Los propagandistas cat¨®licos aclaman a Buttiglione como a un "h¨¦roe de la fe"
Ni los elementos del f¨²tbol vencieron en la noche del s¨¢bado a Rocco Buttiglione en su intempestivo paseo triunfal por el VI Congreso Cat¨®licos y Vida P¨²blica, clausurado ayer en Madrid. El ministro italiano, vetado como comisario de Justicia de la Uni¨®n Europea por sus ideas sobre la mujer y la homosexualidad, fue recibido anteanoche en el aula magna de la Fundaci¨®n San Pablo-CEU con una prolongad¨ªsima ovaci¨®n y llen¨® otras dos salas del edificio universitario con j¨®venes entusiasmados de seguir por televisi¨®n el discurso del h¨¦roe pol¨ªtico del catolicismo actual. No defraud¨®. Si otros cristianos han sufrido por su fe "hasta martirio o c¨¢rcel" en el siglo pasado -con citas al caso polaco-, bien pod¨ªa ¨¦l "sacrificar por la fe una silla en la Comisi¨®n Europea". "No s¨¦ si hubiera arriesgado mi cabeza por la fe, pero s¨ª ese sill¨®n", dijo con humor tras apelar al caso Tom¨¢s Moro.
El congreso de los propagandistas cat¨®licos hab¨ªa programado a Buttiglione en febrero pasado, antes de que el antiguo militante de Comuni¨®n y Liberaci¨®n saltase a la fama por el conflicto con el Parlamento Europeo. Pero la misi¨®n congresual del famoso ministro de Silvio Berlusconi era secundaria: presidir¨ªa una mesa sin tiempo para coloquios y presentar¨ªa a su ponente, el polaco Stanislaw Grygiel, disc¨ªpulo del papa Wojtyla, que lo sac¨® de Cracovia para presidir en Roma el Instituto Juan Pablo II.
Tras el "morbo del incidente de fe" en Estrasburgo, los organizadores del congreso cat¨®lico decidieron aprovechar la presencia de su "valeroso" correligionario, pero no encontraron otro hueco que el de la noche del s¨¢bado, en pleno partido de f¨²tbol. Lo cont¨® con iron¨ªa el coordinador de la intempestiva sesi¨®n, el periodista Ram¨®n Pi. Faltaba menos de una hora para la medianoche cuando levant¨® la sesi¨®n, con los presentes -m¨¢s de mil personas- puestos en pie en otro sonoro aplauso.
"Poco es mejor que nada"
El pol¨ªtico italiano habl¨® poco de su fallida candidatura a comisario y fue pronto al grano, que, seg¨²n ¨¦l, aprieta y amenaza el futuro de Europa: el relativismo ¨¦tico, el abandono de la familia, la no distinci¨®n entre el bien y el mal, o la falta de conciencia. "Sin conciencia no hay pol¨ªtica. ?Qu¨¦ motivaci¨®n tendr¨¢n los pol¨ªticos para resistir la corrupci¨®n si no tienen conciencia?", se pregunt¨® en un perfecto espa?ol y con pasi¨®n de catec¨²meno. Tambi¨¦n ret¨® a los presentes a "tener coraje", a no tener "verg¨¹enza de ser cat¨®licos", dentro de una Europa que "discrimina a los cat¨®licos".
El ministro Buttiglione elabor¨® un discurso cristiano -"podemos vencer si tenemos fe, pero sin fe no podremos convencer ni movilizarnos"-, pero tambi¨¦n pol¨ªtico: en defensa de la futura Constituci¨®n Europea, pese a la insistencia de varios congresistas para arrancarle su rechazo -"entre poco o nada, poco es mejor", dijo citando al Papa-; y, sobre todo, en defensa de la familia. "El problema no es la legalizaci¨®n del matrimonio gay, sino la abolici¨®n del matrimonio. Decir que todo es familia es decir que nada es familia", dijo.
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