La Guardia Civil halla 19 kilos de Goma 2 en una mina abandonada
La explotaci¨®n asturiana pertenece a la misma empresa en la que trabaj¨® Trashorras
La Guardia Civil se incaut¨® el pasado viernes de casi 19 kilos de Goma 2 en el concejo asturiano de Tineo, dentro de una mina de caol¨ªn abandonada desde hace unos 10 a?os. Los 123 cartuchos hab¨ªan caducado y se encontraban en una de las galer¨ªas de la explotaci¨®n, seg¨²n inform¨® ayer la comandancia de Gij¨®n. La antigua explotaci¨®n, Nueva Perdiz, se halla en el mismo enclave y pertenece a la misma empresa (Caolines de Merill¨¦s) que la mina Conchita, donde trabaj¨® Emilio Su¨¢rez Trashorras y de la que rob¨® supuestamente los explosivos usados en los atentados del 11-M.
Los 123 cartuchos estaban mojados, lo que los inutilizaba para hacer explosi¨®n
La explotaci¨®n revisada el pasado viernes por los agentes de la intervenci¨®n de armas del municipio de Salas se encuentra en un lugar escarpado en el denominado Arroyo Farand¨®n (cerca del r¨ªo Narcea) a unos 2,5 kil¨®metros de la carretera m¨¢s cercana.
Trashorras, encarcelado por su presunta participaci¨®n en el suministro de la dinamita utilizada en los atentados de Madrid, ya hab¨ªa sugerido en una de sus declaraciones ante el juez que se investigase una mina en la zona de Farand¨®n, informa Javier Cuartas.
Los agentes se adentraron sobre la una de la tarde en la cueva, que consta de dos t¨²neles bien diferenciados y cuyas entradas est¨¢n anegadas de agua procedente de un caudal cercano. A unos 195 metros de la entrada de una de las minas, los guardias civiles hallaron los 123 cartuchos de Goma 2. Estaban en muy mal estado de conservaci¨®n: los barrenos estaban mojados y embarrados, lo que los inutilizaba para hacer explosi¨®n. Esto hace suponer que fueron abandonados cuando se dej¨® la explotaci¨®n. Este hecho descarta que fueran a ser utilizados en alg¨²n acto delictivo, seg¨²n el instituto armado.
Los t¨¦cnicos en desactivaci¨®n de explosivos (Tedax) de la Guardia Civil analizaron el explosivo y lo destruyeron tras informar al juez de guardia. Fuentes del instituto armado se?alaron que la Goma 2 fue fabricada, como muy tarde, en 1998. Fue ese a?o cuando pas¨® a distribuirse la Goma 2 Eco.
Este registro se enmarca dentro de los controles extraordinarios que est¨¢ realizando la Guardia Civil en toda Asturias para detectar la venta y distribuci¨®n ilegal de explosivos tras los atentados del 11-M.
La Asociaci¨®n Unificada de la Guardia Civil (AUGC), la mayoritaria de la regi¨®n con 722 afiliados, record¨® el fin de semana que intent¨® reunirse reiteradamente con la anterior delegada del Gobierno en Asturias, Mercedes Fern¨¢ndez (PP), para entregarle un detallado informe de los problemas de falta de personal y de medios que sufren las intervenciones de armas y explosivos de Asturias. La delegada, pese a tener registradas varias solicitudes por parte de la AUGC, nunca les recibi¨®. De hecho, se comprometi¨® en p¨²blico durante la celebraci¨®n de la Virgen del Pilar (patrona del instituto armado) a recibir a los representantes del colectivo pero nunca lo hizo, seg¨²n recuerda Alberto Garc¨ªa Llana, delegado de la AUGC en Asturias.
El informe recoge que los guardias civiles carecen de suficiente personal para supervisar todas las explotaciones. Asturias tiene una docena de intervenciones de armas y explosivos, a las que no est¨¢n destinados m¨¢s de 20 efectivos. En algunas de ellas, s¨®lo trabaja un cabo y un guardia, lo que obliga a que uno de ellos siempre est¨¦ en la oficina. Esto supone que un solo agente tenga que revisar todas las minas de su demarcaci¨®n. "Dado que normalmente existen en una explotaci¨®n varios dep¨®sitos situados en diferentes galer¨ªas y profundidades, la inspecci¨®n de una mina puede llegar a demorarse varios d¨ªas", explica el informe.
Adem¨¢s, los guardias carecen de medios materiales como botas o cascos necesarios para bajar a las minas y controlar los polvorines peque?os, llamados minipoles. De ah¨ª, que tengan que avisar con dos d¨ªas de antelaci¨®n a los responsables de las explotaciones para que les faciliten el material necesario. Eso supone que se elimina el factor sorpresa.
Adem¨¢s, algunos guardias son obligados a dejar su arma reglamentaria fuera de las minas, sin las suficientes medidas de custodia, y a firmar un papel que elude de responsabilidad a la direcci¨®n de la mina, en caso de accidente. "Tambi¨¦n es cierto que durante los ¨²ltimos cuatro a?os ha habido una orden t¨¢cita por parte de la Delegaci¨®n del Gobierno de que no hab¨ªa que bajar a las minas a controlar los minipoles. Un guardia se lesion¨® y, como eso supon¨ªa muchas responsabilidades, hicieron la vista gorda", se?ala Garc¨ªa Llana.
Por ello, la AUGC pide mejora de los medios t¨¦cnicos (entre ellos botas, cascos y coches todoterreno) y destinar m¨¢s guardias a las intervenciones de armas. Adem¨¢s, los guardias no reciben ning¨²n incentivo econ¨®mico por la especialidad, pese a que necesitan una preparaci¨®n especial en el control y vigilancia de armas y explosivos. Tambi¨¦n proponen la creaci¨®n de una unidad especial para investigar el tr¨¢fico il¨ªcito de explosivos para toda la regi¨®n, de forma que se descargue de esta tarea a las intervenciones de armas.
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