La composici¨®n del Consejo de Estado cambia para incluir a dos ex presidentes auton¨®micos

El Estado de las autonom¨ªas tendr¨¢ voz y voto en el ¨®rgano consultivo m¨¢s importante en la estructura constitucional: el Consejo de Estado. La Comisi¨®n Constitucional del Congreso acept¨® ayer, con algunas modificaciones, una enmienda de CiU, defendida por Jordi Xucl¨¤, por la que se establece que entre los consejeros electivos que integran el alto ¨®rgano consultivo el Gobierno nombrar¨¢ a dos ex presidentes de comunidades aut¨®nomas, entre aquellos que hayan ejercido el cargo, al menos durante ocho a?os y, si aceptan la propuesta, permanecer¨¢n durante ocho a?os en el Consejo de Estado.

Las reformas de la ley suponen adem¨¢s, y fundamentalmente, la incorporaci¨®n, como consejeros natos, de los ex presidentes del Gobierno y la creaci¨®n de una Comisi¨®n de Estudios a la que se encomienda la elaboraci¨®n de propuestas legislativas o de reforma constitucional. Una vez que el Gobierno ha anunciado el prop¨®sito de reformar la Constituci¨®n, esta funci¨®n cobra especial relevancia.

Seg¨²n fuentes nacionalistas, parece l¨®gico que, si las fuerzas de este signo participaron en las negociaciones que lograron el consenso, tambi¨¦n tengan voz en este primer paso consultivo con el que el Gobierno quiere iniciar la reforma constitucional.

Aunque nadie quiso confirmarlo, el nombre de Jordi Pujol, entre otros, se baraj¨® en conversaciones de pasillo. Adem¨¢s de Pujol, s¨®lo hay otros cuatro ex presidentes auton¨®micos que cumplen los requisitos: Gabriel Ca?ellas (Baleares), Jos¨¦ Antonio Ardanza (Pa¨ªs Vasco), Pedro de Silva (Asturias) y Carlos Collado (Murcia).

Marcha atr¨¢s del PSOE

La segunda sorpresa que depar¨® la Comisi¨®n Constitucional la protagoniz¨® el Grupo Socialista cuando su portavoz, Elviro Aranda, anunci¨® que aceptaban un bloque de enmiendas del PP, defendidas por Federico Trillo, que supon¨ªan una aut¨¦ntica marcha atr¨¢s para las introducidas a iniciativa socialista en el tr¨¢mite de ponencia.

El Gobierno envi¨® el proyecto de reforma al Consejo de Estado, que emiti¨® informe favorable y algunas sugerencias que el Ejecutivo incorpor¨® al articulado y as¨ª lo envi¨® al Parlamento.

Durante el debate en ponencia, el Grupo Socialista introdujo enmiendas que supon¨ªan serias modificaciones al funcionamiento del Consejo de Estado y al papel de los letrados. Varios diputados aseguraron que estas enmiendas provocaron un gran malestar en el seno del Consejo y, seg¨²n informaci¨®n coincidente de esas fuentes, el Gobierno se alarm¨® y traslad¨® a su grupo la necesidad de rectificar posiciones, y volver, en gran parte, al texto original. Seg¨²n estas fuentes, el Gobierno se alarm¨® ante la posibilidad de que se crease un clima hostil en el Consejo.

Una de las enmiendas aceptadas al PP propone que sea el Gobierno quien se?ale, previamente, al Consejo de Estado "los objetivos, criterios y l¨ªmites de la reforma constitucional", algo que el proyecto no recog¨ªa.