El te¨®logo dilecto del cardenal Taranc¨®n

Uno de los cerebros mejor amueblados de la jerarqu¨ªa espa?ola, el arzobispo Fernando Sebasti¨¢n, se?alado ya hace treinta a?os por el m¨ªtico cardenal Taranc¨®n como su "te¨®logo preferido" y que ocupa desde entonces muy importantes cargos en la direcci¨®n episcopal, dej¨® boquiabiertos a los dos mil seglares llegados desde todos los puntos de Espa?a para cargarse de raz¨®n y de ¨¢nimos combativos. Lo que escucharon fue una reprimenda general, en un gesto autocr¨ªtico poco o¨ªdo en la Iglesia espa?ola y mediante un discurso imponente, hermoso en las formas, meticuloso en el an¨¢lisis, claro en el diagn¨®stico, que recibi¨® espont¨¢neas alabanzas incluso de aquellos a los que m¨¢s hab¨ªa enojado. Otros expresaron m¨¢s tarde su disgusto resignado por ver c¨®mo un prelado tan relevante va a jubilarse muy pronto -este pr¨®ximo mes cumple 75 a?os- arrinconado en dos di¨®cesis de mediana relevancia: Pamplona, de la que es arzobispo, y Tudela, que dirige como obispo.

Fernando Sebasti¨¢n (Calatayud, 14 de diciembre de 1929) es sobre todo un te¨®logo, y por tal fue escogido muy pronto, en la d¨¦cada de los sesenta del siglo pasado, para regir la Pontificia de Salamanca, donde tuvo de subalternos al cardenal Rouco y al obispo Seti¨¦n. Con el primero compiti¨® en 1999 por la presidencia de la Conferencia Episcopal, perdiendo por poco, y los dos viajan desde entonces juntos, pero no revueltos.

Entre los muchos servicios que el catolicismo debe al arzobispo de Navarra est¨¢ el haber zanjado, con un libro demoledor, los tradicionales equ¨ªvocos episcopales respecto del nacionalismo vasco en general y, sobre todo, ante la corriente terrorista de ese sector. Meses antes de aquel documento, hecho suyo por la Conferencia Episcopal, el Gobierno del PP y los prelados ri?eron seriamente por ese motivo, hasta el punto de que Aznar orden¨® a su ministro de Exteriores llamar a cap¨ªtulo al embajador del Vaticano en Madrid. Desde que Sebasti¨¢n puso letra clara y antiterrorista, incluso antinacionalista, donde antes reinaba la confusi¨®n o la comprensi¨®n de algunos renombrados eclesi¨¢sticos, nadie ha vuelto a se?alar a los prelados como laxos o equidistantes en tan criminal asunto.

Otra faceta en la que el arzobispo Sebasti¨¢n tampoco deja espacio para equ¨ªvocos es la pol¨ªtica. Acusado inicialmente de progresista junto a otros obispos del grupo Taranc¨®n -el cardenal Amigo, los arzobispos Cirarda, Yanes y D¨ªaz Merch¨¢n, y los obispos Os¨¦s, Echarren e Iniesta, entre otros pocos-, Fernando Sebasti¨¢n sostiene que la transici¨®n fue impulsada, entre otros, por la Iglesia cat¨®lica y que, sin embargo, la democracia ha sido injusta y desagradecida, en todos estos a?os, con el catolicismo. Ayer lo reiter¨® de una manera que son¨® brutal. "Aunque oficialmente la transici¨®n pol¨ªtica se hizo en forma de reconciliaci¨®n, en realidad los a?os de vida democr¨¢tica han permitido el desarrollo de una mentalidad revanchista seg¨²n la cual los vencedores de la guerra civil eran injustos y corruptos, mientras que la justicia y la solidaridad estaba toda y s¨®lo en el campo de los vencidos", clam¨® el prelado.