Revalorizaci¨®n de lo propio

Verdaderamente, la Real Academia de la Lengua Espa?ola, la Federaci¨®n de Academias de Lengua Espa?ola; la Academia Argentina de Letras, el Instituto Cervantes, est¨¢n cumpliendo una funci¨®n central que estos congresos tienen ante s¨ª, cual es la de avivar la conciencia de la existencia de una corresponsabilidad de gobiernos, instituciones y personas en la promoci¨®n y mantenimiento de una unidad esencial de nuestra lengua.

Nosotros estamos en una verdadera tarea de reconstrucci¨®n, no s¨®lo de recuperar la capacidad de producir, que mejora los indicadores econ¨®micos y sociales, sino tambi¨¦n de la dignidad y memoria hist¨®rica; podemos dar fe de la importancia y la necesidad de la afirmaci¨®n de la identidad de un pueblo.

Mucho de la tarea que nos preocupa a los argentinos pasa por elevar nuestra autoestima; volver a creer en nuestra capacidad de crear, de construir, de recuperar, de revalorizar nuestra fe, nuestra laboriosidad y nuestra constancia, que constituyen cuestiones claves para motorizar el crecimiento que hoy nos tiene por protagonistas.

La afirmaci¨®n de la identidad de un pueblo como el nuestro necesita poner lo cultural como centro y en el centro de nuestra cultura est¨¢ nuestra lengua. Que se reflexione respecto de las implicancias que la globalizaci¨®n pueda tener en la identidad ling¨¹¨ªstica, como sugiere el lema de este Congreso, puede ser muy ¨²til para prevenir males futuros. Ser¨¢ ¨²til tambi¨¦n que se dedique tiempo y esfuerzo al estudio de las graves consecuencias que la exclusi¨®n, el hambre y la pobreza, que afectan a muchos de los pa¨ªses de habla hispanoamericana, tienen en lo que respecta al uso de la lengua y al acceso a la educaci¨®n y a los bienes culturales que ella posibilita en esta ¨¦poca de globalizaci¨®n.

En medio de esa globalizaci¨®n que achica distancias y que en la d¨¦cada pasada en nuestra patria, lamentablemente, fue sin¨®nimo de apertura indiscriminada de la econom¨ªa, desvalorizaci¨®n de lo local e incremento de las desigualdades sociales, la esperanza est¨¢ en la revalorizaci¨®n de lo propio. All¨ª es donde cobra especial importancia el concepto de la identidad ling¨¹¨ªstica, la lengua atesora una tradici¨®n y una memoria que habilita la comunicaci¨®n como fundamento de los consensos b¨¢sicos requeridos por la aut¨¦ntica vida en democracia y establece lazos para la m¨¢s efectiva integraci¨®n de los pueblos.

Pero esa identidad no tiene que ser una cerraz¨®n que impida el di¨¢logo intercultural, estar¨ªa Am¨¦rica negando su condici¨®n e ignorando lo ind¨ªgena y su riqueza ling¨¹¨ªstica. El paisaje latino es hoy una policrom¨ªa que cuenta con mestizaje de etnias, de costumbres y de lenguas en su modo de ser. Nuestra literatura expresa de modo palpable toda esa riqueza y corresponde que deje entonces a los escritores, a los profesores, a los ling¨¹istas y participantes en general de este Congreso, la tarea de explorar los esbozos de ideas que me atrevo a expresar desde la humilde condici¨®n que me ubica para la inauguraci¨®n del evento.

En definitiva, el centro de mi vocaci¨®n no est¨¢ en el estudio de la lengua, sino en la pol¨ªtica, y ubico en el nudo de la pol¨ªtica, de esa actividad noble que debe ser la pol¨ªtica con may¨²sculas, el poder encontrar los medios pr¨¢cticos de concretar con transparencia las ideas que puedan ayudar a la obtenci¨®n del bien com¨²n.

Nuestro Gobierno tiene entre sus metas centrales la inclusi¨®n, la igualdad y la justicia social. El reconocimiento de la diversidad de realidades, de experiencias, de territorios y culturas, las diferencias y alteridades que enriquecen nuestras sociedades, son valores que respetamos y queremos preservar. Ello no es un obst¨¢culo para que reconozcamos el valor y el poder de nuestra propia identidad, y en ese lugar cobra valor lo que se pueda hacer por defender la identidad de nuestra lengua en esta verdadera sociedad de la informaci¨®n. Saldar brechas internas, evitar la fragmentaci¨®n, bien puede ser el trabajo de la identidad cultural que traduce nuestra lengua.

Quiero para finalizar compartir los homenajes que en el curso de esta jornada se concretar¨¢n a insignes personalidades de la literatura hispanoamericana y adem¨¢s quiero desearles a la totalidad de nuestros visitantes una muy feliz estad¨ªa, que no tengo duda de que tendr¨¢n en esta acogedora ciudad.

Doy de esta manera formal inicio a la sesi¨®n inaugural de este III Congreso Internacional de la Lengua Espa?ola. Y hoy, a pesar de sus dificultades y retrasos, a pesar del largo camino que le queda por recorrer hacia su desarrollo, lacerada por la exclusi¨®n y la desigualdad, Am¨¦rica est¨¢ plet¨®rica de esperanzas y da calor a nuestros sue?os de cambio, es un buen d¨ªa para que realicen vuestro trabajo.

Extracto del discurso pronunciado por el presidente de Argentina, N¨¦stor Kirchner.