita recuperar su salud". Richard Boucher, portavoz del Departamento de Estado, a?adi¨® que "israel¨ªes y palestinos trabajaban de manera conjunta y constructiva" para poder trasladar el enfermo.

El viaje de Arafat a Par¨ªs supone su primera salida al extranjero desde que estallara la Intifada hace cuatro a?os y los israel¨ªes le confinaran en la Mokata. S¨®lo en dos ocasiones, en la primavera del a?o 2001, el presidente pudo salir de su cuartel general para visitar los destrozos que provoc¨® una incursi¨®n israel¨ª en las calles de Ramala y visitar Nabl¨²s, tras sobrevolar el campo arrasado de Yen¨ªn.