La salud mental es cosa de todos

La magia, la mitolog¨ªa o la religi¨®n eran la ¨²nica explicaci¨®n existente a las enfermedades mentales en la antig¨¹edad, lo que las recubr¨ªa de un halo de misterio. Hoy, la situaci¨®n ha cambiado. Los trastornos psiqui¨¢tricos tienen la misma consideraci¨®n que otros trastornos o enfermedades m¨¦dicas, con la peculiaridad de que afectan a la experiencia del ser humano de un modo bastante amplio y especial.

En las ¨²ltimas d¨¦cadas se han obtenido muchos conocimientos acerca de los diversos trastornos psiqui¨¢tricos, han mejorado la comprensi¨®n que se tiene de ellos y las terapias disponibles. No obstante, las causas de las enfermedades psiqui¨¢tricas no siempre son simples ni son tan claras como las de otras enfermedades. El concepto de Salud Mental incluye no s¨®lo la ausencia de enfermedades psiqui¨¢tricas, sino (seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud) un "estado de bienestar global, que afecta a todas las esferas psicol¨®gicas del individuo".

Adem¨¢s del propio paciente, quien m¨¢s directamente sufre la enfermedad mental son sus familiares m¨¢s pr¨®ximos, que le prestan todos los cuidados que son capaces de ofrecer, y que en algunos casos se asocian con otras familias para ayudarse y darse apoyo mutuo. Tradicionalmente se ha hecho as¨ª y as¨ª se ha mantenido hasta hace poco, cuando tanto los enfermos como sus familias han empezado a contar con el apoyo de la Administraci¨®n P¨²blica y de otras entidades.

Ha sido en los ¨²ltimos a?os, fundamentalmente desde 1995, cuando los sucesivos gobiernos auton¨®micos, a trav¨¦s de la Consejer¨ªa de Bienestar Social, han desarrollado una pol¨ªtica social seria y estable, basada en la creaci¨®n de nuevas infraestructuras y en la prestaci¨®n de todo tipo de ayudas. Esto ha venido a aumentar la confianza y la seguridad de las familias en sus posibilidades como n¨²cleo de la sociedad y en las Administraciones P¨²blicas como garantes de unas prestaciones que por derecho les corresponden.

Eso quiere decir que la Consejer¨ªa de Bienestar Social, en nombre del Gobierno Valenciano, continuar¨¢ con la pol¨ªtica de incremento del n¨²mero de plazas y centros para enfermos mentales, un aumento necesario dado que en 1995 los recursos para atender a estas personas apenas exist¨ªan.

As¨ª, mientras en 1996 s¨®lo exist¨ªan 2 centros y 46 plazas para atender a las personas con enfermedades mentales, en la actualidad la Comunidad Valenciana funciona una red que en 2005 contar¨¢ con un total de 1.310 plazas.

Desde 1997 la Comunidad Valenciana dispone de una red de recursos especializados para la atenci¨®n de estas personas entre los que se encuentran los Centros de D¨ªa, Centros de Rehabilitaci¨®n e Integraci¨®n Social (CRIS), Centros Espec¨ªficos para Enfermos Mentales Cr¨®nicos (CEEM) y Viviendas Tuteladas.

Todos estos nuevos servicios dependientes de la Consejer¨ªa de Bienestar Social ofrecen tratamientos especializados para conseguir la rehabilitaci¨®n psicosocial de los enfermos mentales y su consiguiente integraci¨®n social.

Alicia de Miguel es consejera de Bienestar Social.