Paseo y tapeo por el centro de Le¨®n

El canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, se dio ayer un verdadero ba?o de multitudes con su amigo Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero al pasear a la ca¨ªda de la tarde por las estrechas calles del casco antiguo de Le¨®n, tierra natal del presidente del Ejecutivo espa?ol.

El canciller de la Rep¨²blica Federal de Alemania salud¨® como su hom¨®logo espa?ol a todo aquel que le acercaba la mano, sin escatimar sonrisas ni muestras de afecto. Antes, en la conferencia de prensa conjunta, Schr?der hab¨ªa insinuado que quer¨ªa ver, cuanto antes, la catedral y el popular barrio H¨²medo, del que tanto le hab¨ªa hablado Zapatero, la zona de vinos de Le¨®n, donde sus tapas de queso, cecina y empanada son famosas. Por eso, no deseaba una larga comparecencia p¨²blica.

Desde hace dos semanas, polic¨ªas de paisano han peinado con discreci¨®n los bares del barrio H¨²medo y las calles adyacentes. Sab¨ªan que, aunque la visita se pudiera retrasar por las reuniones de trabajo, no se iba a anular. "Al final, todos los d¨ªas eran los mismos los que iban a tomar vinos o cortos de cerveza", dec¨ªa ayer uno de los agentes.

En el peque?o bar La Pitanza, construido junto a la plaza Mayor sobre hallazgos medievales, les esperaban a Schr?der y Zapatero amigos y conocidos del presidente. All¨ª permanecieron m¨¢s de media hora, probando los productos de la tierra, incluido el orujo.

El canciller alem¨¢n abandon¨® Le¨®n con un semblante feliz, y con el regalo de un jam¨®n pata negra, aceite de oliva y vino del Bierzo. Schr?der considera que el pan caliente con unas gotitas de aceite de oliva es un manjar.

Entusiasta del jam¨®n

No es el primer jam¨®n que el canciller recibe del presidente espa?ol. El pasado junio, en la cumbre de la OTAN en Estambul, fue obsequiado por Zapatero con otro al mostrarse Schr?der un entusiasta del jam¨®n.

El canciller se sinti¨® en todo momento relajado. Antes de la foto oficial de ambas delegaciones, a primera hora de la tarde, Zapatero rompi¨® el protocolo cuando un grupo de ni?os del Instituto de Ense?anza Secundaria Conde Lucanor, de Pe?afiel (Valladolid), que estaba de excursi¨®n se acerc¨® a la plaza de San Marcos, sede de la Cumbre. Los peque?os coreaban el nombre del presidente del Gobierno como si fuera un jugador de f¨²tbol de primera divisi¨®n.

Zapatero orden¨® a las fuerzas de seguridad que no impidieran el paso a los ni?os y permiti¨® que formaran parte de la foto de familia. "Es mas alto que en la tele y m¨¢s guapo", dec¨ªa una ni?a. "La tele no refleja c¨®mo es en realidad y es mucho m¨¢s simp¨¢tico que cuando sale serio hablando de Bush", a?adi¨® otro de los muchachos. "Creo que est¨¢n aqu¨ª para firmar papeles de pol¨ªtica", concluy¨® un chaval.

La visita del canciller alem¨¢n a Le¨®n fue una de las promesas de Zapatero nada m¨¢s ser nombrado presidente del Gobierno. Otra era celebrar un Consejo de Ministros en Le¨®n. Ha cumplido ambas. Los alemanes prometieron ayer volver para hacer turismo.