El PP trata de retrasar la ley de nombramientos judiciales ante la renovaci¨®n de 40 puestos

La modificaci¨®n de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial para que los nombramientos de cargos judiciales se haga por mayor¨ªa de tres quintos y no simple como hasta ahora viaja contrarreloj por las Cortes. El Gobierno ha decidido impulsarla para que entre en vigor antes del 1 de enero de 2005. Precisamente antes del 31 de ese mes habr¨¢ que cubrir unas 40 vacantes en puestos relevantes de la judicatura. El PP pretende retrasar la entrada en vigor para poder controlar la elecci¨®n con su mayor¨ªa en el Poder Judicial. El PSOE y sus socios conf¨ªan en imped¨ªrselo.

El PP ha presentado una petici¨®n para que se ampl¨ªe el plazo de presentaci¨®n de enmiendas al proyecto de modificaci¨®n de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial. Ser¨¢ la Mesa del Congreso quien decida hoy si se lo concede o no. Estas peticiones son habituales con leyes complicadas. Sin embargo, la reforma que impulsa el PSOE es t¨¦cnicamente muy sencilla, ya que cambia s¨®lo un par de frases, aunque con un contenido pol¨ªtico enorme.

El hecho de que las decisiones se tomaran por tres quintos de los 21 magistrados que forman el Consejo del Poder Judicial implicar¨ªa que los vocales elegidos a propuesta de los dos grandes partidos, el PP y el PSOE, tendr¨ªan que ponerse de acuerdo en todo, pero especialmente en los nombramientos que competen al Poder Judicial (presidentes de sala y magistrados del Supremo y presidentes de los tribunales superiores de todas las comunidades). Ahora, en caso de discrepancia, los vocales elegidos por el PP imponen su mayor¨ªa sin problemas. En la Sala Segunda del Tribunal Supremo, encargada de resolver cuestiones que afectan a dirigentes pol¨ªticos, las ¨²ltimas cuatro vacantes han sido ocupadas por el candidato de la mayor¨ªa conservadora.

Dada la escasa complejidad t¨¦cnica de la reforma, la petici¨®n del PP para ampliar el plazo de enmiendas obedece, seg¨²n el PSOE, a un intento de retrasar su entrada en vigor. Los socialistas han decidido, seg¨²n el secretario general de su grupo, Diego L¨®pez Garrido, conceder la pr¨®rroga de una semana porque no trastoca sus planes.

De momento, el PSOE ya ha logrado, con el apoyo en la Mesa tanto de IU como de CiU, que la ley se tramite de urgencia. Adem¨¢s lograr¨¢n con su mayor¨ªa que la ley pase por el Congreso mediante el mecanismo de lectura ¨²nica, esto es, sin necesidad de atravesar ninguna comisi¨®n. Esta v¨ªa se aprobar¨¢ pr¨®ximamente en un pleno.

Aprobaci¨®n en pleno

Los plazos calculados por el PSOE implican que la ley se apruebe en un pleno del Congreso el pr¨®ximo 25 de noviembre. A partir de ah¨ª entrar¨ªa en el Senado. All¨ª el PSOE puede tener m¨¢s problemas, porque al PP le basta con encontrar el apoyo de un grupo peque?o para bloquear la reforma. En cualquier caso, como se tramita de urgencia, s¨®lo podr¨¢ quedarse en el Senado durante 20 d¨ªas.

Si el PP no logra incluir modificaciones en el C¨¢mara alta, como esperan los socialistas, la ley se podr¨ªa aprobar inmediatamente. Si no es as¨ª, tambi¨¦n est¨¢ calculado que se podr¨ªa incluir en uno de los ¨²ltimos plenos antes de Navidad, alrededor del 23 de diciembre. L¨®pez Garrido afirma que la ley entrar¨¢ en vigor antes de principios de a?o, precisamente para que todos esos nombramientos pendientes se hagan con el nuevo sistema y por tanto con la necesidad de consenso entre vocales del PSOE y del PP.

La reforma legal ha encontrado una fuerte oposici¨®n entre los sectores conservadores de la magistratura, que son mayoritarios.

Ayer fue el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, Jes¨²s Souto, quien rechaz¨® la reforma porque, en su opini¨®n, "no se entiende bien ni en su oportunidad ni en sus fines".

Souto, que precisamente ahora cumple su primer mandato de cinco a?os y espera renovaci¨®n, sostuvo en una entrevista con la agencia Efe que es "precipitada" y que, por tanto, "no ha sido muy meditada". "Las personas del mismo signo pol¨ªtico que actualmente proponen la reforma estuvieron gobernando muchos a?os con mayor¨ªa y en ning¨²n momento se les ocurri¨® que los designados ten¨ªan poco soporte electivo", se?al¨®.