Bueno, barato y saludable

Una y otra vez la pregunta se repite: ?Es posible comer r¨¢pido y bien sin pagar facturas desmesuradas? ?Existen establecimientos en Madrid donde los productos sean razonablemente buenos y la cocina posea cierta calidad? Afortunadamente, en los dos ¨²ltimos a?os se han inaugurado locales que calcan los patrones norteamericanos, sin que por ello incurran en los pecados de la comida basura. Y, por supuesto, han abierto sus puertas algunas bocadiller¨ªas capaces de desempe?ar una funci¨®n parecida.

Si admitimos con Ferran Adri¨¤ que el concepto fast food (comida r¨¢pida) no corresponde a un tipo de comida sino a una manera de tratar y servir los alimentos, es evidente que en a?os venideros la dignificaci¨®n de la comida r¨¢pida pasar¨¢ por seleccionar buenos productos y por manipularlos de la forma adecuada.

Productos frescos, platos imaginativos y bocadillos integran la nueva cocina urbana

No hay mejor ejemplo que el de las hamburguesas. Si se elaboran con carnes nobles cortadas a cuchillo constituyen una exquisitez, pero si proceden de recortes de desecho se convierten en el s¨ªmbolo de la peor alimentaci¨®n. M¨¢s a¨²n cuando las patatas se fr¨ªen en grasas infectas, como suele ser habitual. En Madrid, los bocadillos y los montaditos siguen ganando la batalla al fast food basado en la hamburguesa. Se reconozca o no, pocas cosas resultan m¨¢s suculentas que un bocadillo de calidad.

Entre los ¨²ltimos locales de comida r¨¢pida en llegar a la capital figuran dos de inter¨¦s. En La Montader¨ªa, bar angosto que cada mediod¨ªa se llena a rebosar, la oferta de montaditos y bocadillos es inabarcable.

No menos interesante resulta La Paninoteca d'E, decorada a la ¨²ltima, que podr¨ªa definirse como la catedral de los bocadillos para gourmets. Bajo la asesor¨ªa del conocido cocinero Sergi Arola (La Broche), reci¨¦n fichado por la casa, se siguen ofreciendo dos de sus especialidades m¨¢s deliciosas: los bocadillos de torta del Casar con r¨²cola y los mediterr¨¢neos de jam¨®n.

Con hechuras m¨¢s firmes, aunque fiel a la idea de restaurante informal, abri¨® sus puertas hace algunos meses el ya popular Fast Good, una idea del celeb¨¦rrimo Ferran Adri¨¤ para la cadena NH. No se trata de un fast food corriente, porque los productos son dignos y se preparan de manera adecuada. Tampoco es un quick service (servicio fulminante), pero s¨ª entronca con la idea de fast casual (r¨¢pido y desenfadado) y de self service (autoservicio). En Fast Good se puede paladear una de las hamburguesas con patatas m¨¢s nobles de la ciudad o unos buenos huevos fritos con jam¨®n.

En semejante idea, interpretada de otra manera, se basa Iboo, local de nuevo estilo cuyo asesor es el madrile?o Mario Sandoval, cocinero que la pasada primavera gan¨® el campeonato de Espa?a para j¨®venes profesionales. Su carta la componen platos meticulosamente estudiados con apariencia de alta cocina. Recetas contempor¨¢neas, que llegan avaladas por mil recomendaciones diet¨¦ticas y que se elaboran en un lugar distinto al de su venta.

Se trata de un restaurante sin cocina (una avanzadilla del futuro), donde los platos preparados, ¨¦sos que ahora se denominan 5? gama, llegan al restaurante en bolsas ultracongeladas al vac¨ªo, que luego se regeneran tras un proceso veloz. Es as¨ª como se consigue una pechuga de pintada en su punto perfectamente guisada, una ensalada de pasta con hierbas o algunos postres tan sugerentes como la macedonia de frutos rojos con helado. Y todo sin sobrepasar los 15 euros. O tal vez menos, en funci¨®n del tipo de men¨². Platos que gustan a quienes ans¨ªan disfrutar de ambientes desenfadados sin pagar demasiado.

En otra l¨ªnea de trabajo se encuentra la cadena madrile?a Delina's, que desde hace algunos a?os viene apostando por la calidad. Resulta encomiable su preocupaci¨®n por la selecci¨®n de las materias primas y el frescor de sus productos, actitud que ratifica el conjunto de su oferta desde los embutidos hasta el pan. En todas las unidades de esta cadena, que tan s¨®lo funcionan al mediod¨ªa, se sirven bandejas de sushi japon¨¦s reci¨¦n elaboradas, buenos s¨¢ndwiches de creaci¨®n, magn¨ªficos wraps (obleas enrolladas con rellenos sustanciosos) y hasta caf¨¦ selecto de Colombia.

En estos momentos resulta evidente que para despachar comida r¨¢pida hace falta pensar en la salud. A tenor de las ¨²ltimas tendencias, una nueva cocina urbana empieza a despuntar.

Delina's. Precio aproximado: entre 15 y 20 euros. Gran V¨ªa, 51 (esquina a San Bernardo). Tel¨¦fono: 91 559 69 64. Jorge Juan, 21. Tel. 91 576 91 21. Paseo de la Castellana, 191. Torres KIO. Tel. 91 315 27 85. Paseo de la Castellana, 4. Tel. 91 576 61 32. Iboo. Entre 10 y 12 euros. Sor ?ngela de la Cruz, 17. Tel. 91 570 25 95. Fast Good. Entre 15 y 18 euros. Padre Dami¨¢n, 23 (hotel Eurobuilding). Tel. 91 343 06 55. La Paninoteca d'E. Alrededor de 25 euros. Vel¨¢zquez, 32. Tel. 91 426 38 16. La Montader¨ªa. Alrededor de 20 euros. Lagasca, 42. Tel. 91 575 57 41.