"A la justicia hay que zarandearla y darle un aire nuevo"

Se podr¨ªa decir que Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Caro (Yunquillos, Toledo, 1948) es fiscal por un enfado. El nuevo jefe de la Fiscal¨ªa de C¨®rdoba, quien ha tomado posesi¨®n de su cargo esta semana, era inspector del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa en Madrid: "Me enfad¨¦ mucho con mi jefe, pens¨¦ que quer¨ªa marcharme y empec¨¦ a preparar la oposici¨®n. Eso s¨ª, el enfado me dur¨® menos que preparar la oposici¨®n". Fiscal desde 1985, empez¨® su carrera en C¨®rdoba, ha sido presidente de la Asociaci¨®n de Fiscales y hace cuatro a?os fue nombrado fiscal jefe de Toledo. Ahora, vuelve a C¨®rdoba.

Pregunta. ?Ha vuelto a casa?

Respuesta. Sin lugar a dudas. Han sido muchos a?os los que he estado en C¨®rdoba, para m¨ª es volver a mi casa. En todos los sentidos, en el sentido profesional y en el personal, porque en el tiempo en el que he estado trabajando en Toledo como fiscal jefe mi familia ha permanecido en C¨®rdoba.

"El futuro del proceso penal est¨¢ en otorgar la investigaci¨®n a los fiscales"

P. Cuando estuvo en Toledo habl¨® de que hac¨ªa falta m¨¢s plantilla, ?en C¨®rdoba pasa lo mismo?

R. Todav¨ªa no he podido comprobarlo, pero es algo que afecta con car¨¢cter general a toda la instituci¨®n. Y no s¨®lo hablo de plantilla, tambi¨¦n de medios materiales. Pero he notado aqu¨ª un gran beneficio, como es el hecho de que en C¨®rdoba, al estar transferidas las competencias de Justicia, la dotaci¨®n de medios materiales que en Toledo depende del Ministerio de Justicia aqu¨ª depende de la Junta. Para m¨ª es una maravilla que mientras en Toledo para pedir un simple bol¨ªgrafo o un libro ten¨ªa que ponerme en contacto con Albacete, aqu¨ª, sin embargo, a muy poca distancia est¨¢ la Delegaci¨®n de Justicia de la Junta. No tener que irme a otro sitio da mucha agilidad.

P. ?Por qu¨¦ dej¨® usted el cargo de portavoz y presidente de la Asociaci¨®n de Fiscales en 2003?

R. Porque soy un convencido de que no es bueno que la gente se anquilose en los cargos. Son buenas las renovaciones.

P. Dijo que en su nombramiento como jefe de C¨®rdoba tambi¨¦n le apoyaron los miembros de "la otra asociaci¨®n" (Uni¨®n Progresista de Fiscales). Si los otros son los progresistas, ?ustedes qui¨¦nes son?

R. Nosotros somos la Asociaci¨®n de Fiscales. Nunca he aceptado las etiquetas, ya s¨¦ que alguna vez se ha dicho que somos la conservadora. Pero lo niego tajantemente. De hecho, cuando yo estaba de presidente, propugnamos determinados cambios, y ellos, a pesar de llamarse progresistas, ped¨ªan que las cosas se quedaran como estaban. Las etiquetas a veces enga?an. Somos dos asociaciones profesionales cada una con su punto de vista, pero coincidimos en el 80% o 90% de los temas.

P. ?Qu¨¦ le parece la reforma de la oficina de la Fiscal¨ªa que entrar¨¢ en vigor la pr¨®xima primavera?

R. Creo que la Justicia es como un viejo ¨¢rbol con muchas ramas secas y lo que hay que hacer es zarandearlo y podarlo y darle un aire nuevo. Parte de eso consiste en racionalizar la forma de trabajar de los juzgados y fiscal¨ªas. Pero tampoco hay que descubrir el mundo, es hacer algo parecido a lo que pasa en el resto de la Administraci¨®n p¨²blica; no tiene sentido, desde mi punto de vista, que en un edificio haya varias oficinas judiciales, fiscales y juzgados y que, por ejemplo, cada oficina tenga su propio servicio para ir a llevar citaciones. Lo l¨®gico es que nos pongamos todos de acuerdo y lo hagamos al mismo tiempo.

P. ?Esto agilizar¨ªa los tr¨¢mites burocr¨¢ticos?

R. Se supone. Adem¨¢s, aunque a m¨ª no me gusta hablar de rendimiento econ¨®mico de la Administraci¨®n p¨²blica, tenemos que buscar un mejor rendimiento de los medios de los que disponemos. Es decir, lo que no podemos hacer es gestionar sin fin, porque la Administraci¨®n no puede ser un pozo sin fondo para pedir medios y bienes.

P. ?Y cu¨¢ndo se intentar¨¢n eliminar tr¨¢mites burocr¨¢ticos?

R. Alg¨²n d¨ªa habr¨¢ que empezar a cambiar los tr¨¢mites, sobre todo en el proceso penal. En lo b¨¢sico estamos trabajando con una herramienta, que es la Ley de Enjuiciamiento Criminal, de finales del siglo XIX. Es la misma ley sobre la que se han ido haciendo retoques y reformas y se han puesto en marcha buenas reformas. Pero pienso que habr¨ªa que hacer muchas m¨¢s...

P. ?Como qu¨¦?

R. Son reformas de calado. Por ejemplo, pienso que habr¨ªa que buscar una agilizaci¨®n de Justicia por la l¨ªnea de llegar lo antes posible al juicio y suprimir papeles. Es decir, suprimir tr¨¢mites que no conducen a nada. Todav¨ªa hay algunos juzgados donde al mismo se?or que ha actuado en el atestado ante la polic¨ªa como testigo se le cita para que ratifique su denuncia y luego se le tiene que citar otra vez a juicio para que vaya como testigo. Pues ese tr¨¢mite intermedio no aporta nada.

P. ?Y en qu¨¦ modelo nos podr¨ªamos fijar para mejorar?

R. En mi opini¨®n, el futuro del proceso penal est¨¢ en otorgar la instrucci¨®n a los fiscales. ?sta es la evoluci¨®n que se est¨¢ siguiendo en todo el mundo. Pero, cada vez que sale este tema en Espa?a, siempre hay alguien que se rasga las vestiduras diciendo que c¨®mo se le va a dar al fiscal la instrucci¨®n. Pues como se hace en todo el mundo. El fiscal es un ¨®rgano p¨²blico que no busca ning¨²n inter¨¦s particular, yo tengo unas funciones que me otorga la ley, tengo obligaci¨®n de imparcialidad... Evidentemente, eso implica la existencia de lo que se conoce como un juez de garant¨ªas, para cuando haya que intervenir un tel¨¦fono o registrar un domicilio. En este momento se da la paradoja en Espa?a de que el juez de instrucci¨®n investiga y, cuando lo considera terminado, se lo env¨ªa al fiscal. Y es el fiscal el que decide si acusa o no. El juez puede tener muy claro que eso es un delito y debe seguir adelante y el fiscal puede pedir el archivo. Entonces, ?para qu¨¦ hemos trabajado in¨²tilmente durante tanto tiempo? El sistema penal espa?ol es muy poco pr¨¢ctico, muy poco operativo.