El Defensor del Menor se opone al uniforme obligatorio en la escuela p¨²blica

No se puede obligar a los alumnos de un centro de educaci¨®n p¨²blico a llevar uniforme escolar si ¨¦stos se niegan. ?sta es la postura del defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro N¨²?ez Morgades, sobre la pol¨¦mica que se ha creado en torno al instituto p¨²blico de secundaria Barrio de Loranca, de Fuenlabrada, que ha impuesto a sus alumnos de 1?, 2? y 3? de ESO (de 12 a 14 a?os) un uniforme compuesto por unos vaqueros sin marca, una sudadera y un determinado ch¨¢ndal para gimnasia. Adem¨¢s ha previsto sanciones para quien no lo vista. "No es legalmente posible, ni siquiera procedimentalmente posible, castigar a los estudiantes por no usar el uniforme", afirm¨® ayer N¨²?ez Morgades.

La oficina del Defensor del Menor estudia en estos momentos la queja presentada por unos cien escolares del centro sobre el uso del vestuario designado y, ante la falta de normativa al respecto de la posibilidad del centro de imponer el uniforme, N¨²?ez Morgades anunci¨® que pedir¨¢ a los responsables de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n que "dicten unas instrucciones lo suficientemente claras". La consejer¨ªa ya se?al¨® el pasado martes que el reglamento sobre el uniforme no permite "imponer ninguna sanci¨®n".De hecho, el director del ?rea Territorial de Educaci¨®n Madrid-Sur, Alberto Gonz¨¢lez, afirm¨® ayer que ha comunicado a la direcci¨®n del instituto p¨²blico Barrio de Loranca que suspenda cautelarmente las sanciones previstas para los alumnos que acudan a clase sin el uniforme, que es obligatorio desde este curso para 1?, 2? y 3? de ESO. Los de 4? de ESO y 1? de bachillerato, por su parte, tienen que llevar obligatoriamente el ch¨¢ndal. Varios padres han tachado la medida, que fue aprobada por el consejo escolar del centro el pasado 5 de octubre, de "ilegal". "Hemos dicho a la direcci¨®n del instituto que suspenda las sanciones hasta que los servicios jur¨ªdicos de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n estudien si la normativa vigente permite estas amonestaciones", se?al¨® Gonz¨¢lez. Aunque la suspensi¨®n es cautelar, fuentes de Educaci¨®n se?alaron que va a ser dif¨ªcil que el Gobierno regional d¨¦ finalmente el visto bueno a las sanciones. De momento, seg¨²n Cecilia Garc¨ªa, jefa de estudios del centro, no se ha puesto ninguna amonestaci¨®n.

Respecto a la obligatoriedad de llevar el uniforme, Alberto Gonz¨¢lez reconoci¨® que existe una laguna jur¨ªdica. "Los servicios jur¨ªdicos no han encontrado nada en la normativa que diga que un instituto p¨²blico no puede imponer un vestuario determinado, pero tampoco hemos encontrado nada que diga que s¨ª que puede. La ley no entra en tantos detalles", explic¨®. "Lo que s¨ª determina la LOCE es que lo que apruebe el consejo escolar es de obligado cumplimiento. Son competencias que entran dentro de la autonom¨ªa que tiene el centro. Otra cosa es el tema de las sanciones", a?adi¨®. El director del ¨¢rea de la zona sur record¨® adem¨¢s que "la mayor¨ªa de los padres y alumnos est¨¢n de acuerdo con la implantaci¨®n del uniforme". "Para los que dicen que no pueden pagar los 90 euros que cuesta el equipo, el centro tiene previstas una serie de ayudas", concluy¨®.

La v¨ªa del acuerdo

El portavoz regional del PSOE en temas de educaci¨®n, Adolfo Navarro, afirm¨® por su parte que respeta la decisi¨®n tomada por el consejo escolar del instituto Barrio de Loranca. "El tema del uniforme no me parece ni bien ni mal siempre que sea una recomendaci¨®n. Comparto el argumento del director de que el uniforme evita desigualdades entre los alumnos; lo que ya no me parece bien es que pueda recaer una sanci¨®n o que sean discriminados los estudiantes que no lo lleven", explic¨®.

Por su parte, el defensor del Menor, Pedro N¨²?ez Morgades, se decant¨® por la v¨ªa "de la persuasi¨®n, de la negociaci¨®n y el di¨¢logo" para implantar los uniformes en las escuelas p¨²blicas que as¨ª lo decidan, nunca la v¨ªa de la sanci¨®n.

El colegio de infantil y primaria Mar¨ªa Moliner, ubicado en el distrito de la capital de San Blas, fue uno de los primeros centros p¨²blicos en adoptar el uniforme escolar, hace tres a?os. Sus pretensiones eran similares a las del instituto de Fuenlabrada, es decir, evitar "la guerra de marcas". Eso s¨ª, la iniciativa siempre ha sido voluntaria; quien quer¨ªa lo llevaba, y quien no, no lo hac¨ªa.

Este curso ser¨¢n poco m¨¢s de veinte los centros p¨²blicos en los que se vista el uniforme. Todos, excepto Barrio de Loranca, son colegios de infantil y primaria. Tanto la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, como el consejero de Educaci¨®n, Luis Peral, se han mostrado a favor del uniforme por ser "un factor de igualaci¨®n social". De tal manera est¨¢n a favor que prometieron subvenciones para que los alumnos de centros p¨²blicos compraran el uniforme. De momento, la consejer¨ªa a¨²n no ha anunciado si esa partida est¨¢ recogida en los presupuestos de 2005.