Libros atravesados por balas
La Guerra Civil dinamit¨® el proceso de construcci¨®n de la Ciudad Universitaria, que se convirti¨® en un verdadero campo de batalla. Las trincheras se construyeron a base de sacos terreros llenos de libros sacados de las bibliotecas de las facultades de Filosof¨ªa y Derecho. Algunos manuales fueron atravesados por proyectiles, como ¨¦ste de la imagen, titulado Index omnium, San Agust¨ªn, 1570, usado como parapeto y perforado por una bala en el frente. Todo esto lo cuenta Pablo Campos Calvo Sotelo en su libro 75 a?os de la Ciudad Universitaria de Madrid.
Desde la proclamaci¨®n de la Rep¨²blica hasta 1936 se hab¨ªan inaugurado varias obras del campus, entre ellas las facultades de Filosof¨ªa, Ciencias, Arquitectura o el Hospital Cl¨ªnico. Otras se encontraban muy avanzadas, como Medicina o la Residencia de Estudiantes.
Durante la guerra, las tropas nacionales ocuparon edificios (o lo que de ellos iba quedando) como el Cl¨ªnico, el Asilo de Santa Cristina, el Instituto de Higiene, la zona de residencias, las escuelas de Agr¨®nomos y Arquitectura, la Casa Vel¨¢zquez y el Palacete. En el resto de los edificios y en el parque del Oeste se situaron las fuerzas republicanas a una distancia de 50 metros del enemigo (Pilar Ch¨ªas, 1986), se?ala el libro.
En marzo de 1939, las tropas de Franco entraron en la capital por la carretera de A Coru?a, atravesando un campus sembrado de trincheras. La pesadilla tocaba a su fin. Las bombas hab¨ªan pulverizado parte de las reci¨¦n levantadas construcciones. Se perdi¨® el 40% de lo que se hab¨ªa erigido hasta julio de 1936.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.