Kamen recupera la figura del gran duque de Alba

Se ha hecho famoso como "el carnicero de Flandes" y pasa por ser el paradigma de la crueldad espa?ola, pero m¨¢s all¨¢ de la leyenda negra sigue siendo un gran desconocido: la figura de Fernando ?lvarez de Toledo (1507-1582), tercer duque de Alba, apenas ha sido tocada por la historiograf¨ªa hasta hoy. Un hecho que no dejar de asombrar a Henry Kamen, hispanista ingl¨¦s y especialista en los siglos XVI y XVII, que responde a esta falta de estudios con la biograf¨ªa El gran duque de Alba, subtitulada Soldado de la Espa?a imperial (La Esfera de los Libros). "El olvido que padece el duque es un fen¨®nemo raro", afirm¨® Kamen ayer en la presentaci¨®n de su libro en Madrid, y s¨®lo se explica en parte por el "descuido general de la historia militar en Espa?a". Asimismo, destac¨® la necesidad general de una "recuperaci¨®n de la memoria hist¨®rica" de la ¨¦poca del imperio espa?ol y sus personajes.

Seg¨²n Kamen, el duque, que sirvi¨® durante 40 a?os al emperador Carlos V y a su hijo Felipe II, fue un hombre sanguinario, "pero no m¨¢s que algunos de los h¨¦roes de la historia de Espa?a, como Hern¨¢n Cortes o Pizarro". Actu¨® con mano dura en los Pa¨ªses Bajos, adonde fue enviado por Felipe II para sofocar la revuelta protestante. Sin embargo, asegur¨® Kamen, tambi¨¦n gan¨® la reputaci¨®n de un hombre cruel porque se inici¨® "la primera campa?a de propaganda en la historia europea" contra ¨¦l y Espa?a. Para Kamen, el duque de Alba era "un buen administrador" y un "hombre culto y civilizado", pero se equivocaba creyendo "siempre en la fuerza militar". Por ello estaba condenado al fracaso, ya que, seg¨²n el historiador, "no se puede suprimir la voluntad de un pueblo mediante la fuerza militar". "Eso es una lecci¨®n que no se aprendi¨® nunca", concluy¨®, refiri¨¦ndose a las acciones de Estados Unidos.